El recibo eléctrico de los regadíos se duplica y suma 4,8 millones al año
Mié, 16/11/2011
Los regantes navarros se gastan el doble que hace tres años en pagar la electricidad que les permite bombear agua desde balsas hasta su fincas y salvar desniveles orográficos. Así, el recibo de la luz de los regadíos navarros pro este motivo asciende en la actualidad a casi 4,8 millones al año. Para hacerse una idea de su impacto en los bolsillos de los productores, la factura eléctrica supone entorno al 20% de los costes de producción de cultivos generalizados como el maíz, según datos del Servicio de Asesoramiento al Regante, dependiente de Riegos de Navarra. El objetivo es ahorrar, reducir el gasto de este insumo. Y para conseguirlo los técnicos miran con interés a las energías renovables. ¿Por qué comprar energía a la red eléctrica general en lugar de producirla utilizando recursos de los regantes como son la tierra, el agua, el sol y el viento? Es la pregunta a la que tratará de responder el I Congreso nacional de Regadíos y Energías Renovables, que reunirá hoy y mañana en Pamplona a unos 200 expertos.
El evento, que se desarrollará en Baluarte, está organizado por Riegos de Navarra, Gobierno foral y Cener (Centro de nacional de energías renovables) con el patrocinado por Aguacanal, MTorres, Banca Cívica y Ministerio de Medio Rural.
En Navarra existen en estos momentos un total de 117.746 hectáreas de regadío, de las que 22.657 requieren bombeo. En la actualidad hay una treintena de estaciones de bombeo, que elevan el agua a una altura media de 102 metros, según explica la técnico del Servicio de Asesoramiento al Regante, Idoia Ederra Gil. La técnico recuerda que fue en 2008, a raíz del inicio de la liberalización del sector eléctrico, cuando se "disparó" el precio de la electricidad en el campo. Así, la parte de potencia o fija de la factura (el kilovatio contratado) se sitúa en la actualidad en 53 euros, frente a los 13 euros de hace tres años. "La parte fija se paga durante todo el año aunque e 60% del bombeo de agua se realiza en julio y agosto. A ella hay que añadir el consumo, que por hectárea se sitúa en una media se sitúa de 1.600 kW/hora", agrega.
Una normativa escasa
El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacorre), Andrés del Campo, considera que el Gobierno que salga de las urnas el próximo domingo debe articular la normativa necesaria para facilitar a los usuarios del agua la producción de energías renovables (solar, eólica, hidroeléctrica, etc.) en sus explotaciones. Para Del Campo, la agilización de los procesos administrativos permitirá hacer extensivas a un mayor número de usuarios "las experiencias piloto puestas en marcha hasta la fecha por varias comunidades de regantes de toda España, que han aprovechado la fuerza generada por el viento y el agua para la producción de energías renovables".
De esta forma, a juicio de fenacore, el desarrollo de esta iniciativa contribuirá a paliar el déficit histórico de energía eléctrica que sufre España. "Si los regantes producen energía permitirá a Red Eléctrica Española contar con una mayor dotación de energía para abastecer al conjunto de la población". Así, según Del Campo, con la medida, los regantes podrían aportar "su granito de arena" al cumplimiento de los objetivos del Protocolo de Kyoto, ya que el impacto ambiental que provocan las energías limpias "es 30 veces menor que el generado por las energías convencionales ya que no emiten gases contaminantes responsables del calentamiento global, aunque su coste de producción es más elevado".
El evento, que se desarrollará en Baluarte, está organizado por Riegos de Navarra, Gobierno foral y Cener (Centro de nacional de energías renovables) con el patrocinado por Aguacanal, MTorres, Banca Cívica y Ministerio de Medio Rural.
En Navarra existen en estos momentos un total de 117.746 hectáreas de regadío, de las que 22.657 requieren bombeo. En la actualidad hay una treintena de estaciones de bombeo, que elevan el agua a una altura media de 102 metros, según explica la técnico del Servicio de Asesoramiento al Regante, Idoia Ederra Gil. La técnico recuerda que fue en 2008, a raíz del inicio de la liberalización del sector eléctrico, cuando se "disparó" el precio de la electricidad en el campo. Así, la parte de potencia o fija de la factura (el kilovatio contratado) se sitúa en la actualidad en 53 euros, frente a los 13 euros de hace tres años. "La parte fija se paga durante todo el año aunque e 60% del bombeo de agua se realiza en julio y agosto. A ella hay que añadir el consumo, que por hectárea se sitúa en una media se sitúa de 1.600 kW/hora", agrega.
Una normativa escasa
El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacorre), Andrés del Campo, considera que el Gobierno que salga de las urnas el próximo domingo debe articular la normativa necesaria para facilitar a los usuarios del agua la producción de energías renovables (solar, eólica, hidroeléctrica, etc.) en sus explotaciones. Para Del Campo, la agilización de los procesos administrativos permitirá hacer extensivas a un mayor número de usuarios "las experiencias piloto puestas en marcha hasta la fecha por varias comunidades de regantes de toda España, que han aprovechado la fuerza generada por el viento y el agua para la producción de energías renovables".
De esta forma, a juicio de fenacore, el desarrollo de esta iniciativa contribuirá a paliar el déficit histórico de energía eléctrica que sufre España. "Si los regantes producen energía permitirá a Red Eléctrica Española contar con una mayor dotación de energía para abastecer al conjunto de la población". Así, según Del Campo, con la medida, los regantes podrían aportar "su granito de arena" al cumplimiento de los objetivos del Protocolo de Kyoto, ya que el impacto ambiental que provocan las energías limpias "es 30 veces menor que el generado por las energías convencionales ya que no emiten gases contaminantes responsables del calentamiento global, aunque su coste de producción es más elevado".