Narbona presenta una alternativa al trasvase del Ebro con el mismo caudal y menor coste
Thu, 13/05/2004
'Más agua, a un menor coste y en menos tiempo'. Con estos argumentos defendió ayer la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, su alternativa al trasvase del Ebro. El caudal equivalente al que hubiera aportado el acueducto de más de 900 kilómetros se conseguirá apostando por la desalación, el ahorro de agua mediante una mejor gestión de la misma y la reutilización de aguas residuales. La inversión total prevista para este fin es de 3.747 millones de euros. Narbona aseguró que los fondos de la UE para el trasvase servirán para financiar su alternativa.
La ministra de Medio Ambiente compareció en el Congreso para presentar el conjunto de actuaciones que su departamento va a llevar a cabo para sustituir la parte del Plan Hidrológico Nacional (PHN) referida al trasvase del Ebro. Cristina Narbona anunció que la alternativa será aprobada por el Consejo de Ministros 'en tres o cuatro semanas'. Los planes concretos para cada cuenca han sido comunicados en las últimos días a las comunidades autónomas beneficiarias de los mismos, por lo que el Gobierno podrá aprobarlos tras su paso por el Consejo Asesor de Medio Ambiente y el Consejo Nacional del Agua.
Las cuencas deficitarias del Mediterráneo recibirán según la alternativa planteada 1.058 hectómetros cúbicos de agua. Las cuencas internas de Cataluña aumentarán sus recursos en 145 hectómetros cúbicos. La del Júcar disfrutará de 265. La Confederación Hidrográfica del Segura es la que más caudal nuevo deberá gestionar: 336 hectómetros cúbicos. La cuenca del Sur recibirá 312.
La inversión anunciada para conseguir estos aportes es menor que la prevista para la construcción del trasvase ahora caduco. Son 3.747 millones de euros frente a los 4.200 en que estaba presupuestado el acueducto que iba a llevar las aguas del Ebro por siete provincias desde Barcelona hasta Almería. Fuentes del Ministerio afirmaron recientemente que el coste del trasvase podría haber sido incluso mayor.
Cristina Narbona aseguró en el Congreso que parte de este dinero será aportado por la Unión Europea dadas las garantías que le ofreció en este sentido la comisaria de Medio Ambiente de la UE, Margot Wallström, la semana pasada en Bruselas. El ministerio enviará hoy el detalle de los proyectos que contiene la alternativa al trasvase a la Comisión de Fondos Regionales de la UE para su estudio. La cantidad que España espera recibir de Bruselas supondría, de concretarse, casi un tercio del coste total de los proyectos alternativos, 1.200 millones de euros.
Apuesta por la desalación
Narbona aprovechó su comparecencia parlamentaria para afirmar de nuevo 'la inviabilidad económica del trasvase'. 'Nunca se le dijo a los agricultores lo que iba a costar realmente el metro cúbico de agua trasvasada: 90 céntimos de euro', replicó la ministra frente a los reproches del PP por la anulación del trasvase. El precio del agua desalada que produce la planta de Carboneras (Almería) para el suministro de la capital de esta provincia es de 33 céntimos. La parte más importante del gasto anunciado por Narbona se dedicará a la instalación de nuevas plantas desaladoras y la ampliación de otras existentes.
Sólo en la Región de Murcia y Alicante se construirán ocho nuevas plantas de este tipo. La ministra, en su contestación a la pregunta de Eduardo Zaplana, portavoz parlamentario del Partido Popular, a propósito de las medidas que tomará para la ejecución del PHN, aseguró que si el PP hubiera construido las desaladoras licitadas por el Gobierno socialista en 1996, 'los murcianos no hubieran sufrido las restricciones que pasaron el año pasado'. La opción por la obtención de agua potable del medio marino es clara en los planes del ministerio: 621 hectómetros cúbicos de este agua tratada suponen el 58,7% del total que se piensa conseguir.
Los otros dos medios que se potenciarán para llevar a la práctica 'el nuevo modelo de gestión del agua' que propone Narbona son la reutilización de las aguas sobrantes de la población e industria y el ahorro de los recursos mediante un sistema mejorado de su uso. La modernización de la gestión, que pasa, entre otras medidas, por la mejora de las conducciones de riego para evitar las pérdidas, puede suponer un aporte extraordinario de 250 hectómetros cúbicos. El ministerio espera obtener 187 hectómetros cúbicos gracias a las nuevas infraestructuras de transformación del agua reutilizable previstas en todas las cuencas afectadas por la carestía hídrica.
Los Gobiernos de la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, ambos del Partido Popular, continuaron ayer su campaña contra la suspensión del trasvase. Frente a las declaraciones de la ministra en el Congreso, el presidente de Murcia, Ramón Valcárcel, anunció su voluntad de 'pelear hasta el último hectómetro cúbico previsto en el PHN para la cuenca del Segura'. El político, sin citar a la ministra, añadió que 'nadie puede pensar ni decir en serio que la Región de Murcia va a resolver sus problemas hídricos a base de ahorro y reutilización porque en esto estamos a la cabeza y contamos con experiencia y capacitación suficiente para dar lecciones a muchos'.
