The Ministry of Agriculture, Food and Environment invest 7.9 million euros in the rehabilitation of the coastal front of Altea (Alicante)
Mon, 15/07/2013
Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente
La inversión incluye actuaciones marítimas y terrestres entre el espigón norte del puerto y la desembocadura del río Algar
Se sustituirá el dique de “El Charco” por una playa artificial que, a la vez de servir de protección costera, generará un nuevo espacio lúdico en el casco urbano
El director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra, considera que “este proyecto es un ejemplo de la política de protección de la costa que lleva a cabo este Gobierno”
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, invertirá 7,9 millones de euros en la rehabilitación de la fachada costera del casco urbano de Altea (Alicante). El proyecto, cuya licitación se publica hoy en el Boletín Oficial del Estado, abarca actuaciones marítimas y terrestres localizadas entre el espigón norte del puerto y la desembocadura del río Algar, en el frente litoral en el que se localiza la laguna de “El Charco”.
El director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra, destaca de esta obra que “es necesaria para regenerar este tramo de costa” y del proyecto que “se han eliminado los elementos más urbanos que no eran imprescindibles, con lo que el coste para los ciudadanos se ha reducido a la mitad”.
Saavedra tiene previsto viajar en los próximos días a Altea para presentar este proyecto que considera “un ejemplo de la política de protección de la costa que lleva a cabo este Gobierno, que prioriza los aspectos ambientales, reduce costes para hacer más y mejor con menos recursos, trabajando conjuntamente con los ayuntamientos beneficiarios en proyectos que pueden atraer financiación europea”.
ACTUACIONES MARÍTIMAS
La laguna de “El Charco”, fue creada a finales de la década de los 70 mediante la construcción de un dique exterior de escollera, con el objeto de proteger el frente marítimo urbano frente a la acción del oleaje. La renovación del agua dentro de esta laguna es muy baja, pese a haberse abierto 5 bocanas en el dique con la finalidad de aumentar el grado de renovación. Actualmente la baja calidad de sus aguas acarrea diversas consecuencias negativas, son un foco de contaminación, no son adecuadas para el baño, generan malos olores y dan un aspecto estético negativo para la población circundante.
Por otra parte “El Charco” ejerce un importante efecto barrera, al constituir una separación física entre el casco urbano y el mar. Las obras marítimas previstas consisten esencialmente en sustituir el dique de “El Charco” y sus escolleras por una playa artificial que realizará las funciones de protección costera a la vez que generará un nuevo espacio lúdico para el frente costero de Altea al permitir el contacto del casco urbano con el mar. La futura playa tendrá un ancho de 40 m y una longitud de 1,6 km.
Para que la playa artificial tenga una forma en planta compatible con la alienación del paseo marítimo, previa demolición del dique de escollera que actualmente delimita la laguna “El Charco”, se harán unas obras de estabilización, mediante diques y espigones.
ACTUACIONES TERRESTRES
Por lo que respecta a las obras terrestres proyectadas, se dará continuidad al paseo marítimo hasta la desembocadura del río Algar, unificando la estética de toda la fachada litoral, tanto en su configuración longitudinal como transversal, minimizando las barreras arquitectónicas existentes e igualando el tipo de materiales empleados y el mobiliario urbano.
El paseo marítimo, con una longitud de 291 metros y 3 de ancho, de carácter peatonal, se ha proyectado pensando en mantener el diseño del resto del frente costero.
Se sustituirá el dique de “El Charco” por una playa artificial que, a la vez de servir de protección costera, generará un nuevo espacio lúdico en el casco urbano
El director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra, considera que “este proyecto es un ejemplo de la política de protección de la costa que lleva a cabo este Gobierno”
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, invertirá 7,9 millones de euros en la rehabilitación de la fachada costera del casco urbano de Altea (Alicante). El proyecto, cuya licitación se publica hoy en el Boletín Oficial del Estado, abarca actuaciones marítimas y terrestres localizadas entre el espigón norte del puerto y la desembocadura del río Algar, en el frente litoral en el que se localiza la laguna de “El Charco”.
El director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra, destaca de esta obra que “es necesaria para regenerar este tramo de costa” y del proyecto que “se han eliminado los elementos más urbanos que no eran imprescindibles, con lo que el coste para los ciudadanos se ha reducido a la mitad”.
Saavedra tiene previsto viajar en los próximos días a Altea para presentar este proyecto que considera “un ejemplo de la política de protección de la costa que lleva a cabo este Gobierno, que prioriza los aspectos ambientales, reduce costes para hacer más y mejor con menos recursos, trabajando conjuntamente con los ayuntamientos beneficiarios en proyectos que pueden atraer financiación europea”.
ACTUACIONES MARÍTIMAS
La laguna de “El Charco”, fue creada a finales de la década de los 70 mediante la construcción de un dique exterior de escollera, con el objeto de proteger el frente marítimo urbano frente a la acción del oleaje. La renovación del agua dentro de esta laguna es muy baja, pese a haberse abierto 5 bocanas en el dique con la finalidad de aumentar el grado de renovación. Actualmente la baja calidad de sus aguas acarrea diversas consecuencias negativas, son un foco de contaminación, no son adecuadas para el baño, generan malos olores y dan un aspecto estético negativo para la población circundante.
Por otra parte “El Charco” ejerce un importante efecto barrera, al constituir una separación física entre el casco urbano y el mar. Las obras marítimas previstas consisten esencialmente en sustituir el dique de “El Charco” y sus escolleras por una playa artificial que realizará las funciones de protección costera a la vez que generará un nuevo espacio lúdico para el frente costero de Altea al permitir el contacto del casco urbano con el mar. La futura playa tendrá un ancho de 40 m y una longitud de 1,6 km.
Para que la playa artificial tenga una forma en planta compatible con la alienación del paseo marítimo, previa demolición del dique de escollera que actualmente delimita la laguna “El Charco”, se harán unas obras de estabilización, mediante diques y espigones.
ACTUACIONES TERRESTRES
Por lo que respecta a las obras terrestres proyectadas, se dará continuidad al paseo marítimo hasta la desembocadura del río Algar, unificando la estética de toda la fachada litoral, tanto en su configuración longitudinal como transversal, minimizando las barreras arquitectónicas existentes e igualando el tipo de materiales empleados y el mobiliario urbano.
El paseo marítimo, con una longitud de 291 metros y 3 de ancho, de carácter peatonal, se ha proyectado pensando en mantener el diseño del resto del frente costero.