El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, salió ayer al paso de las declaraciones de los socialistas manchegos, que aseguraron que «no hay caudal ecológico», afirmando que lo que tiene que hacer la comunidad vecina para obtener aguas limpias en Toledo y en Talavera es «tener excelentes depuradoras y depurar toda la columna vertebral del río Tajo, a su paso por estas ciudades».

De este modo, subrayó Cerdá, «en vez de arrojar los vertidos allí y que se diluyan pidiendo aumentos de volumen de caudal, que está prohibido por la Directiva Europea, pues depuren en origen». El consejero insistió en que «lo que hay que hacer es depurar en origen sin necesidad de aumentar el caudal para diluir la porquería que ellos arrojan el río».

Al respecto, el consejero recalcó que el caudal ecológico en Murcia «está resuelto», recordando en este sentido que el río Segura «ha sido el más contaminado y menos caudaloso de España y en este momento es el menos contaminado del país y se ha vuelto a tener vida biológica». Una circunstancia que, achacó, a un «sistema de saneamiento y depuración modélico». Por ello, criticó el mensaje «derrotista» del Partido Socialista en esta materia.

Las organizaciones de productores de frutas y hortalizas de la Región, por otra parte, recibirán este año 44 millones de euros en ayudas europeas para sus programas operativos, un 13% más que el pasado ejercicio. Cerdá recalcó que estas ayudas «revierten en un aumento de las exportaciones, en el mantenimiento de puestos de trabajo, en la calidad de la producción, en la modernización del sector y en el respeto al medio ambiente, al tiempo que incentivan la concentración de la oferta».