The project for recovery Cañizar in serious danger
Mon, 10/06/2013
Origen e historia de la laguna
Laguna del Cañizar desde el mismo punto antes y después de la desecación.
La laguna del Cañizar, en la provincia de Teruel, tenía en su origen una extensión cercana a las 1.200 hectáreas, conformando un ecosistema y paisaje singular en el corazón de la provincia de Teruel. Sin embargo, a principios del siglo XVIII y de igual manera a como sucedió en numerosos humedales ibéricos, se iniciaron las obras de drenaje con el objetivo de desecarla. La laguna permaneció olvidada hasta comienzos del siglo XXI, cuando se inició un programa para su recuperación. Gracias a ello, en 2009 la laguna volvió a inundarse de nuevo en 380 ha de sus 1.200 ha originales, convirtiéndose en ese momento en el segundo humedal de agua dulce más extenso del interior de la Península Ibérica, por detrás únicamente del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
La laguna permaneció olvidada hasta comienzos del siglo XXI, cuando se inició un programa para su recuperación, que permitió en 2009 que la laguna volviera a inundarse de nuevo en 380 hectáreas de sus 1.200 originales, convirtiéndose en ese momento en el segundo humedal de agua dulce más extenso del interior de la Península Ibérica, por detrás únicamente del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
Este proyecto de recuperación ha partido de una iniciativa local promovida desde los ayuntamientos de Cella y Villarquemado, en los que se asienta la laguna. Para ello, estos municipios han aportado 450 ha de terrenos municipales que cultivaban sus vecinos (380 ha inundables + 70 ha de prados húmedos) y han financiado parte de las actuaciones realizadas. En este camino los ayuntamientos no han estado solos, habiendo colaborado diversos organismos, entidades y numerosos voluntarios. Hasta la actualidad este proyecto ha contado con una inversión económica cercana a los 700.000 mil euros, habiéndose construido motas, canales, observatorios, caminos, embarcaderos, etc.
Tras la inundación de 2009, el ecosistema respondió rápidamente, dando lugar a un rico paisaje palustre en tan solo 4 años.
Importancia para la biodiversidad de la zona y su conservación
En dicho paraje desde 2009 se han detectado todos los anuros de la provincia de Teruel, numerosas especies de orquídeas y más de 200 especies de aves, entre ellas todas las ardeidas presentes en España. Cabe destacar, que han criado especies catalogadas En Peligro de Extinción en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, como el avetoro común (Botaurus stellaris) o la garcilla cangrejera (Ardeola ralloides), además de dar cobijo a otras especies amenazadas como el carricerín cejudo (Acrocephalus paludicola), o hasta 10.000 grullas (Grus grus) en determinados momentos.
La sequía que lleva asolando la laguna durante el último año hace que el proyecto retorne casi a sus orígenes y la laguna esté prácticamente seca en su totalidad lo que conlleva una enorme pérdida de biodiversidad, debido a que la inmensa mayoría de especies asociadas al Cañizar, tanto de flora como de fauna, son especies de carácter acuático. Especialmente grave es el caso del avetoro, del que apenas quedan 40-50 parejas reproductoras en toda España, concentradas en torno a 10 lugares de cría.
La recuperación de la laguna resulta un hito muy importante por diversos motivos. En primer lugar porque la laguna porque puede constituir un nuevo motor económico para la zona, al poder funcionar como reclamo de primer orden para ornitólogos y naturalistas, que visiten la laguna y los zonas de alrededor. Máxime si consideramos que la laguna se sitúa entre dos zonas con gran afluencia de visitantes: como son Teruel, con su arte mudéjar patrimonio de la humanidad, y la Sierra de Albarracín.
Si bien la laguna carece en la actualidad de protección legal, las decenas de especies que habitan en ella sí están protegidas tanto a escala estatal como europea, y algunas como el avetoro o la garcilla cangrejera incluso poseen la mayor categoría de protección que concede la ley española, lo cual bastaría para asegurar la protección del humedal y proponer medidas para su conservación.
Además la laguna posee un valor educativo/cultural incomparable, por ejemplo, durante estos 6 años desde que se iniciaron las obras de su recuperación, han visitado la laguna cientos de turistas y más de 3.000 escolares, que han visto en la laguna un ejemplo de recuperación del valor ecológico de una zona. De hecho, uno de los que han firmado la petición es un profesor, que destaca cómo los alumnos disfrutaron de la excursión y de los valores que el proyecto ha inculcado a sus alumnos.
En tercer lugar, la laguna debería protegerse y recuperarse desde un punto de vista hidrológico, favoreciendo el interés de la comunidad de regantes, reduciendo la oposición que dicha comunidad posee a la laguna. Esto se debe a que la nueva laguna permite almacenar buena parte de los excedentes invernales, para su uso posterior durante los meses de estío, por ejemplo, durante el presente año con la gran cantidad de agua que ha habido durante el invierno y el otoño, la laguna podría estar llena en su totalidad, y en el caso de que durante los meses de estío la comunidad de regantes lo necesitara podría extraer agua de la laguna.
