Representantes de la organización agraria Asaja-Sevilla, la Federación de Regantes del Guadalquivir (Feragua), la Federación de Arroceros de Sevilla y la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), tras reunirse ayer, acordaron instar al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a «acelerar la modernización de los riegos del arroz» y a «presentar el informe de impacto medioambiental del dragado del río Guadalquivir».

Según explicaron, en la reunión participaron el presidente de Asaja-Sevilla y vicepresidente de la CES, Ricardo Serra; el presidente de la Federación de Arroceros de Sevilla y miembro de los órganos de Gobierno de Feragua, Julián Borja; el director-gerente de la Federación de Arroceros, Manuel Cano; el secretario general de Asaja-Sevilla, Eduardo Martín; el presidente de la CES, Miguel Rus; el miembro del Comité Ejecutivo de la CES en representación de los pueblos, Carlos García Gandul, y la secretaria general en funciones, Carmen Izquierdo.

Los representantes de las citadas asociaciones trasladaron a la patronal información sobre la situación actual de la cuenca del Guadalquivir, el plan de modernización del arroz, en fase de estudio en este momento, y la incidencia que el dragado tendría en los cultivos de regadío de la cuenca y en la actividad económica de los municipios que dependen de ella.

Los afectados niegan que el regadío y la actividad portuaria sean incompatibles y abogaron por «conciliar todos los intereses empresariales en juego».

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