El Plan Hidrológico del Guadiana reducirá la demanda de agua un 60%
Vie, 24/06/2011
Según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos-Iniciativa Rural (COAG-IR), el Plan Hidrológico del Guadiana ha considerado que se ha de reducir a la mitad la demanda de agua de la actividad de los cultivos de la cuenca del río, pasando de los actuales 544 hectómetros cúbicos a 239 --un 57 por ciento-- a partir del año 2015.
El recorte de las demandas agrarias para esta zona pivota sobre la aplicación del Plan Especial del Alto Guadiana, que plantea ante la actual situación de crisis un escenario presupuestario en el que la financiación de las medidas más importantes del PEAG --adquisición de derechos y forestación de tierras agrarias-- se retrasarían a fases posteriores del Plan Hidrológico, ha informado la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos-Iniciativa Rural (COAG-IR) en nota de prensa.
Para COAG-IR, el borrador de Plan Hidrológico del Guadiana, que estará expuesto a consulta pública hasta el 26 de noviembre próximo, "no aporta una solución satisfactoria para abastecer las demandas agrarias de la parte Alta de la demarcación, donde se encuentra una de las agriculturas de regadío más activas de Castilla-La Mancha".
Según la Asociación, el Plan Hidrológico plantea además la reducción del déficit global de recursos de toda la cuenca del Guadiana, estimado en unos 270 hectómetros cúbicos, a solo 100 para el próximo 2027, "pero con un aumento previsto de las demandas, que pasarían de 2.218 hectómetros de ahora a 2.314 en ese año, para todas las actividades que no sean las agrarias y en todas las zonas que no son Alto Guadiana".
El Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), "que debería estar funcionando desde el 2002, se aprobó en 2008, y contempla que se tendrían que haber gastado 525 millones de euros en adquisición de derechos de regadío y 55 más en forestación de tierras agrarias", pero hasta la fecha, según COAG-IR, "sólo se han puesto sobre la mesa 66 millones de euros para adquisición de derechos y nada para forestación, lo que pone en entredicho el cumplimiento de dos de los ejes principales de dicho Plan".
"Si este Plan sale así se va a cometer el mismo error histórico que se cometió con el anterior, en el que una bonanza climatológica coincidente con la elaboración del Plan Hidrológico de la cuenca y los resultados coyunturales del llamado Plan de Humedales enmascararon el problema de insuficiencia de recursos para la agricultura", ha añadido la Coordinadora agraria.
Además, según la Asociación, en la actualidad "sí se reconoce que hay un déficit de recursos para la agricultura de regadío muy importante, pero no se exploran medidas para poner a disposición de las demandas agrarias recursos adicionales", sino que se recortan a menos de la mitad dichas demandas "basándose en un PEAG que no se está ejecutando ni parece que se tenga intención de ejecutar en las condiciones en las que se aprobó".
El recorte de las demandas agrarias para esta zona pivota sobre la aplicación del Plan Especial del Alto Guadiana, que plantea ante la actual situación de crisis un escenario presupuestario en el que la financiación de las medidas más importantes del PEAG --adquisición de derechos y forestación de tierras agrarias-- se retrasarían a fases posteriores del Plan Hidrológico, ha informado la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos-Iniciativa Rural (COAG-IR) en nota de prensa.
Para COAG-IR, el borrador de Plan Hidrológico del Guadiana, que estará expuesto a consulta pública hasta el 26 de noviembre próximo, "no aporta una solución satisfactoria para abastecer las demandas agrarias de la parte Alta de la demarcación, donde se encuentra una de las agriculturas de regadío más activas de Castilla-La Mancha".
Según la Asociación, el Plan Hidrológico plantea además la reducción del déficit global de recursos de toda la cuenca del Guadiana, estimado en unos 270 hectómetros cúbicos, a solo 100 para el próximo 2027, "pero con un aumento previsto de las demandas, que pasarían de 2.218 hectómetros de ahora a 2.314 en ese año, para todas las actividades que no sean las agrarias y en todas las zonas que no son Alto Guadiana".
El Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), "que debería estar funcionando desde el 2002, se aprobó en 2008, y contempla que se tendrían que haber gastado 525 millones de euros en adquisición de derechos de regadío y 55 más en forestación de tierras agrarias", pero hasta la fecha, según COAG-IR, "sólo se han puesto sobre la mesa 66 millones de euros para adquisición de derechos y nada para forestación, lo que pone en entredicho el cumplimiento de dos de los ejes principales de dicho Plan".
"Si este Plan sale así se va a cometer el mismo error histórico que se cometió con el anterior, en el que una bonanza climatológica coincidente con la elaboración del Plan Hidrológico de la cuenca y los resultados coyunturales del llamado Plan de Humedales enmascararon el problema de insuficiencia de recursos para la agricultura", ha añadido la Coordinadora agraria.
Además, según la Asociación, en la actualidad "sí se reconoce que hay un déficit de recursos para la agricultura de regadío muy importante, pero no se exploran medidas para poner a disposición de las demandas agrarias recursos adicionales", sino que se recortan a menos de la mitad dichas demandas "basándose en un PEAG que no se está ejecutando ni parece que se tenga intención de ejecutar en las condiciones en las que se aprobó".