Valdés brings order to the rivers

Wed, 18/07/2012

La Nueva España

El concejo de Valdés afrontará las temporadas de lluvias más tranquilo. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) ha autorizado las obras de urgencia que solicitó el gobierno de Valdés para evitar inundaciones en zonas cercanas a viviendas de Raicedo (río Negro) y de Bahínas y Brieves (río Esva). El pasado mes de mayo, operarios de la Confederación visitaron las zonas ahora en obras para realizar un proyecto. Se limpiará el cauce de los ríos de material árido y en el río Negro de Luarca, a la altura del campo de San Timoteo, se construirá una escollera.

La obra se llevará a cabo por fases, según indicó ayer el concejal de Obras, Balbino Suárez. CHC está ahora actuando en la parte alta del río Negro. En el río Esva se esperan dos obras. En Bahínas se construirá un puente nuevo y en la zona de Brieves también se ejecutarán labores de limpieza, según la documentación que tiene el Ayuntamiento. Estos núcleos son los que mayores problemas registran durante las temporadas de lluvias. El pasado otoño, el alcalde de Valdés, José Modesto Vallejo, y el concejal de Obras reclamaron medidas urgentes para evitar que las viviendas se quedaran aisladas a consecuencia del agua. Con la limpieza de áridos, se evita que se sigan acumulando sedimentos, lo que impide el paso del agua en épocas de más lluvias. El verano es «la estación perfecta» para acometer la obra, indicó Suárez. Las tareas en el río Negro concluirán antes del día grande de las fiestas de San Timoteo, que se celebra en el mismo campo donde ahora trabaja la maquinaria.

El gobierno del tripartito pidió en varias ocasiones más atención a CHC para prevenir accidentes futuros. El concejal de Obras lamentó en varias ocasiones las inundaciones que, a su juicio, «con una obra de pequeña entidad podrían prevenirse». En Valdés «tenemos una lucha constante con el agua», indica Suárez, que ya criticó en más ocasiones la falta de una obra de calado para los ríos Negro y Esva.

Este concejo espera desde hace décadas por un proyecto de mayor envergadura, pero, de momento, se queda en el cajón por la crisis económica actual. El proyecto está redactado. Se trata del encauzamiento del río Negro de Luarca, que requiere una inversión millonaria. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico siempre atribuyó su larga tramitación y su retraso a las exigencias ambientales y a la protección del río Negro, considerado Lugar de Interés Comunitario (LIC). Esta catalogación impide que el proyecto se realice sin tener en cuenta su impacto y sin hacer un estudio sobre cómo afecta la obra hidraúlica a su flora y su fauna.

El proyecto, que no puede financiarse por medio de dinero público, prevé mejorar la protección de las márgenes del cauce para evitar inundaciones, precisamente en uno de los puntos donde se está trabajando en la actualidad, entre el viaducto de San Timoteo y Las Arroxinas. Otra de las actuaciones espeSradas dentro del plan era la construcción de un puente nuevo en San Timoteo, que tendría mayor capacidad hidráulica.

Tanto el Alcalde como el concejal de Obras se mostraron ayer satisfechos con estas primeras actuaciones, que requieren de un mantenimiento futuro.

Mejoras en los cursos fluviales de la comarca.