El agua es un recurso natural fundamental para todas las actividades humanas. También es considerado un recurso natural escaso y de los más críticos para la industria turística. De hecho, el desarrollo turístico está supeditado, entre otros factores, a los usos del agua, la escasez hídrica, la calidad en el abastecimiento de agua potable y al medio ambiente local.

El turismo es uno de los motores de crecimiento más prometedores de la economía mundial, según un informe de Naciones Unidas, pero su desarrollo va unido a problemas de sostenibilidad. Por ejemplo, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) estima que los turistas en España consumen unos 440 litros por habitante y día, más del doble de lo que consume el ciudadano medio español.

En algunas zonas turísticas, la escasez de agua ha aumentado el interés en la regeneración del agua, la desalinización y la mejora de las capacidades de almacenamiento de agua con la finalidad de proporcionar seguridad en el abastecimiento. Asimismo, en algunas regiones áridas existe un turismo de éxito estrechamente vinculado al rol del agua como atracción en ciertas infraestructuras turísticas de ocio (parques acuáticos, balnearios, campos de golf, etc.).

Esta Conferencia se centrará en las relaciones entre agua, turismo, deporte y sostenibilidad, en los problemas y las limitaciones para avanzar hacia un turismo sostenible pero, al mismo tiempo, competitivo y generador de empleo, así como en el abastecimiento de agua y las soluciones a los problemas de escasez de agua en las zonas turísticas.