Productores piden un plan coordinado para fomentar la agricultura ecológica en la cuenca del Guadalquivir
Vie, 15/07/2011
La Asociación Comité Andaluz de Agricultura Ecológica (CAAE) ha presentado alegaciones al Plan Hidrológico del Guadalquivir, en el que entre otras medidas, se propone un plan coordinado con las administraciones competentes para fomentar la producción ecológica en la cuenca del Guadalquivir y mitigar la contaminación del entorno de dicho río.
Según ha informado en una nota la Asociación CAAE, considera que "el Plan Hidrológico debe afrontar fundamentalmente tres retos, la sostenibilidad ambiental, de equidad territorial y social y la gobernanza", y en ese sentido considera que la producción ecológica "es una herramienta vital para superarlos".
Por ello, esta asociación se muestra "convencida de que alcanzar el buen estado ecológico de nuestros ríos está directamente relacionado con el impulso de la agricultura ecológica en la cuenca", afirma en el texto remitido este jueves al responsable de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
De esta forma, la entidad ha señalado que la agricultura ecológica "permite mantener y conservar los ecosistemas, los servicios ambientales imprescindibles y mitigar el cambio climático" y cita que los estudios disponibles estiman que "la producción ecológica reduce las emisiones de dióxido de carbono entre un 40 por ciento y un 60 por ciento con la transformación de convencional a ecológico, dependiendo de la orientación productiva, debido a la no utilización de fertilizantes nitrogenados y plaguicidas químicos, y el bajo uso de fertilizantes potásicos y fosfóricos y alimentos concentrados".
En este sentido, la Asociación CAAE informa de que "los trabajos realizados sobre agricultura ecológica coinciden en que este método de producción, si se práctica adecuadamente, evita la contaminación de origen agrícola ya que elimina el uso de fertilizantes y pesticidas de síntesis y gestiona más adecuadamente el agua".
Aseguran que la agricultura ecológica utiliza "fitosanitarios naturales de muy baja toxicidad y nula incidencia en la contaminación y no utiliza abonos nitrogenados solubles, ni permite el uso de estiércol no compostado y en cantidades muy limitadas, por lo que el riesgo de contaminación es muy bajo".
Ha recordado además que la ganadería ecológica "por definición es extensiva, por lo que no tiene riesgos de contaminación por acumulación de estiércol y vertidos". La Asociación cita como ejemplo la de otros países europeos en los que se ha propuesto la producción ecológica como la herramienta idónea para la gestión de las cuencas hidrológicas y otras zonas vulnerables a la contaminación.
Asimismo, ha apuntado que la contaminación en el entorno del Guadalquivir es uno de los principales problemas de la gestión de la cuenca y para mitigarlo, la Asociación CAAE propone, entre otras medidas, "un plan coordinado con las administraciones competentes para subvencionar a los agricultores que decidan acogerse a este tipo de agricultura, medida que consideramos urgente para compatibilizar la gobernabilidad de la cuenca con el mantenimiento de esta actividad económica".
Según ha informado en una nota la Asociación CAAE, considera que "el Plan Hidrológico debe afrontar fundamentalmente tres retos, la sostenibilidad ambiental, de equidad territorial y social y la gobernanza", y en ese sentido considera que la producción ecológica "es una herramienta vital para superarlos".
Por ello, esta asociación se muestra "convencida de que alcanzar el buen estado ecológico de nuestros ríos está directamente relacionado con el impulso de la agricultura ecológica en la cuenca", afirma en el texto remitido este jueves al responsable de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
De esta forma, la entidad ha señalado que la agricultura ecológica "permite mantener y conservar los ecosistemas, los servicios ambientales imprescindibles y mitigar el cambio climático" y cita que los estudios disponibles estiman que "la producción ecológica reduce las emisiones de dióxido de carbono entre un 40 por ciento y un 60 por ciento con la transformación de convencional a ecológico, dependiendo de la orientación productiva, debido a la no utilización de fertilizantes nitrogenados y plaguicidas químicos, y el bajo uso de fertilizantes potásicos y fosfóricos y alimentos concentrados".
En este sentido, la Asociación CAAE informa de que "los trabajos realizados sobre agricultura ecológica coinciden en que este método de producción, si se práctica adecuadamente, evita la contaminación de origen agrícola ya que elimina el uso de fertilizantes y pesticidas de síntesis y gestiona más adecuadamente el agua".
Aseguran que la agricultura ecológica utiliza "fitosanitarios naturales de muy baja toxicidad y nula incidencia en la contaminación y no utiliza abonos nitrogenados solubles, ni permite el uso de estiércol no compostado y en cantidades muy limitadas, por lo que el riesgo de contaminación es muy bajo".
Ha recordado además que la ganadería ecológica "por definición es extensiva, por lo que no tiene riesgos de contaminación por acumulación de estiércol y vertidos". La Asociación cita como ejemplo la de otros países europeos en los que se ha propuesto la producción ecológica como la herramienta idónea para la gestión de las cuencas hidrológicas y otras zonas vulnerables a la contaminación.
Asimismo, ha apuntado que la contaminación en el entorno del Guadalquivir es uno de los principales problemas de la gestión de la cuenca y para mitigarlo, la Asociación CAAE propone, entre otras medidas, "un plan coordinado con las administraciones competentes para subvencionar a los agricultores que decidan acogerse a este tipo de agricultura, medida que consideramos urgente para compatibilizar la gobernabilidad de la cuenca con el mantenimiento de esta actividad económica".