En la Comunidad Valenciana, el consejero de Presidencia de la Generalitat, Alejandro Font de Mora, calificó de 'tomadura de pelo' la alternativa de Narbona, de la que dijo que 'está poco clara'. Ayer por la mañana, el presidente de esta comunidad, Francisco Camps, pidió en una reunión de regantes en Valencia que los agricultores que dependen del riego 'en toda España' apoyen su lucha por el mantenimiento del trasvase, 'como nosotros apoyamos el resto de las obras del PHN que les benefician'.
La ministra de Medio Ambiente compareció en el Congreso para presentar el conjunto de actuaciones que su departamento va a llevar a cabo para sustituir la parte del Plan Hidrológico Nacional (PHN) referida al trasvase del Ebro. Cristina Narbona anunció que la alternativa será aprobada por el Consejo de Ministros 'en tres o cuatro semanas'. Los planes concretos para cada cuenca han sido comunicados en las últimos días a las comunidades autónomas beneficiarias de los mismos, por lo que el Gobierno podrá aprobarlos tras su paso por el Consejo Asesor de Medio Ambiente y el Consejo Nacional del Agua.
Las cuencas deficitarias del Mediterráneo recibirán según la alternativa planteada 1.058 hectómetros cúbicos de agua. Las cuencas internas de Cataluña aumentarán sus recursos en 145 hectómetros cúbicos. La del Júcar disfrutará de 265. La Confederación Hidrográfica del Segura es la que más caudal nuevo deberá gestionar: 336 hectómetros cúbicos. La cuenca del Sur recibirá 312.
La inversión anunciada para conseguir estos aportes es menor que la prevista para la construcción del trasvase ahora caduco. Son 3.747 millones de euros frente a los 4.200 en que estaba presupuestado el acueducto que iba a llevar las aguas del Ebro por siete provincias desde Barcelona hasta Almería. Fuentes del Ministerio afirmaron recientemente que el coste del trasvase podría haber sido incluso mayor.
Cristina Narbona aseguró en el Congreso que parte de este dinero será aportado por la Unión Europea dadas las garantías que le ofreció en este sentido la comisaria de Medio Ambiente de la UE, Margot Wallström, la semana pasada en Bruselas. El ministerio enviará hoy el detalle de los proyectos que contiene la alternativa al trasvase a la Comisión de Fondos Regionales de la UE para su estudio. La cantidad que España espera recibir de Bruselas supondría, de concretarse, casi un tercio del coste total de los proyectos alternativos, 1.200 millones de euros.
Apuesta por la desalación
Narbona aprovechó su comparecencia parlamentaria para afirmar de nuevo 'la inviabilidad económica del trasvase'. 'Nunca se le dijo a los agricultores lo que iba a costar realmente el metro cúbico de agua trasvasada: 90 céntimos de euro', replicó la ministra frente a los reproches del PP por la anulación del trasvase. El precio del agua desalada que produce la planta de Carboneras (Almería) para el suministro de la capital de esta provincia es de 33 céntimos. La parte más importante del gasto anunciado por Narbona se dedicará a la instalación de nuevas plantas desaladoras y la ampliación de otras existentes.
Sólo en la Región de Murcia y Alicante se construirán ocho nuevas plantas de este tipo. La ministra, en su contestación a la pregunta de Eduardo Zaplana, portavoz parlamentario del Partido Popular, a propósito de las medidas que tomará para la ejecución del PHN, aseguró que si el PP hubiera construido las desaladoras licitadas por el Gobierno socialista en 1996, 'los murcianos no hubieran sufrido las restricciones que pasaron el año pasado'. La opción por la obtención de agua potable del medio marino es clara en los planes del ministerio: 621 hectómetros cúbicos de este agua tratada suponen el 58,7% del total que se piensa conseguir.
Los otros dos medios que se potenciarán para llevar a la práctica 'el nuevo modelo de gestión del agua' que propone Narbona son la reutilización de las aguas sobrantes de la población e industria y el ahorro de los recursos mediante un sistema mejorado de su uso. La modernización de la gestión, que pasa, entre otras medidas, por la mejora de las conducciones de riego para evitar las pérdidas, puede suponer un aporte extraordinario de 250 hectómetros cúbicos. El ministerio espera obtener 187 hectómetros cúbicos gracias a las nuevas infraestructuras de transformación del agua reutilizable previstas en todas las cuencas afectadas por la carestía hídrica.
Los Gobiernos de la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, ambos del Partido Popular, continuaron ayer su campaña contra la suspensión del trasvase. Frente a las declaraciones de la ministra en el Congreso, el presidente de Murcia, Ramón Valcárcel, anunció su voluntad de 'pelear hasta el último hectómetro cúbico previsto en el PHN para la cuenca del Segura'. El político, sin citar a la ministra, añadió que 'nadie puede pensar ni decir en serio que la Región de Murcia va a resolver sus problemas hídricos a base de ahorro y reutilización porque en esto estamos a la cabeza y contamos con experiencia y capacitación suficiente para dar lecciones a muchos'.
En la Comunidad Valenciana, el consejero de Presidencia de la Generalitat, Alejandro Font de Mora, calificó de 'tomadura de pelo' la alternativa de Narbona, de la que dijo que 'está poco clara'. Ayer por la mañana, el presidente de esta comunidad, Francisco Camps, pidió en una reunión de regantes en Valencia que los agricultores que dependen del riego 'en toda España' apoyen su lucha por el mantenimiento del trasvase, 'como nosotros apoyamos el resto de las obras del PHN que les benefician'.