La Mancha Oriental cumple casi al cien por cien su Plan de Explotación
Lun, 10/01/2011
Nunca han tenido problemas en apretarse el cinturón en tiempos de sequía, asumiendo las preceptivas restricciones de riego. Pero también en épocas de bonanza hidrológica saben gestionar racionalmente, ajustándose estrictamente a sus dotaciones.
Su forma de gestión, de hecho, es un ejemplo a seguir. Comunidades de regantes de todo el mundo visitan periódicamente Albacete para conocer el modelo adoptado hace ya más de una década por la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO).
Un ejemplo de buena gestión y de responsabilidad colectiva pero también individual. Y es que aquel regante que incumple el Plan de Explotación que cada año aprueban los usuarios que conforman la JCRMO, paga restituyendo en la siguiente campaña el agua que ha utilizado de más.
De esta forma el que riega por encima de la concesión permitida, en la siguiente campaña resta de su dotación el agua que usó en exceso.
Aunque lo cierto es que el porcentaje de incumplidores del Plan de Explotación desde hace años, y especialmente en este último, se halla bajo mínimos. Desde 2007, cuando apenas eran ya un 3% los que regaban por encima de lo autorizado, este índice no ha hecho sino seguir bajando. En la última campaña abordada por el Jurado de Riegos, órgano de la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental que controla los incumplimientos y los sanciona, abrió 43 expedientes por excesos de riego de mil metros cúbicos o más. Una cifra notablemente inferior a la de otros ejercicios.
El volumen de agua consumida en exceso por los regantes en esa campaña ascendió a 1.52 hectómetros cúbicos, según los datos de la propia Junta Central de Regantes. Esta cifra apenas si supone un 0,5% del total de la concesión que tienen los usuarios de la Mancha Oriental.
La mayor parte de los que incumplen acatan la medida que en el año 2005 se autoimpusieron los propios regantes, es decir la devolución del agua usada de más. Sólo un pequeñísimo porcentaje de los casos acaban siendo trasladados a la Confederación Hidrográfica del Júcar que además puede imponer importantes sanciones económicas. El organismo de cuenca además aborda los casos de los incumplidores reincidentes.
Desde la campaña 2005 hasta la de 2009, ya que la de 2010 aún se encuentra pendiente, en la Mancha Oriental se han usado un total de 6,5 hectómetros cúbicos de agua más de lo que la cantidad asignada por la Confederación. De ese montante total, según señalaron desde la JCRMO, sólo quedan por restituir 0,28 hectómetros cúbicos.
Su forma de gestión, de hecho, es un ejemplo a seguir. Comunidades de regantes de todo el mundo visitan periódicamente Albacete para conocer el modelo adoptado hace ya más de una década por la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO).
Un ejemplo de buena gestión y de responsabilidad colectiva pero también individual. Y es que aquel regante que incumple el Plan de Explotación que cada año aprueban los usuarios que conforman la JCRMO, paga restituyendo en la siguiente campaña el agua que ha utilizado de más.
De esta forma el que riega por encima de la concesión permitida, en la siguiente campaña resta de su dotación el agua que usó en exceso.
Aunque lo cierto es que el porcentaje de incumplidores del Plan de Explotación desde hace años, y especialmente en este último, se halla bajo mínimos. Desde 2007, cuando apenas eran ya un 3% los que regaban por encima de lo autorizado, este índice no ha hecho sino seguir bajando. En la última campaña abordada por el Jurado de Riegos, órgano de la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental que controla los incumplimientos y los sanciona, abrió 43 expedientes por excesos de riego de mil metros cúbicos o más. Una cifra notablemente inferior a la de otros ejercicios.
El volumen de agua consumida en exceso por los regantes en esa campaña ascendió a 1.52 hectómetros cúbicos, según los datos de la propia Junta Central de Regantes. Esta cifra apenas si supone un 0,5% del total de la concesión que tienen los usuarios de la Mancha Oriental.
La mayor parte de los que incumplen acatan la medida que en el año 2005 se autoimpusieron los propios regantes, es decir la devolución del agua usada de más. Sólo un pequeñísimo porcentaje de los casos acaban siendo trasladados a la Confederación Hidrográfica del Júcar que además puede imponer importantes sanciones económicas. El organismo de cuenca además aborda los casos de los incumplidores reincidentes.
Desde la campaña 2005 hasta la de 2009, ya que la de 2010 aún se encuentra pendiente, en la Mancha Oriental se han usado un total de 6,5 hectómetros cúbicos de agua más de lo que la cantidad asignada por la Confederación. De ese montante total, según señalaron desde la JCRMO, sólo quedan por restituir 0,28 hectómetros cúbicos.