Un informe alerta de que el estado de las cuencas fluviales de Gozón es «crítico»

Mon, 01/01/2007

El Comercio

El informe encargado por el Ayuntamiento de Gozón para conocer el estado de los ríos y arroyos del concejo ha arrojado un resultado demoledor y revela que «la situación es critica». Así lo definió el autor del estudio, Alfonso Fernández Rodríguez, experto y profundo conocedor del medio rural del concejo. El trabajo servirá para elaborar un estudio de la situación de las nueve cuencas fluviales con las que cuenta el territorio y se remitirá al Principado y a la Confederación Hidrográfica como organismos competentes en la materia.

El interés municipal pasa por la elaboración de un plan de recuperación de las principales arterias fluviales del concejo. Un programa que, a la vista de los datos recopilados, requerirá de una urgente actuación si se quieren recuperar los recursos existentes, que totalizan 178.032 metros cuadrados de fuentes, regatos, arroyos y ríos que conforman las cuencas fluviales del municipio.

En líneas generales, los recursos hídricos son muchos y abundantes, pero destaca, sobre todo, la advertencia de una posible desaparición de las fuentes.

También se pone de relieve que de todas las cuencas, la que presenta una mayor degradación es la del río Llantada. Con sus 15.999 metros cuadrados, apenas dispone de caudal con remansos de aguas estancadas en algunos de sus tramos donde abunda la maleza que propicia la generación de vertederos clandestinos. Aspectos que predominan en todos los lugares próximos a los arroyos que hay en el concejo, donde los lugareños llegan, incluso, a alterar los cauces y a cortar la corriente de agua.

En contraposición del Llantada, se encuentra el río Vioño, la principal arteria fluvial de Gozón con una cuenca que totaliza 58.963 metros cuadrados. Este es uno de los mejor conservados, esta vez, gracias a los cuidados de los vecinos. Situado en el corazón del concejo, su cauce se nutre de nueve pequeños afluentes. Otra cuenca que también se salva de la degradación es la del Llampero en San Martín de Podes. Según puso de relieve el concejal de Medio Ambiente y Medio Rural, Ramón Artime, «esta situación se debe en gran medida a la necesidad de disponer de una red de saneamiento en las zonas rurales que impida los vertidos al río». Ramón Artime, considera urgente que Confederación Hidrográfica «acometa el saneamiento de las cuencas, porque el Ayuntamiento no es competente en esta materia».