Las primeras Organizaciones No Gubernamentales (ONG) surgen en el siglo XIX, pero no será hasta depués de la II Guerra Mundial, en 1945, cuando adquieren reconocimiento oficial al amparo del artículo 71 de la Carta de las Naciones Unidas:
"El Consejo Económico y Social podrá hacer arreglos adecuados para celebrar consultas con organizaciones no gubernamentales que se ocupen en asuntos de la competencia del Consejo. Podrán hacerse dichos arreglos con organizaciones internacionales y, si a ello hubiere lugar, con organizaciones nacionales, previa consulta con el respectivo Miembro de las Naciones Unidas".
En la actualidad, el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas reconoce 1.917 ONG con estatus consultivo, además de 952 que están en lista. A través de su Comité sobre ONG, Naciones Unidas gestiona la participación de estos organismos en proyectos internacionales de carácter humanitario.
El ámbito de actuación de las ONG es muy amplio, tanto que incluso se ha acuñado el acrónimo ONGD para distinguir a aquellas organizaciones no gubernamentales centradas en aspectos de Desarrollo.
En el año 2002, el Consejo Económico y Social reconoció el derecho humano al agua potable y al saneamiento básico.
Algunos datos sobre el agua
Algunos datos ofrecidos por CONGDE ponen de relieve la importancia que, a escala mundial, tiene el acceso a los recursos hídricos. Unos datos que revelan, básicamente, las importantes carencias que sufre una buena parte de la población mundial en cuanto a abastecimiento y saneamiento.
Agua y saneamiento
En todo el mundo, se estima en 1.100 millones de personas las que no disponen de acceso a agua potable de forma adecuada. 2.600 millones carecen de servicios básicos de saneamiento, la mitada de ellas repartidas en China e India. A principios de los 80, el número de personas sin acceso a agua potable era de 1.900 millones de personas, pero la situación respecto al saneamiento no ha mejorado: entonces solo 2.000 millones no lo tenían, cifra que ha crecido en la actualidad.
La cantidad mínima de agua para satisfacer las necesidades básicas se estima entre 20 y 50 litros diarios. Solo una de cada seis personas tienen acceso a dicho volumen
Agua y salud
En el año 2002, más de tres millones de personas murieron a causa de enfermedades diarreicas y paludismo, asociadas a la falta de agua en condiciones sanitarias. El 90% de los fallecidos era menor de 5 años. Se estiman que el número medio anual de fallecimientos es de 3 a 4 millones de personas.
Además, cada día unos 3.800 niños mueren por enfermedades asociadas a la falta de agua potable y de saneamiento adecuado. Alrededor de 10 personas adultas mueren cada 60 segundos debido a enfermedades relacionadas con el agua.
Además, se ha calculado que un 85% de todas las enfermedades en el mundo en desarrollo se pueden asociar con la falta de acceso al agua potable y un saneamiento inadecuado.
Agua y alimentos
Son necesarios 3.000 litros de agua por persona para producir lo necesario para alimentar a una persona durante un día.
Para el año 2030, la población mundial necesitara un 55% más de alimentos, lo que implicará una mayor demanda de agua para hacer posible los cultivos de regadío, que actualmente consumen la mayor parte del agua dulce del mundo.
Agua y necesidades de consumo
Debido al proceso de urbanización, para el año 2030 se prevé que dos tercios de la población mundial resida en zonas urbanas, lo que incrementará la demanda de agua.
Mientras que en el último siglo la población mundial se ha multiplicado por tres, el consumo de agua lo ha hecho por seis. Las pérdidas debido a fugas en las conducciones pueden alcanzar hasta el 40% del volumen total de agua transportada.
Agua y medio ambiente
Las especies animales de agua dulce han disminuido un 47% entre los años 1970 y 2000. Los lagos son especialmente importantes, ya que los 145 más grandes del mundo albergan el 95% del agua dulce de todo el planeta.
Agua y energía
La inversión total mundial en energías renovables pasó de 6.000 millones de dólares en 1995 a aproximadamente 22.000 millones de dólares en 2003, y sigue creciendo rápidamente
Europa
utiliza 75% de su potencial de energía hidráulica, mientras
que África sólo
ha logrado explotar 7% del suyo y por lo que el 60% de la población
se ve privada de electricidad.
La necesidad de la cooperación internacional
El agua es un bien esencial para la vida y el desarrollo de cualquier comunidad humana, pero se trata de un elemento cada vez más escaso en ciertas partes del planeta. Además de los datos reseñados más arriba, CONGDE ofrece nuevas cifras que demuestran la crítica situación que experimentan millones de personas debido a la imposibilidad de acceder a los recursos hídricos:
Una de cada seis personas en el mundo no tiene acceso a agua potable, y un 40% no disponen de un saneamiento adecuado
La escasez frena el aprendizaje de más de 150 millones de niños. Se calcula que un suministro garantizado de agua resolvería buena parte del problema educativo, ya que las enfermedades causadas por las condiciones sanitarias y el trabajo dedicado a la búsqueda de fuentes impide dedicar tiempo a la educación
Existen fuertes desigualdades en los precios del agua que hace que ésta sea, en ocasiones, mucho más cara para los más pobres
Las regiones con escasez crónica de agua aumentan con el paso del tiempo, situación que puede verse empeorada si se cumplen las previsiones sobre cambio climático. Ello supone la amenaza de la desnutrición, debido a los descensos de la producción de cultivos en muchas partes del mundo.
Las exigencias de las ONG dedicadas al desarrollo a los gobiernos de sus respectivos países pasan por el cumplimiento de las responsabilidades adquiridas de acuerdo con la Observación General 15 de Naciones Unidas, donde se conmina a los países desarrollados a cooperar con los países que presentan dificultades en cuanto abastecimiento de agua potable y saneamiento. Esta actuación debería concretarse en una estrategia eficaz, que en el caso de España está detallada en el Plan Director de la Cooperación Española, a la vez que se impulsan foros e iniciativas internacionales.
Este Plan Director reconoce el enfoque multisectorial de agua: "agua es salud, es fundamental para alcanzar la seguridad alimentaria, es desarrollo productivo, es habitabilidad digna, es un recurso natural cuya preservación es imprescindible". Además, reconoce que "el agua no ha sido contemplada como una línea de intervención prioritaria dentro de la política española de cooperación internacional, por lo que España no ha desplegado hasta el momento las potencialidades que tiene en este ámbito específico de actuación. El cambio en tal estado de cosas comenzará por la elaboración, en el más breve plazo posible, de una Estrategia de la Cooperación Española de Agua y Saneamiento".
Plan Director de la Cooperación Española - Que trata las líneas de actuación sobre Cooperación Internacional en España en todas las materias
Beyond scarcity: power, poverty and the global water crisis (ingles, PDF) - Editado en 2006 por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)