La organización agraria Asaja ha afirmado hoy que las lluvias que se registran en la provincia de Alicante beneficiarán al campo y a la calidad de los productos, pero ha advertido que pueden poner en peligro el cultivo de la uva de mesa.

A través de un comunicado de prensa, Asaja ha explicado que los beneficios de las precipitaciones, que han servido para reducir los niveles de sales de la tierra, se dejarán sentir en la mayoría de los cultivos, especialmente en los de secano, como el almendro, el olivar y la uva de vino.

Además, permitirá que los cítricos registren aumentos del calibre y una mejoría del color y el sabor.

No obstante, han alertado de posibles daños en los frutos que se encuentran en un estado avanzado de maduración.

Así, en Pego, Dénia y en las provincias de Valencia y Castellón, donde se cultivan variedades tempranas de mandarinas, se están registrando daños por "pixat" o mancha de agua.

Por ello, los técnicos de Asaja permanecen en alerta para detectar más daños, especialmente durante los próximos días por si aparece podredumbre, aunque, de momento, no se perciben mermas significativas.

En este sentido, la organización ha centrado su atención en el cultivo de la uva de mesa.
La variedad 'Italiana' e 'Ideal' ya se ha recolectado o queda poca por cortar en el campo, por lo que es la 'aledo' -la que se consume en Nochevieja- la que mayor riesgo presenta.
El presidente de Asaja-Novelda, Pedro Ruvira, ha explicado que lo mejor sería que, "de aquí en adelante, no se registre humedad en el ambiente, que es la que más afecta al fruto, en forma de rocío o niebla, y que a mediodía las temperaturas no superen los 15º-16º".

En el Alto Vinalopó también se prevé que haya parcelas afectadas de brócoli y zanahoria, pues los agricultores no han podido entrar con los tractores para realizar las recolectas.
"Estamos comprobando con alegría como este periodo parece ser más lluvioso, que es justamente lo que necesitamos", ha afirmado el secretario general de Asaja-Alicante, Eladio Aniorte, quien ha apuntado que el agua garantizará riegos de la mejor calidad "sin tener que pagar a las comunidades de usuarios".