Y por último, la laguna debería recuperarse dado su elevado valor ecológico, que es el que requiere una protección urgente, ya que estamos hablando de cómo afecta la sequía a otros seres vivos, muchos de ellos catalogadas como amenazados por la legislación, tanto estatal como europea.
Medidas y acciones para su restablecimiento
En primer lugar, sería necesaria la elaboración de un plan de gestión del agua de la laguna, para delimitar el nivel mínimo de agua, por debajo del cual la comunidad de regantes no podría extraerse agua de la laguna ni abrir el drenaje de la misma.
En un segundo punto pedimos un apoyo rotundo y sin ambigüedades tanto por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, así como del Gobierno de Aragón. En diciembre de 2012, encontrándose ya los drenajes de la laguna abiertos, el Cañizar ha sido catalogado como Humedal Singular de Aragón, lo cual choca con las medidas adoptadas, prácticamente nulas, para su conservación.
Y en un tercer punto, solicitamos tanto a nivel autonómico como nacional que se dote a la laguna de la figura de protección que corresponde a su importancia ecológica, y se incluya en la Red Natura 2000. Y respecto a este punto, querríamos recordar a los órganos competentes en materia de conservación del medio ambiente, que si bien la laguna carece en la actualidad de protección legal, sí la poseen (tanto a nivel estatal como europeo) decenas de las especies que habitan en ella, algunas como el avetoro o la garcilla cangrejera catalogadas en la mayor categoría de protección que concede la ley española, y este hecho debería bastar para asegurar la protección del humedal y proponer medidas para su conservación, además de permitir denunciar a nivel nacional o europeo, cualquier amenaza que afecte al hábitat de estas especies.
Pedimos colaboración y apoyo ciudadano para la campaña que promueve la reanudación del proyecto de recuperación de la laguna mediante la firma y difusión de dicha campaña. En el manifiesto que acompaña la acción se puede leer algo más acerca de la laguna y el proyecto de recuperación. Únicamente decir, que en los meses que ha costado poner en marcha todo este proyecto, la cosa ha empeorado aún más, y parece ser mayor aún la presión de la comunidad de regantes para desecar la laguna definitivamente y que todo el esfuerzo invertido en ella sea en balde.
Cabe destacar, que los dos términos municipales en los que se asienta la laguna están a favor de dicho proyecto, habiendo cedido terrenos públicos a favor de la laguna.
Laguna del Cañizar desde el mismo punto antes y después de la desecación.
La laguna del Cañizar, en la provincia de Teruel, tenía en su origen una extensión cercana a las 1.200 hectáreas, conformando un ecosistema y paisaje singular en el corazón de la provincia de Teruel. Sin embargo, a principios del siglo XVIII y de igual manera a como sucedió en numerosos humedales ibéricos, se iniciaron las obras de drenaje con el objetivo de desecarla. La laguna permaneció olvidada hasta comienzos del siglo XXI, cuando se inició un programa para su recuperación. Gracias a ello, en 2009 la laguna volvió a inundarse de nuevo en 380 ha de sus 1.200 ha originales, convirtiéndose en ese momento en el segundo humedal de agua dulce más extenso del interior de la Península Ibérica, por detrás únicamente del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
La laguna permaneció olvidada hasta comienzos del siglo XXI, cuando se inició un programa para su recuperación, que permitió en 2009 que la laguna volviera a inundarse de nuevo en 380 hectáreas de sus 1.200 originales, convirtiéndose en ese momento en el segundo humedal de agua dulce más extenso del interior de la Península Ibérica, por detrás únicamente del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
Este proyecto de recuperación ha partido de una iniciativa local promovida desde los ayuntamientos de Cella y Villarquemado, en los que se asienta la laguna. Para ello, estos municipios han aportado 450 ha de terrenos municipales que cultivaban sus vecinos (380 ha inundables + 70 ha de prados húmedos) y han financiado parte de las actuaciones realizadas. En este camino los ayuntamientos no han estado solos, habiendo colaborado diversos organismos, entidades y numerosos voluntarios. Hasta la actualidad este proyecto ha contado con una inversión económica cercana a los 700.000 mil euros, habiéndose construido motas, canales, observatorios, caminos, embarcaderos, etc.
Tras la inundación de 2009, el ecosistema respondió rápidamente, dando lugar a un rico paisaje palustre en tan solo 4 años.
Importancia para la biodiversidad de la zona y su conservación
En dicho paraje desde 2009 se han detectado todos los anuros de la provincia de Teruel, numerosas especies de orquídeas y más de 200 especies de aves, entre ellas todas las ardeidas presentes en España. Cabe destacar, que han criado especies catalogadas En Peligro de Extinción en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, como el avetoro común (Botaurus stellaris) o la garcilla cangrejera (Ardeola ralloides), además de dar cobijo a otras especies amenazadas como el carricerín cejudo (Acrocephalus paludicola), o hasta 10.000 grullas (Grus grus) en determinados momentos.
