Los glaciares americanos se están derritiendo más rápido

Vie, 10/12/2010

Los glaciares de la Patagonia que cubren parte de Argentina y Chile, seguido de los de Alaska y sus cordilleras costeras han ido en general perdiendo masa más rápido y desde hace más tiempo que los glaciares en otras partes del mundo.

Estas son algunas de las conclusiones de un nuevo informe elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) en colaboración con científicos de todo el mundo.

Tras estas dos zonas se sitúan los glaciares en el noroeste de Estados Unidos y el suroeste de Canadá, seguido por los de las altas montañas de Asia -incluyendo la región del Hindu Kush del Himalaya-, el Ártico y los Andes. En Europa, en general los glaciares han estado aumentando su masa desde mediados de la década de 1970, pero esta tendencia cambió en torno al año 2000.

Si bien la tendencia general es a la baja, los niveles más altos de precipitaciones en algunos lugares han aumentado la masa y en algunos casos el tamaño de los glaciares en particular en el oeste de Noruega, al sur de Nueva Zelanda y algunas partes de Tierra de Fuego en Sudamérica.

EFECTOS CONTRAPUESTOS

A nivel local, algunas cadenas montañosas están experimentando también aparentemente efectos contradictorios. En áreas más pequeñas de la cadena del Karakorum, en Asia, por ejemplo, los glaciares han ido avanzando incluso hasta zonas que habían estado libres de hielo desde hacía unos 50 años. Mientras tanto, en zonas del norte del Karakorum y la mayoría de Tíbet, Tian Shan y el Himalaya, los glaciares están de hecho retrocediendo, algunos rápidamente, según el informe del Pnuma.

El derretimiento de los glaciares podría, en algunos lugares y tal vez en cuestión de unas pocas décadas, causar una reducción en la disponibilidad de agua en algunas zonas secas, como en Asia Central y partes de los Andes, dice el informe. Así, en las regiones secas de Asia Central, Chile, Argentina y Perú, donde hay pocas lluvias y precipitaciones, el retroceso de los glaciares tendrá un impacto mucho mayor en la disponibilidad estacional de agua que en Europa o en partes de Asia, donde las lluvias del monzón desempeñan un papel mucho más destacado en el ciclo del agua.

El informe advierte además que muchos glaciares pueden tardar siglos en desaparecer completamente, pero llama la atención sobre los que están a baja altura, glaciares más pequeños, que a menudo son fuente esencial de agua en las tierras secas, que se están derritiendo mucho más rápido.