Un informe revela que el uso agrícola evita el despoblamiento de zonas rurales
Lun, 19/09/2011
Orihuela, Villena y Elche son los municipios de Alicante que más contribuyen al mantenimiento de los paisajes, frenar la desertización y evitar el despoblamiento de las zonas rurales, al destacar entre las poblaciones con mayor superficie cultivada. En total, acaparan el 31 por ciento de las extensiones hortofrutícolas que hay en la provincia. Estas son las principales conclusiones que se pueden extraer del informe elaborado por el departamento de Estudios Agrarios de la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja), un estudio detallado sobre la situación actual del sector agrícola y su evolución durante las últimas décadas.
En un primer análisis se observa que no coinciden los municipios líderes en superficie agraria con los más importantes en cuanto al volumen económico en origen de la producción. Orihuela, Elche y Pilar de la Horadada ocupan las primeras posiciones en el ranking de riqueza y respecto a 2009, puede contemplarse que se incrementaron las cuantías totales pese a la crisis que asoló otros sectores. La Vega Baja y el Medio Vinalopó se revelan como las comarcas que tiran del carro de la economía agraria en la provincia. El estudio también evidencia el importante desarrollo agrario de Villena, que ostenta la segunda posición en el ranking en superficie agraria útil cultivada. El resto de municipios del Alto Vinalopó no siguen este desarrollo.
También destaca la importancia de Pilar de la Horadada, que pese a ocupar el séptimo lugar en superficie se sitúa en el tercero en cuanto al valor de su producción agraria. Este hecho se debe a la producción de cultivos que poseen mayor valor en los mercados y la fuerte implantación de invernaderos en la zona, que con menor superficie producen un número mayor de hortalizas, y también gracias al canal de comercialización abierto a través de la cooperativa Surinver.
Cabe destacar la influencia del Campo de Elche en la economía del conjunto de la provincia y el predominio de Orihuela y otros municipios de la Vega Baja como Almoradí, Albatera, San Miguel de Salinas, Los Montesinos, Guardamar y Dolores, hecho El uso agrícola contribuye al mantenimiento de los paisajes y frena la desertización. que también revela el importante papel que desempeñan nuestros cítricos. Para esta comarca resulta imprescindible contar con recursos hídricos suficientes. El presidente de Asaja Alicante, Eladio Aniorte, asegura que para mantener y aumentar el peso económico del sector se necesita una planificación de abastecimiento de agua coherente. «Nunca dejaremos de defender los trasvases, como el del Ebro, por ser uno de los más caudalosos de España y porque hemos sufrido años de sequía muy duros en los que no se aprobaron aportes hídricos para el regadío, justo los que necesitamos los agricultores», defiende Aniorte.
Otro dato significativo se encuentra en Pinoso, que ocupa el cuarto lugar en superficie y el puesto vigésimo séptimo en el valor económico. También destaca la situación de Mutxamel, que ha visto reducida en más de 5.000 hectáreas su superficie durante la última década y ocupa el puesto quincuagésimo séptimo. Sin embargo, en términos económicos está en la posición undécima del ranking.
En un primer análisis se observa que no coinciden los municipios líderes en superficie agraria con los más importantes en cuanto al volumen económico en origen de la producción. Orihuela, Elche y Pilar de la Horadada ocupan las primeras posiciones en el ranking de riqueza y respecto a 2009, puede contemplarse que se incrementaron las cuantías totales pese a la crisis que asoló otros sectores. La Vega Baja y el Medio Vinalopó se revelan como las comarcas que tiran del carro de la economía agraria en la provincia. El estudio también evidencia el importante desarrollo agrario de Villena, que ostenta la segunda posición en el ranking en superficie agraria útil cultivada. El resto de municipios del Alto Vinalopó no siguen este desarrollo.
También destaca la importancia de Pilar de la Horadada, que pese a ocupar el séptimo lugar en superficie se sitúa en el tercero en cuanto al valor de su producción agraria. Este hecho se debe a la producción de cultivos que poseen mayor valor en los mercados y la fuerte implantación de invernaderos en la zona, que con menor superficie producen un número mayor de hortalizas, y también gracias al canal de comercialización abierto a través de la cooperativa Surinver.
Cabe destacar la influencia del Campo de Elche en la economía del conjunto de la provincia y el predominio de Orihuela y otros municipios de la Vega Baja como Almoradí, Albatera, San Miguel de Salinas, Los Montesinos, Guardamar y Dolores, hecho El uso agrícola contribuye al mantenimiento de los paisajes y frena la desertización. que también revela el importante papel que desempeñan nuestros cítricos. Para esta comarca resulta imprescindible contar con recursos hídricos suficientes. El presidente de Asaja Alicante, Eladio Aniorte, asegura que para mantener y aumentar el peso económico del sector se necesita una planificación de abastecimiento de agua coherente. «Nunca dejaremos de defender los trasvases, como el del Ebro, por ser uno de los más caudalosos de España y porque hemos sufrido años de sequía muy duros en los que no se aprobaron aportes hídricos para el regadío, justo los que necesitamos los agricultores», defiende Aniorte.
Otro dato significativo se encuentra en Pinoso, que ocupa el cuarto lugar en superficie y el puesto vigésimo séptimo en el valor económico. También destaca la situación de Mutxamel, que ha visto reducida en más de 5.000 hectáreas su superficie durante la última década y ocupa el puesto quincuagésimo séptimo. Sin embargo, en términos económicos está en la posición undécima del ranking.