Activan la recuperación de dos especies de río en la cuenca del Ulla
Jue, 02/06/2011
La Consellería de Medio Rural acaba de activar un proyecto para la recuperación de las poblaciones de mejillón de río (Margaritifera margaritifera) y de desmán ibérico (Galemys pyrenaicus), dos especies fluviales, en la cuenca del Ulla y especialmente en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes.
Esta actuación, cifrada en unos cuatro millones de euros y financiada con fondos europeos, arrancó ayer su fase administrativa con la licitación del servicio de coordinación técnica de este proyecto, denominado Life+. El concurso sale por 175.000 euros, incluyendo posibles prórrogas, ya que en principio se prevé que el plan de recuperación se extienda hasta el año 2015, aunque podría ampliarse en función de los resultados obtenidos. Las empresas interesadas tendrán quince días naturales para presentar sus ofertas, que se abrirán el próximo 22 de junio,fecha en la que arrancará de lleno esta iniciativa medioambiental.
En el estudio realizado por la Xunta se señala que la contaminación parece haber sido el principal motivo de la desaparición de estas dos especies de los ríos, sobre todo en Europa. No obstante, el análisis pormenorizado sobre el río Ulla achaca la merma del mejillón y el desmán o almizclera a los vertidos urbanos procedentes de Santiago de Compostela y su entorno a través del río Sar, a los fuertes cambios del caudal del río derivados del embalse de Portodemouros, a la contaminación por la actividad agroganadera con purines y fitosanitarios en esta zona y a la existencia de dos antiguas explotaciones mineras a cielo abierto en el concello coruñés de Touro.
Por ello, la consellería pretende establecer un plan que permita la mejora del estado de conservación de estas dos especies de río y garantice su futuro, pero que también establezca las condiciones convenientes para recuperar las poblaciones originales. Así, se establece un programa de actuaciones por un período de cinco años.
Una de las principales acciones consistirá en la eliminación de los denominados obstáculos del río, ya que utilizan diversas especies piscícolas migradoras, como los salmones, durante su fase larvaria.Así, si se favorece el remonte de estos peces, se favorece la reproducción de estas especies. Ante esta situación, se ha optado por demoler o derribar al menos una decena de los quince obstáculos identificados en la cuenca del Ulla, lo que afecta tanto al cauce central como a afluentes como el Arnego, el Oca o el Liñares. En principio, la eliminación de estos obstáculos se prolongará durante dos años.
Además, para corregir la contaminación agroganadera se va a implantar un código de buenas prácticas y se a va poner en marcha una planta de valorización de residuos orgánicos agroganaderos con instalaciones y equipamiento específico en una explotación experimental como la Finca de Mouriscade.
Esta actuación, cifrada en unos cuatro millones de euros y financiada con fondos europeos, arrancó ayer su fase administrativa con la licitación del servicio de coordinación técnica de este proyecto, denominado Life+. El concurso sale por 175.000 euros, incluyendo posibles prórrogas, ya que en principio se prevé que el plan de recuperación se extienda hasta el año 2015, aunque podría ampliarse en función de los resultados obtenidos. Las empresas interesadas tendrán quince días naturales para presentar sus ofertas, que se abrirán el próximo 22 de junio,fecha en la que arrancará de lleno esta iniciativa medioambiental.
En el estudio realizado por la Xunta se señala que la contaminación parece haber sido el principal motivo de la desaparición de estas dos especies de los ríos, sobre todo en Europa. No obstante, el análisis pormenorizado sobre el río Ulla achaca la merma del mejillón y el desmán o almizclera a los vertidos urbanos procedentes de Santiago de Compostela y su entorno a través del río Sar, a los fuertes cambios del caudal del río derivados del embalse de Portodemouros, a la contaminación por la actividad agroganadera con purines y fitosanitarios en esta zona y a la existencia de dos antiguas explotaciones mineras a cielo abierto en el concello coruñés de Touro.
Por ello, la consellería pretende establecer un plan que permita la mejora del estado de conservación de estas dos especies de río y garantice su futuro, pero que también establezca las condiciones convenientes para recuperar las poblaciones originales. Así, se establece un programa de actuaciones por un período de cinco años.
Una de las principales acciones consistirá en la eliminación de los denominados obstáculos del río, ya que utilizan diversas especies piscícolas migradoras, como los salmones, durante su fase larvaria.Así, si se favorece el remonte de estos peces, se favorece la reproducción de estas especies. Ante esta situación, se ha optado por demoler o derribar al menos una decena de los quince obstáculos identificados en la cuenca del Ulla, lo que afecta tanto al cauce central como a afluentes como el Arnego, el Oca o el Liñares. En principio, la eliminación de estos obstáculos se prolongará durante dos años.
Además, para corregir la contaminación agroganadera se va a implantar un código de buenas prácticas y se a va poner en marcha una planta de valorización de residuos orgánicos agroganaderos con instalaciones y equipamiento específico en una explotación experimental como la Finca de Mouriscade.