The water plan of Andalucía will invert one billion between 2015 and 2027

Wed, 07/03/2012

La Voz de Almería

La delegada de Medio Ambiente, Sonia Rodríguez, presidió en la tarde de ayer la reunión del Consejo Provincial de Medio Ambiente y Biodiversidad, durante el que se presentó el Plan Hidrológico de las Cuencas Mediterráneas, aprobado inicialmente por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía en noviembre de 2011. Durante la reunión, se analizó especialmente su incidencia en la provincia de Almería.

En la Cuenca Mediterránea Andaluza, en la que se encuentra la provincia de Almería, el desarrollo del Plan Hidrológico supondrá reducir el déficit de 301,3 hectómetros cúbicos al año que presenta la demarcación (Cádiz, Granada, Málaga y Almería) de forma sustancial en el horizonte del año 2015 y alcanzar el equilibrio entre recursos disponibles y demandas en 2027.

Para conseguir estos objetivos, se prestará especial atención a los proyectos de modernización de regadíos y de incremento de recursos por desalación de aguas marinas y reutilización de aguas depuradas.

En la provincia de Almería el Plan prevé una inversión de 1.041 millones de los que 691 serían para resolver problemas de satisfacción de las demandas, 251 para lucha contra la contaminación puntual, 19 para la recuperación ambiental, 79 para defensa frente a las avenidas y lucha contra las sequías y 1,3 en mejora del conocimiento y la gobernanza del medio hídrico.

Entre las actuaciones más importantes cabe señalar las obras de mejora del embalse de Benínar; la desaladora del Campo de Dalías y obras complementarias: la ampliación de diversas depuradoras en el Poniente, Bajo Andarax, Campo de Níjar y Levante Almeriense; el proyecto de desagüe de la Balsa del Sapo; la mejora y modernización de regadíos intensivos y del interior provincial, y las conducciones desde la desaladora de Carboneras al Campo de Tabernas y a los Llanos de Almería, entre otras. La ejecución del Plan Hidrológico, que deberá ser aprobado por el Consejo de Ministros, logrará disminuir la vulnerabilidad de la provincia de Almería frente a sequías, reducirá la sobreexplotación de acuíferos, consolidará regadíos infradotados, recuperará el buen estado ecológico de los caudales y mejorará la calidad del recurso en toda la cuenca mediterránea.