CHD invertirá 500.000 euros en proyectos de mejora de 10 depuradoras de Valladolid, Segovia, Zamora, Ávila y Salamanca
Mar, 24/05/2011
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha licitado por 502.853 euros la redacción de los proyectos de mejora de las instalaciones actuales de diez Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) de la cuenca para que los procesos de depuración incluyan el tratamiento terciario, es decir la eliminación de nitrógeno y fósforo de los vertidos.
Se trata de las estaciones depuradoras de Medina del Campo, Iscar, Tordesillas y Tudela de Duero (Valladolid), Cantalejo (Segovia), Benavente y Toro (Zamora), Arévalo y Barco de Ávila (Ávila) y Peñaranda de Bracamonte (Salamanca).
La inversión prevista para las diez actuaciones, que asumirán al 100 por ciento el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM), superará los 8,5 millones de euros.
La mejora de la EDAR de Medina del Campo (Valladolid), incluida en el anexo I (actuaciones de interés general) del protocolo suscrito por el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) y por la Junta de Castilla y León para la ejecución del Plan Nacional de Calidad de las Aguas, contará con una inversión prevista de 500.000 euros.
La actuación más costosa será la de Barco de Ávila, con 3 millones de euros, seguida por la de Peñaranda de Bracamonte, con 1,3; y la de Toro (Zamora), con 800.000 euros. El resto oscila entre los 500.000 y los 600.000 euros.
En todos los casos las actuaciones a acometer serán muy similares e irán encaminadas a conseguir mejorar la calidad actual del vertido de las localidades para ajustarlo a la actual normativa que es más restrictiva al encontrarse en Zona Sensible.
Para conseguir este objetivo, se mejorarán las instalaciones actuales existentes y se introducirán las mejoras necesarias para que las diez depuradoras puedan incorporar tecnologías para el tratamiento de los nutrientes (principalmente nitrógeno y fósforo) y para disminuir los procesos de eutrofización que sufren las masas de agua continentales aguas abajo de los grandes vertidos.
Se realizarán varias modificaciones, adaptadas a las necesidades reales de cada planta, tanto en la línea de agua como en la línea de fangos. Se prevé actuar tanto en la decantación primaria, secundaria como en los reactores biológicos para conseguir la eliminación de nitrógeno. Por lo que respecta a la eliminación de fósforo, se dotará a la planta de un sistema de almacenamiento y dosificación de cloruro férrico.
En el caso particular de la EDAR del Barco de Ávila se realizará un estudio de la actual planta y su posibilidad de ampliación que, en caso de no ser posible, dará lugar a la construcción de una nueva EDAR.
El Plan Nacional de Calidad de las Aguas 2007-2015 contempla además de éstas, otra serie de actuaciones destinadas a cumplir con la normativa comunitaria de vertidos. En total, se prevén unas inversiones en Castilla y León de 1.050 millones de euros, un tercio de esta cantidad, 343 millones, financiado por el MARM y el resto por la Junta de Castilla y León.
Se trata de las estaciones depuradoras de Medina del Campo, Iscar, Tordesillas y Tudela de Duero (Valladolid), Cantalejo (Segovia), Benavente y Toro (Zamora), Arévalo y Barco de Ávila (Ávila) y Peñaranda de Bracamonte (Salamanca).
La inversión prevista para las diez actuaciones, que asumirán al 100 por ciento el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM), superará los 8,5 millones de euros.
La mejora de la EDAR de Medina del Campo (Valladolid), incluida en el anexo I (actuaciones de interés general) del protocolo suscrito por el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) y por la Junta de Castilla y León para la ejecución del Plan Nacional de Calidad de las Aguas, contará con una inversión prevista de 500.000 euros.
La actuación más costosa será la de Barco de Ávila, con 3 millones de euros, seguida por la de Peñaranda de Bracamonte, con 1,3; y la de Toro (Zamora), con 800.000 euros. El resto oscila entre los 500.000 y los 600.000 euros.
En todos los casos las actuaciones a acometer serán muy similares e irán encaminadas a conseguir mejorar la calidad actual del vertido de las localidades para ajustarlo a la actual normativa que es más restrictiva al encontrarse en Zona Sensible.
Para conseguir este objetivo, se mejorarán las instalaciones actuales existentes y se introducirán las mejoras necesarias para que las diez depuradoras puedan incorporar tecnologías para el tratamiento de los nutrientes (principalmente nitrógeno y fósforo) y para disminuir los procesos de eutrofización que sufren las masas de agua continentales aguas abajo de los grandes vertidos.
Se realizarán varias modificaciones, adaptadas a las necesidades reales de cada planta, tanto en la línea de agua como en la línea de fangos. Se prevé actuar tanto en la decantación primaria, secundaria como en los reactores biológicos para conseguir la eliminación de nitrógeno. Por lo que respecta a la eliminación de fósforo, se dotará a la planta de un sistema de almacenamiento y dosificación de cloruro férrico.
En el caso particular de la EDAR del Barco de Ávila se realizará un estudio de la actual planta y su posibilidad de ampliación que, en caso de no ser posible, dará lugar a la construcción de una nueva EDAR.
El Plan Nacional de Calidad de las Aguas 2007-2015 contempla además de éstas, otra serie de actuaciones destinadas a cumplir con la normativa comunitaria de vertidos. En total, se prevén unas inversiones en Castilla y León de 1.050 millones de euros, un tercio de esta cantidad, 343 millones, financiado por el MARM y el resto por la Junta de Castilla y León.