La sequía que lleva asolando la laguna durante el último año hace que el proyecto retorne casi a sus orígenes y la laguna esté prácticamente seca en su totalidad lo que conlleva una enorme pérdida de biodiversidad, debido a que la inmensa mayoría de especies asociadas al Cañizar, tanto de flora como de fauna, son especies de carácter acuático. Especialmente grave es el caso del avetoro, del que apenas quedan 40-50 parejas reproductoras en toda España, concentradas en torno a 10 lugares de cría.
La recuperación de la laguna resulta un hito muy importante por diversos motivos. En primer lugar porque la laguna porque puede constituir un nuevo motor económico para la zona, al poder funcionar como reclamo de primer orden para ornitólogos y naturalistas, que visiten la laguna y los zonas de alrededor. Máxime si consideramos que la laguna se sitúa entre dos zonas con gran afluencia de visitantes: como son Teruel, con su arte mudéjar patrimonio de la humanidad, y la Sierra de Albarracín.
Si bien la laguna carece en la actualidad de protección legal, las decenas de especies que habitan en ella sí están protegidas tanto a escala estatal como europea, y algunas como el avetoro o la garcilla cangrejera incluso poseen la mayor categoría de protección que concede la ley española, lo cual bastaría para asegurar la protección del humedal y proponer medidas para su conservación.
Además la laguna posee un valor educativo/cultural incomparable, por ejemplo, durante estos 6 años desde que se iniciaron las obras de su recuperación, han visitado la laguna cientos de turistas y más de 3.000 escolares, que han visto en la laguna un ejemplo de recuperación del valor ecológico de una zona. De hecho, uno de los que han firmado la petición es un profesor, que destaca cómo los alumnos disfrutaron de la excursión y de los valores que el proyecto ha inculcado a sus alumnos.
En tercer lugar, la laguna debería protegerse y recuperarse desde un punto de vista hidrológico, favoreciendo el interés de la comunidad de regantes, reduciendo la oposición que dicha comunidad posee a la laguna. Esto se debe a que la nueva laguna permite almacenar buena parte de los excedentes invernales, para su uso posterior durante los meses de estío, por ejemplo, durante el presente año con la gran cantidad de agua que ha habido durante el invierno y el otoño, la laguna podría estar llena en su totalidad, y en el caso de que durante los meses de estío la comunidad de regantes lo necesitara podría extraer agua de la laguna.
Y por último, la laguna debería recuperarse dado su elevado valor ecológico, que es el que requiere una protección urgente, ya que estamos hablando de cómo afecta la sequía a otros seres vivos, muchos de ellos catalogadas como amenazados por la legislación, tanto estatal como europea.
Medidas y acciones para su restablecimiento
En primer lugar, sería necesaria la elaboración de un plan de gestión del agua de la laguna, para delimitar el nivel mínimo de agua, por debajo del cual la comunidad de regantes no podría extraerse agua de la laguna ni abrir el drenaje de la misma.
En un segundo punto pedimos un apoyo rotundo y sin ambigüedades tanto por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, así como del Gobierno de Aragón. En diciembre de 2012, encontrándose ya los drenajes de la laguna abiertos, el Cañizar ha sido catalogado como Humedal Singular de Aragón, lo cual choca con las medidas adoptadas, prácticamente nulas, para su conservación.
Y en un tercer punto, solicitamos tanto a nivel autonómico como nacional que se dote a la laguna de la figura de protección que corresponde a su importancia ecológica, y se incluya en la Red Natura 2000. Y respecto a este punto, querríamos recordar a los órganos competentes en materia de conservación del medio ambiente, que si bien la laguna carece en la actualidad de protección legal, sí la poseen (tanto a nivel estatal como europeo) decenas de las especies que habitan en ella, algunas como el avetoro o la garcilla cangrejera catalogadas en la mayor categoría de protección que concede la ley española, y este hecho debería bastar para asegurar la protección del humedal y proponer medidas para su conservación, además de permitir denunciar a nivel nacional o europeo, cualquier amenaza que afecte al hábitat de estas especies.
Pedimos colaboración y apoyo ciudadano para la campaña que promueve la reanudación del proyecto de recuperación de la laguna mediante la firma y difusión de dicha campaña. En el manifiesto que acompaña la acción se puede leer algo más acerca de la laguna y el proyecto de recuperación. Únicamente decir, que en los meses que ha costado poner en marcha todo este proyecto, la cosa ha empeorado aún más, y parece ser mayor aún la presión de la comunidad de regantes para desecar la laguna definitivamente y que todo el esfuerzo invertido en ella sea en balde.
Cabe destacar, que los dos términos municipales en los que se asienta la laguna están a favor de dicho proyecto, habiendo cedido terrenos públicos a favor de la laguna.