La Junta prepara una campaña nacional para pedir la derogación del trasvase Tajo-Segura

Wed, 04/08/2004

ABC

El consejero de Presidencia, Máximo Díaz-Cano, se mostró ayer muy satisfecho con el «nuevo impulso» que se ha dado en los 100 días de gobierno de Barreda.

TOLEDO. El consejero de Presidencia, Máximo Díaz-Cano, anunció ayer que el Gobierno de Castilla-La Mancha está preparando una campaña informativa a nivel nacional para las próximas semanas y meses en la que se va a informar sobre la necesidad de «levantar la hipoteca para nuestra región que supone el trasvase Tajo-Segura». Así, se va a desplegar -aunque aún no se sabe de qué forma- «una amplia campaña informativa y pedagógica dentro y fuera de la región para explicar nuestras posiciones, porque probablemente mucha gente no sepa que por la tierra por la que transcurre el agua que va a Murcia hay municipios que no tienen garantizado el abastecimiento».

Díaz-Cano se mostró convencido de que dando a conocer esa realidad concitarán más apoyo para «esta empresa, que no es una empresa del Gobierno de la región, sino de la sociedad de Castilla-La Mancha».

El consejero de Presidencia aprovechó también para hacer un pequeño balance sobre los primeros cien días de Gobierno de José María Barreda, tras la marcha de José Bono al Ministerio de Defensa. Y, en este sentido, Díaz-Cano, insistió en que el presidente de Castilla-La Mancha ha conseguido situar el asunto del agua, «desde la claridad y desde la firmeza, y contando con el apoyo unánime de la sociedad de Castilla-La Mancha» en el centro del debate político, al considerarlo «un elemento esencial para el desarrollo de la región y su futuro inmediato».

Por ello, señaló que la voluntad del Ejecutivo regional es el de «negociar y llegar a acuerdos», pero sin «rebajar ni un ápice la firmeza de las convicciones que tenemos en torno a este asunto, porque consideramos que tenemos toda la razón para defender estas convicciones». Díaz-Cano aseguró también que no es aceptable que un territorio por el que atraviesa una infraestructura como el trasvase Tajo-Segura, no se pueda beneficiar de ese agua por el mismo. Así se lo van a plantear a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona -con la que tiene previsto reunirse el próximo 26 de agosto- y a las comunidades autónomas afectadas.

Consideró, como el presidente Barreda, que, en el caso de Murcia, «es insostenible mantener el trasvase durante toda la vida, ya que se trata de un recurso ajeno a esta comunidad», y volvió a pedir su caducidad para «lo antes posible». También recordó que Castilla-La Mancha, como región de interior, no dispone de otras alternativas para la obtención de recursos hídricos como la desalinización del agua del mar, y que las necesidades hídricas de la región se cifran en 637 hectómetros cúbicos.

Respecto a otros «logros» de los 100 días de gobierno de Barreda, Díaz-Cano dijo que el presidente regional también ha conseguido centrar el debate político en las infraestructuras, y se mostró satisfecho con los niveles de acuerdo alcanzados con el Ministerio de Fomento, «que van a hacer que Castilla-La Mancha sea una de las regiones mejor comunicadas por AVE y autovía».