Los agricultores con explotaciones de regadío en la cuenca del río Carrión cerrarán este año la campaña de riego el próximo 6 de septiembre, una fecha muy anterior al 30 de septiembre en que había estipulado inicialmente el cierre oficial. La falta de agua ha llevado a la Confederación Hidrográfica del Duero a anunciar a los agricultores su decisión de adelantar tres semanas el cierre.

El presidente de la Junta Central de Usuarios del Carrión, Moisés Fernández, destacó ayer que la falta de agua y las restricciones continuas han marcado esta difícil campaña para los propietarios de las 50.000 hectáreas que componen la cuenca. «No obstante, ha quedado abierta la posibilidad de aplicar a las explotaciones de remolacha un riego de apoyo entre el 15 y el 20 de septiembre si fuera necesario», agregó Moisés Fernández.

La situación de los embalses de la provincia de Palencia es actualmente crítica y las predicciones meteorológicas tampoco auguran lluvias importantes durante las próximas semanas que permitan aliviar algo la situación. Las organizaciones agrarias han lamentado que la sequía haya traído consigo una mala cosecha en toda la provincia, aunque la situación es especialmente grave en la zona sur y en la comarca del Cerrato.

Los cinco pantanos de Palencia (tres de ellos del Pisuerga y dos del Carrión) se encuentran ahora a menos de la tercera parte de su capacidad, concretamente en el 28,4%. El porcentaje es sensiblemente anterior al contabilizado el año anterior por estas mismas fechas, en que se situaban al 43%, y muy por debajo del 54,9% que representa la media de los diez últimos años.

Los regantes de la cuenca del Carrión reciben también agua desde el pantano de Riaño, dado que la capacidad de embalsamiento de Camporredondo y Compuerto, los dos pantanos palentinos, es muy inferior a las necesidades de los agricultores. El Estado optó en su día por construir un sistema de trasvase, que también ayudan a pagar los agricultores palentinos. La oposición de los leoneses a ceder su agua a los palentinos no ha impedido hasta el momento que se suspenda ese trasvase, aunque la situación se convierte en especialmente tensa en momentos como el actual, en los que la falta de agua es especialmente acusada.

La situación en el sistema Carrión es grave. Mientras que Camporredondo está a la tercera parte, la situación es ligeramente mejor en Compuerto. En los pantanos del Pisuerga la situación es similar. El pantano de Aguilar apenas supera el 15% de su capacidad en una de las estadísticas más preocupantes en muchos años.