Alonso (CHE) asegura que la obra de emergencia en el Canal de Aragón y Cataluña permite salvar el año agrícola
Tue, 10/05/2005
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, José Luis Alonso, aseguró hoy en declaraciones a Europa Press que la obra hidráulica de emergencia que se va a acometer en la Zona Alta del Canal de Aragón y Cataluña permite salvar el año agrícola, ya que el embalse de Barasona --principal fuente de recursos-- tiene poca reserva, unos 40 hectómetros cúbicos de agua.
La Zona Alta del Canal --aguas arriba del Coll de Foix-- abastece a unas 54.000 hectáreas, que se riegan siempre desde Barasona. Cuando este embalse tiene mucha agua se utiliza también para la Zona Baja. Si no tiene reservas para todo el Canal, el tramo de abajo recibe las aguas del río Noguera Ribagorzana, procedentes del embalse de Santa Ana.
Como el Noguera Ribagorzana tiene agua suficiente, la actuación de emergencia consiste en tomar el caudal del este río y llevar el agua contracorriente hacia la parte alta del Canal para no agotar las existencias de Barasona. Así, 17.000 hectáreas que de normal se regarían desde este embalse, se abastecerán del Noguera Ribagorzana.
Para ello, se dividirá el Canal en siete tramos mediante unas compuertas. En cada una de ellas se pondrá una serie de bombas y se irá elevando el agua hacia arriba. "Esto nos permitirá salvar las plantaciones de frutales de las 50.000 hectáreas de la Zona Alta, ya que regaremos 17.000 desde el Noguera Ribagorzana y reservaremos el agua de Barasona para sólo unas 33.000", explicó Alonso.
La obra, que fue aprobada el viernes en Consejo de Ministros, tiene un coste total de 3,6 millones de euros, que financiará íntegramente el Gobierno central. Los trabajos comenzarán "lo antes posible", dijo Alonso, pero no inmediatamente porque las bombas que se necesitan son especiales y no es fácil encontrarlas en el mercado. Elevar el agua contracorriente "no es algo que se haya hecho mucho en España", aclaró el presidente de la CHE.
"LOS REGANTES ESTÁN A FAVOR"
José Luis Alonso visitó hoy la zona donde se ubicará la obra de emergencia y mantuvo una reunión de trabajo con la Comunidad de Regantes del Canal de Aragón y Cataluña. El presidente de la CHE estuvo acompañado por el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, y el consejero de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón, Gonzalo Arguilé.
"Hemos estado viendo las instalaciones y hablando con los regantes, quienes estaban francamente contentos porque se les hubiera atendido la petición y, de hecho, han destacado la buena acogida que han tenido por parte de las instituciones", aseguró Alonso. "Es lógico que estén a favor porque con esta actuación se va a poder salvar el año", insistió.
Durante los dos o tres meses que esté operativa, se garantizará el abastecimiento de agua, "no mucha", matizó, "pero al menos no se dará el caso de que el Canal cierre por falta de reservas para la Zona Alta". Por tanto, Alonso insistió en que esta nueva infraestructura está siendo bien acogida por los regantes, "independientemente de que sigan pidiendo que se abra San Salvador", matizó.
En cuanto a las críticas de algunos regantes de Tamarite de la Litera, una de las zonas más castigadas por la sequía, quienes pedían regulaciones internas y no una política de obras de urgencia, el presidente de la CHE informó de que en el transcurso de la visita "no ha habido pancartas ni problemas". Además, "el presidente de la Comunidad de Regantes del Canal de Aragón y Cataluña los recibirá mañana para informarles del proyecto", añadió.
Por otra parte, el presidente de la CHE informó de que el Gobierno central ya ha aprobado la otra infraestructura de urgencia que se hará en Huesca para garantizar el agua de boca a la capital oscense. Los trabajos, financiados por el Gobierno central, el Ejecutivo autónomo y el Ayuntamiento de Huesca, comenzarán en breve. De hecho, ya se han iniciado los trámites para la compra de material, concretó Alonso.
La Zona Alta del Canal --aguas arriba del Coll de Foix-- abastece a unas 54.000 hectáreas, que se riegan siempre desde Barasona. Cuando este embalse tiene mucha agua se utiliza también para la Zona Baja. Si no tiene reservas para todo el Canal, el tramo de abajo recibe las aguas del río Noguera Ribagorzana, procedentes del embalse de Santa Ana.
Como el Noguera Ribagorzana tiene agua suficiente, la actuación de emergencia consiste en tomar el caudal del este río y llevar el agua contracorriente hacia la parte alta del Canal para no agotar las existencias de Barasona. Así, 17.000 hectáreas que de normal se regarían desde este embalse, se abastecerán del Noguera Ribagorzana.
Para ello, se dividirá el Canal en siete tramos mediante unas compuertas. En cada una de ellas se pondrá una serie de bombas y se irá elevando el agua hacia arriba. "Esto nos permitirá salvar las plantaciones de frutales de las 50.000 hectáreas de la Zona Alta, ya que regaremos 17.000 desde el Noguera Ribagorzana y reservaremos el agua de Barasona para sólo unas 33.000", explicó Alonso.
La obra, que fue aprobada el viernes en Consejo de Ministros, tiene un coste total de 3,6 millones de euros, que financiará íntegramente el Gobierno central. Los trabajos comenzarán "lo antes posible", dijo Alonso, pero no inmediatamente porque las bombas que se necesitan son especiales y no es fácil encontrarlas en el mercado. Elevar el agua contracorriente "no es algo que se haya hecho mucho en España", aclaró el presidente de la CHE.
"LOS REGANTES ESTÁN A FAVOR"
José Luis Alonso visitó hoy la zona donde se ubicará la obra de emergencia y mantuvo una reunión de trabajo con la Comunidad de Regantes del Canal de Aragón y Cataluña. El presidente de la CHE estuvo acompañado por el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, y el consejero de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón, Gonzalo Arguilé.
"Hemos estado viendo las instalaciones y hablando con los regantes, quienes estaban francamente contentos porque se les hubiera atendido la petición y, de hecho, han destacado la buena acogida que han tenido por parte de las instituciones", aseguró Alonso. "Es lógico que estén a favor porque con esta actuación se va a poder salvar el año", insistió.
Durante los dos o tres meses que esté operativa, se garantizará el abastecimiento de agua, "no mucha", matizó, "pero al menos no se dará el caso de que el Canal cierre por falta de reservas para la Zona Alta". Por tanto, Alonso insistió en que esta nueva infraestructura está siendo bien acogida por los regantes, "independientemente de que sigan pidiendo que se abra San Salvador", matizó.
En cuanto a las críticas de algunos regantes de Tamarite de la Litera, una de las zonas más castigadas por la sequía, quienes pedían regulaciones internas y no una política de obras de urgencia, el presidente de la CHE informó de que en el transcurso de la visita "no ha habido pancartas ni problemas". Además, "el presidente de la Comunidad de Regantes del Canal de Aragón y Cataluña los recibirá mañana para informarles del proyecto", añadió.
Por otra parte, el presidente de la CHE informó de que el Gobierno central ya ha aprobado la otra infraestructura de urgencia que se hará en Huesca para garantizar el agua de boca a la capital oscense. Los trabajos, financiados por el Gobierno central, el Ejecutivo autónomo y el Ayuntamiento de Huesca, comenzarán en breve. De hecho, ya se han iniciado los trámites para la compra de material, concretó Alonso.