La comisión central de explotación del acueducto Tajo-Segura autorizó ayer un trasvase para riego de un máximo de 214 hectómetros cúbicos para Alicante y Murcia, de los que 71 hectómetros cúbicos serán transferidos a la provincia de Alicante. A este aporte, a recibir en el primer semestre de 2011, la provincia sumará otro máximo de 43,2 hectómetros cúbicos del Tajo-Segura, en este caso para consumo urbano, según la Generalitat Valenciana, que ayer precisó que las cantidades a trasvasar se concretarán mes a mes en función de las necesidades y hasta el máximo autorizado.

La noticia fue muy bien recibida ayer por parte de los agricultores de la provincia. «Es superpositivo, es lo que pedimos y es una demostración de que las cosas se están haciendo bastante bien», según declaró Ángel Urbina, portavoz de Riegos de Levante.

En su valoración, estas cantidades son una garantía para todas las hortalizas de invierno y para seguir avanzando en el riego localizado en el territorio alicantino.

«Esto demuestra que el sector agrario es, en estos momentos, de los pocos que puede ir dando alguna alegría, después de todas las noticias adversas que hay en el ámbito económico en toda España», apuntó Urbina.

El portavoz de Riegos de Levante, entidad que agrupa a 20.000 comuneros y 30.000 hectáreas desde Orihuela hasta Mutxamel, manifestó, además, que «un sector agroalimentario en la provincia de Alicante tan modernizado con respecto al agua, y teniendo ésta garantizada, podrá absorber todavía más mano de obra y podremos continuar nuestra creación de más infraestructuras para crear riqueza». Plantar más árboles En este sentido, Urbina conminó a no permitir que se arranque ningún árbol más y sí a proceder a la inversa, a incrementar la masa arbórea agrícola después de las persistentes sequías sufridas.

«Hay que insistir en la economía del sector agrario en nuestro municipio -por Elche- y en la provincia y darle su importancia. Los poderes públicos, desde el Ayuntamiento hasta la Generalitat Valenciana, pasando por el Estado, tienen que darse cuenta de que es hora de más pan y menos circo. Hay que dejarse de historias, porque hoy manda la economía y el bienestar de la gente», según el citado portavoz.

Desde Riegos de Levante se subrayó, además, que hay que seguir apoyando a los regantes «que estamos luchando en silencio, como se demuestra con este trasvase. Nos han concedido todo lo que hemos solicitado porque hemos demostrado que somos serios, pagamos nuestros préstamos de la modernización de los regadíos y no entramos en ciertas políticas barriobajeras en temas del agua que algunas comunidades en los últimos días han pretendido enturbiar».

La comisión central de explotación del acueducto Tajo-Segura, en su reunión ordinaria celebrada ayer, constató que se han obtenido unos consumos de agua inferiores a los previstos para el semestre que ahora acaba.

«Las circunstancias hidrológicas y la forma racional de autorización de los desembalses han permitido la optimización y ahorro en el uso del agua, preservando las necesidades de la cuenca cedente», según el citado organismo.

Durante el encuentro, se acordó aprobar una disponibilidad en cabecera de hasta un máximo correspondiente a las demandas solicitadas para los diferentes usos. «El volumen de agua disponible seguirá manteniéndose en la cabecera del Tajo y trasvasándose en función de la demanda real y adecuadamente justificada», según trascendió de la comisión central de explotación.

De este modo, las demandas continuarán programándose quincenalmente y se servirán en función de esas demandas reales, llevando a cabo un control a posteriori.

«En ese sentido, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino seguirá manteniendo un seguimiento técnico de control para atender las demandas de manera motivada y razonada, y seguirá avanzando en la mejora de la información justificativa», según las mismas fuentes. El director general de Agua, José María Benlliure, aseguró ayer -tal y como este diario avanzó en su edición de este miércoles- que los alicantinos pagarán 3,5 millones de euros «de más» durante el próximo semestre a causa del compromiso de la Mancomunidad de Canales del Taibilla con las empresas de desalación, «sobrecoste que los ciudadanos no se pueden permitir».

Según señaló Benlliure en un comunicado, «la cantidad necesaria para consumo humano en los municipios de la Mancomunidad es de 66,6 hectómetros cúbicos». En este sentido, criticó que «el empeño del Gobierno central en dar salida y actividad a las desalinizadoras ha llevado a la Mancomunidad, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, a solicitar al trasvase TajoSegura únicamente 43,2 hectómetros cúbicos, por lo que los restantes 23,4 que necesita la provincia de Alicante tendrá que cubrirse con agua desalada».

Según Benlliure, «el sobrecoste del agua desalada para Alicante y Murcia superará los diez millones de euros 3,5 en el caso sólo de Alicante-, teniendo en cuenta que el metro cúbico de agua desalada tiene un precio muy superior al agua del trasvase».

Para el director general del Agua, «tener que pagar este sobrecoste es una muestra más de la absoluta falta de rigor y de planificación en la gestión de los recursos hídricos por parte de este organismo del Gobierno del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, que obliga a consumir el recurso más caro».

«Además, esa opción es totalmente innecesaria, teniendo en cuenta que hay agua suficiente de calidad y en cantidad en los embalses de Entrepeñas y Buendía», ambos en Guadalajara, «gracias a las abundantes lluvias de este año, como para tener que recurrir al agua desalada», según Benlliure.