Once pueblos vierten aguas residuales a los pantanos que abastecen al centro de Asturias
Sat, 14/08/2004
Campo de Caso,
Pablo CASTAÑO
Once pueblos del concejo de Caso siguen vertiendo sus aguas residuales al sistema de pantanos del alto Nalón, que abastece de agua potable a todo el centro de Asturias a través de la red de Cadasa. La falta de depuradoras y la precariedad de los sistemas de saneamiento hacen que los residuos ganaderos y las aguas fecales de más de mil vecinos se viertan directamente a los cauces que alimentan los pantanos de Tanes y Rioseco, las principales despensas de agua potable de la región.
El Principado quiere mejorar la calidad de las aguas de los pantanos del alto Nalón con el objetivo de reducir al máximo el tratamiento del suministro. En esta línea, la Consejería de Medio Ambiente mantiene bloqueado el proyecto de construcción de un puerto deportivo en el embalse de Tanes e impide que las aguas sean navegables, en contra de las peticiones de los ayuntamientos de Caso y Sobrescobio.
Sin embargo, un total de once pueblos siguen vertiendo aguas residuales al sistema de pantanos del alto Nalón a pesar de que los embalses han sido declarados por el Ministerio de Medio Ambiente «zonas sensibles» que se deben proteger y que el plan de desarrollo sostenible del parque natural de Redes fija un listado de obras prioritarias para mejorar las infraestructuras de saneamiento.
Según fuentes municipales del Ayuntamiento de Caso, cinco pueblos carecen de depuradora. Son las localidades de Bezanes, Belerda, Prieres, Tarna y Caleao (en los dos últimos pueblos se están acometiendo las obras). Las redes de saneamiento de estos núcleos vierten directamente a los ríos que alimentan los pantanos cerca de 50.000 metros cúbicos de aguas residuales al año. Además, otros seis pueblos de Caso vierten también directamente a los ríos al contar con sistemas de depuración obsoletos o fuera de servicio por falta de mantenimiento. Son los pueblos de La Foz, Orlé, Bueres, Nieves, Abantro y Coballes. En estas poblaciones que carecen de depuradoras o no funcionan vive un total de 1.058 vecinos.
La Junta de Saneamiento ha adjudicado recientemente a la empresa Aqualia el mantenimiento de las depuradoras de los pueblos casinos de Pendones, Soto, Veneros, Campo de Caso, Gobezanes, Tanes, Buspriz y La Felguerina. De esta forma se garantiza el funcionamiento de los sistemas de depuración, que se colapsan con frecuencia por los residuos ganaderos
Pablo CASTAÑO
Once pueblos del concejo de Caso siguen vertiendo sus aguas residuales al sistema de pantanos del alto Nalón, que abastece de agua potable a todo el centro de Asturias a través de la red de Cadasa. La falta de depuradoras y la precariedad de los sistemas de saneamiento hacen que los residuos ganaderos y las aguas fecales de más de mil vecinos se viertan directamente a los cauces que alimentan los pantanos de Tanes y Rioseco, las principales despensas de agua potable de la región.
El Principado quiere mejorar la calidad de las aguas de los pantanos del alto Nalón con el objetivo de reducir al máximo el tratamiento del suministro. En esta línea, la Consejería de Medio Ambiente mantiene bloqueado el proyecto de construcción de un puerto deportivo en el embalse de Tanes e impide que las aguas sean navegables, en contra de las peticiones de los ayuntamientos de Caso y Sobrescobio.
Sin embargo, un total de once pueblos siguen vertiendo aguas residuales al sistema de pantanos del alto Nalón a pesar de que los embalses han sido declarados por el Ministerio de Medio Ambiente «zonas sensibles» que se deben proteger y que el plan de desarrollo sostenible del parque natural de Redes fija un listado de obras prioritarias para mejorar las infraestructuras de saneamiento.
Según fuentes municipales del Ayuntamiento de Caso, cinco pueblos carecen de depuradora. Son las localidades de Bezanes, Belerda, Prieres, Tarna y Caleao (en los dos últimos pueblos se están acometiendo las obras). Las redes de saneamiento de estos núcleos vierten directamente a los ríos que alimentan los pantanos cerca de 50.000 metros cúbicos de aguas residuales al año. Además, otros seis pueblos de Caso vierten también directamente a los ríos al contar con sistemas de depuración obsoletos o fuera de servicio por falta de mantenimiento. Son los pueblos de La Foz, Orlé, Bueres, Nieves, Abantro y Coballes. En estas poblaciones que carecen de depuradoras o no funcionan vive un total de 1.058 vecinos.
La Junta de Saneamiento ha adjudicado recientemente a la empresa Aqualia el mantenimiento de las depuradoras de los pueblos casinos de Pendones, Soto, Veneros, Campo de Caso, Gobezanes, Tanes, Buspriz y La Felguerina. De esta forma se garantiza el funcionamiento de los sistemas de depuración, que se colapsan con frecuencia por los residuos ganaderos