He complains that the agency of the Government has not paid 450,000 euros to exploit the purification
Tue, 31/07/2012
Los impagos de la Agencia Catalana del Agua (ACA), el organismo de la Generalitat que gestiona el agua en Cataluña, van a continuar dando trabajo a los tribunales. Como ya hicieran con anterioridad los consistorios de Anglès y Figueres, el Ayuntamiento de Sabadell ha presentado un contencioso administrativo contra el organismo que dirige Leonard Carcolé, en esta ocasión por la falta de financiación para la gestión de las dos depuradoras del municipio barcelonés.
El caso es que el órgano municipal presentó en diciembre de 2010 el presupuesto de los gastos correspondientes a la explotación de los sistemas de saneamiento de ambas depuradoras de cara a 2011, el cual ascendía a 5,6 millones de euros aproximadamente. Por su parte, la ACA respondió al consistorio en abril de 2012 anunciándole que tenía previsto destinar 4,4 millones de euros para el mantenimiento de las depuradoras, lo que supone que el Ayuntamiento ha de hacer frente por cuenta propia a los 450.000 euros de diferencia que la Agencia Catalana del Agua no incluye en su resolución.
Sin otra opción
El montante de la deuda contraída por la ACA con el Ayuntamiento de Sabadell se ha visto además incrementado en el presente ejercicio. Y es que este organismo aún no ha hecho públicos los criterios de financiación para 2012, por lo que el consistorio no ha podido presentar el presupuesto para este año y, sin embargo, ha tenido que costear con sus propios recursos la gestión de las depuradoras. Así pues, en total la ACA debe al Ayuntamiento de Sabadell cerca de 5 millones, explican desde la Administración municipal.
En el mes de junio, el alcalde de la localidad, Manuel Bustos, señaló al respecto que «esta situación puede significar el colapso del sistema de depuración de las aguas residuales de Sabadell, ya que en los términos actuales la gestión de las depuradoras es del todo inviable». «Por ello, no hemos tenido más opción que, después de reclamar lo que se nos debe por la vía administrativa, llevar este tema a la vía contenciosa», añadió el alcalde.
La Agencia Catalana del Agua tiene una deuda que supera los 1.250 millones y ha tenido que renegociar los pagos de la misma con los bancos. Una de las medidas que tomó la Generalitat para intentar paliar la situación fue la implantación de un canon que en la práctica hace que sean las compañías suministradoras las que soporten el IVA y la morosidad, aunque las compañías consideran que esta iniciativa, que tildan de ilegal, no mejorará las arcas de la ACA.
Muchos municipios denuncian que los impagos de la ACA comprometen las cuentas municipales. En este sentido, a Anglès (Girona), según su propio alcalde, le debe 150.000 euros para la estación transformadora de agua potable. Por su parte, a Figueres le adeuda 115.616 por la depuradora de aguas residuales, además del recorte en la partida de personal.
El caso es que el órgano municipal presentó en diciembre de 2010 el presupuesto de los gastos correspondientes a la explotación de los sistemas de saneamiento de ambas depuradoras de cara a 2011, el cual ascendía a 5,6 millones de euros aproximadamente. Por su parte, la ACA respondió al consistorio en abril de 2012 anunciándole que tenía previsto destinar 4,4 millones de euros para el mantenimiento de las depuradoras, lo que supone que el Ayuntamiento ha de hacer frente por cuenta propia a los 450.000 euros de diferencia que la Agencia Catalana del Agua no incluye en su resolución.
Sin otra opción
El montante de la deuda contraída por la ACA con el Ayuntamiento de Sabadell se ha visto además incrementado en el presente ejercicio. Y es que este organismo aún no ha hecho públicos los criterios de financiación para 2012, por lo que el consistorio no ha podido presentar el presupuesto para este año y, sin embargo, ha tenido que costear con sus propios recursos la gestión de las depuradoras. Así pues, en total la ACA debe al Ayuntamiento de Sabadell cerca de 5 millones, explican desde la Administración municipal.
En el mes de junio, el alcalde de la localidad, Manuel Bustos, señaló al respecto que «esta situación puede significar el colapso del sistema de depuración de las aguas residuales de Sabadell, ya que en los términos actuales la gestión de las depuradoras es del todo inviable». «Por ello, no hemos tenido más opción que, después de reclamar lo que se nos debe por la vía administrativa, llevar este tema a la vía contenciosa», añadió el alcalde.
La Agencia Catalana del Agua tiene una deuda que supera los 1.250 millones y ha tenido que renegociar los pagos de la misma con los bancos. Una de las medidas que tomó la Generalitat para intentar paliar la situación fue la implantación de un canon que en la práctica hace que sean las compañías suministradoras las que soporten el IVA y la morosidad, aunque las compañías consideran que esta iniciativa, que tildan de ilegal, no mejorará las arcas de la ACA.
Muchos municipios denuncian que los impagos de la ACA comprometen las cuentas municipales. En este sentido, a Anglès (Girona), según su propio alcalde, le debe 150.000 euros para la estación transformadora de agua potable. Por su parte, a Figueres le adeuda 115.616 por la depuradora de aguas residuales, además del recorte en la partida de personal.