Acciona emerges as winner of the privatization of ATLL
Tue, 23/10/2012
Acciona se perfila como ganador de la privatizacion de ATLL
La Generalitat reducirá 0,5 puntos de déficit por el concurso
Tras conocerse ayer las ofertas económicas, Acciona tiene muchos puntos para hacerse con Aguas Ter-Llobregat (ATLL), la gran privatización planteada este año por el Gobierno catalán para reducir su déficit. A falta de que el Departamento de Territorio valide la documentación entregada, el consorcio que lidera el grupo de la familia Entrecanales ha tomado una ventaja considerable en la puja que le enfrenta al grupo encabezado por Agbar. Mientras Acciona suma 87,73 puntos en sus ofertas técnica y económica, Agbar estaría en los 51,25, según fuentes cercanas a la operación. Está previsto que durante el mes de diciembre el concurso llegue a su fin, con la firma del contrato de adjudicación y el inicio de la explotación el próximo 1 de enero. La victoria de Acciona supondría un hito para la compañía, que desembarcaría por primera vez en Cataluña en el negocio del agua. Para hacerlo posible ha presentado una oferta ambiciosa, que supone un ahorro tarifario anual de 17,1 millones de euros respecto a la oferta de Agbar (855 millones de euros durante los 50 años que durará la concesión). Asimismo, la compañía plantea la subrogación de los empleos de Aguas Ter-Llobregat durante 50 años, mientras que Agbar reduce ese periodo a 40 meses. Acciona sucumbió en la oferta técnica. En esa propuesta, que representa el 25% del concurso, Agbar se impuso con 20 puntos, por los 13 de Acciona. El menor peso de esa parte es una de las notas polémicas del proceso, ya que fuentes del sector consideran que la oferta económica tiene un peso excesivamente preponderante en una operación compleja técnicamente. La adjudicación será una buena noticia también para la Generalitat, que busca recursos de forma casi desesperada para cuadrar el presupuesto de este año e intentar no superar el 1,5% de déficit. Pese a que la Administración catalana solo ingresará este año 300 millones de euros por esta operación, el Departamento de Economía tiene permiso para apuntarse los 1.000 millones de toda la concesión en 2012, lo que le permitirá reducir casi medio punto de déficit. A la cuantía que ingresará por la privatización de Aguas Ter-Llobregat se podrían añadir también los 430 millones de euros previstos por la concesión en curso de Tabasa y Cadí, y 66 millones por ventas de activos ya ejecutadas. Los 1.496 millones totales, 0,7 puntos menos de déficit, superan a los 1.171 millones previstos.
La Generalitat reducirá 0,5 puntos de déficit por el concurso
Tras conocerse ayer las ofertas económicas, Acciona tiene muchos puntos para hacerse con Aguas Ter-Llobregat (ATLL), la gran privatización planteada este año por el Gobierno catalán para reducir su déficit. A falta de que el Departamento de Territorio valide la documentación entregada, el consorcio que lidera el grupo de la familia Entrecanales ha tomado una ventaja considerable en la puja que le enfrenta al grupo encabezado por Agbar. Mientras Acciona suma 87,73 puntos en sus ofertas técnica y económica, Agbar estaría en los 51,25, según fuentes cercanas a la operación. Está previsto que durante el mes de diciembre el concurso llegue a su fin, con la firma del contrato de adjudicación y el inicio de la explotación el próximo 1 de enero. La victoria de Acciona supondría un hito para la compañía, que desembarcaría por primera vez en Cataluña en el negocio del agua. Para hacerlo posible ha presentado una oferta ambiciosa, que supone un ahorro tarifario anual de 17,1 millones de euros respecto a la oferta de Agbar (855 millones de euros durante los 50 años que durará la concesión). Asimismo, la compañía plantea la subrogación de los empleos de Aguas Ter-Llobregat durante 50 años, mientras que Agbar reduce ese periodo a 40 meses. Acciona sucumbió en la oferta técnica. En esa propuesta, que representa el 25% del concurso, Agbar se impuso con 20 puntos, por los 13 de Acciona. El menor peso de esa parte es una de las notas polémicas del proceso, ya que fuentes del sector consideran que la oferta económica tiene un peso excesivamente preponderante en una operación compleja técnicamente. La adjudicación será una buena noticia también para la Generalitat, que busca recursos de forma casi desesperada para cuadrar el presupuesto de este año e intentar no superar el 1,5% de déficit. Pese a que la Administración catalana solo ingresará este año 300 millones de euros por esta operación, el Departamento de Economía tiene permiso para apuntarse los 1.000 millones de toda la concesión en 2012, lo que le permitirá reducir casi medio punto de déficit. A la cuantía que ingresará por la privatización de Aguas Ter-Llobregat se podrían añadir también los 430 millones de euros previstos por la concesión en curso de Tabasa y Cadí, y 66 millones por ventas de activos ya ejecutadas. Los 1.496 millones totales, 0,7 puntos menos de déficit, superan a los 1.171 millones previstos.