El entorno del humedal se recuperará con una limpieza y nuevos senderos Se estudia hacer lo mismo en Maroño MARTA PECIÑA/LLODIO OLARTE. La presa está situada entre Llodio y Luiaondo.

Anegada: Las lluvias torrenciales de 1983 anegaron de lodos el embalse, proyectado para abastecer de agua. Desde entonces, no ha vuelto a utilizarse.

Proyecto: El Ayuntamiento de Llodio colocará una turbina para producir electricidad en el salto de la presa.

Entorno de la presa: La recuperación de Olarte incluirá una limpieza del humedal, senderos para peatones y bicicletas. Se trata de un área protegida.

La presa de Olarte, ubicada entre Llodio y Luiaondo, servirá para producir electricidad, según anunció el alcalde en funciones de la primera localidad, Jon Karla Menoyo. Este salto de agua, situado entre el embalse y el arroyo que desemboca en el Nervión, servirá para instalar una pequeña turbina que aproveche la diferencia de altura para generar energía eléctrica. Menoyo avanzó que «la misma medida se estudia para la presa de Maroño», puesto que en este caso, el dique es mucho más alto.

La propuesta se incluye dentro del programa que la Corporación llodiana está poniendo en marcha para implantar energías alternativas en las instalaciones públicas. Los primeros frutos de esta iniciativa se pueden ver ya en el pabellón de Arza, donde se han colocado ya 280 paneles solares para producir energía eléctrica que se vierte a la red.

Las mejoras en la presa de Olarte no se limitarán al aprovechamiento de su potencial energético puesto que este humedal está protegido por su riqueza biológica. El Consistorio va a mejorar el entorno de esta zona protegida, que será sometida a una limpieza. La intervención que se ha programado dotará a la zona de nuevos caminos preparados para que se pueda pasear con comodidad. También se van a colocar señales para orientar a los visitantes.

El portavoz del gobierno municipal, Hernando Lacalle, avanzó que «se van a retirar los residuos vegetales y se desbrozará el monte bajo». Entre las actuaciones previstas, figura también la retirada de la barandilla metálica de la pasarela de hormigón que conduce a la presa y mejorar el acceso desde la parte baja del monte.

Como remate, se habilitarán un aparcamiento de bicicletas y un circuito de pasaralelas peatonales, de manera que los caminantes o cicloturistas puedan rodear el humedal y al mismo tiempo conocer detalles sobre la fauna que habita en la zona a través de los carteles.

El gran interés biológico de este entorno se deriva de la gran cantidad de las aves acuáticas que utilizan esta presa para descansar o alimentarse en distintos períodos del año.

Anegada

La presa de Olarte quedó inutilizada por las lluvias torrenciales de agosto de 1983. En aquella fecha, toneladas de barro cayeron sobre el vaso que almacenaba el agua que desde hacía muy poco tiempo abastecía de agua a Llodio.

Tras la inundación, el pequeño embalse dejó de usarse como depósito para el consumo. Las instituciones alavesas, junto con el Consistorio, consideraron construir un nuevo pantano -el de Maroño- para solucionar el suministro de agua de la comarca. Desde entonces, Olarte se convirtió en un vergel.