La CH Miño-Sil invierte en la zona un millón de euros en 2010

Mar, 07/12/2010

El Progreso

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) y el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) han destinado en 2010 un total de 1.065.036,32 euros de presupuesto a la realización de diversas actuaciones en los cauces fluviales de la comarca chairega, Meira y Pol, en su mayoría incluídas en el programa de actuaciones de restauración, rehabilitación y uso público de márgenes de los ríos de la cuenca Miño-Sil en Galicia.

De las 18 intervenciones previstas a lo largo del presente ejercicio, una decena ya han finalizado, mientras que seis se encuentran en fase de ejecución y sólo quedan dos pendientes, ambas en el municipio de Guitiriz. La mayoría de estos proyectos contemplan la realización de limpiezas, podas y desbroces en los ríos, así como la retirada de residuos o, en algunos casos, de plantas invasoras. El objetivo de las actuaciones es recuperar la continuidad longitudinal del sistema fluvial y mejorar la composición y estructura de las riberas, además de mejorar los accesos a los propios cauces y a sus márgenes y facilitar la circulación del agua.

Con estas medidas no sólo se conservarán los cauces, se fomentará la recuperación de su flora y fauna o se mejorará el aspecto del río, sino que también se evitarán posibles inundaciones con las previsibles crecidas durante el invierno. En total, siete municipios de la zona y diez cauces fluviales a su paso por ellos se benefician de esta iniciativa, que afecta desde a zonas puntuales de los ríos hasta a tramos de varios kilómetros, según las características de cada intervención.

El mayor número de actuaciones se concentran en el municipio de Castro de Rei, concello al que la Confederación Hidrográfica Miño-Sil destina también su mayor inversión en este ejercicio, con un gasto de más de 450.000 euros en media docena de iniciativas de las que se benefician tres ríos: el Miño, el Azúmara y el Miño Pequeno.

La iniciativa que requiere de una mayor inversión, con casi 175.000 euros de presupuesto, contempla la retirada de residuos naturales y la realización de limpiezas, podas y desbroces en ambos márgenes del río Miño a su paso por las parroquias de Pacios y Bazar, una obra que tiene continuidad en el mismo cauce fluvial en la zona de Ponte Vilar, en Triabá, donde la confederación invierte otros 120.000 euros.

Estas dos actuaciones están en ejecución, al igual que la sustitución de una obra de paso en el río Azúmara, en el lugar de Couto de A, en la parroquia de Ramil, que requiere de un presupuesto de 58.000 euros.

El cauce del Azúmara se benefició también de un proyecto para estabilizar sus márgenes a su paso por Sandamil, costeado con cerca de 15.000 euros; y de medidas de conservación y la retirada de residuos en Coea, una actuación que costó casi 30.000 euros.

En cuanto al Río Miño Pequeno, se eliminaron de su cauce plantas invasoras y se llevaron a cabo tareas de limpieza y retirada de residuos a su paso por las parroquias de Pacios y Outeiro, con un presupuesto total de 58.000 euros.

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil también desarrolla cuatro proyectos en Guitiriz, con un presupuesto conjunto de 258.832,48 euros. Uno de ellos, consistente en la eliminación de plantas invasoras y la retirada de árboles caídos del cauce del río Parga y con un presupuesto de más de 123.000 euros, ya se ejecutó en San Alberte y Parga.

La limpieza del río Seco en el Portovello de la parroquia de Santa Mariña recibe más 26.000 euros, mientras que aún están pendientes otras dos obras por importe de 109.000 euros: la protección de un margen del río Veiga, donde hay un muro de hormigón muy deteriorado, y la limpieza del Escádebas, junto a la habilitación de una senda natural por una de sus riberas.

Vilalba, Xermade y Meira se benefician de dos actuaciones cada uno en sus cauces fluviales. Así, en la capital chairega se destinan 39.450 euros a la retirada de residuos antrópicos y naturales del Madalena y ya se acondicionó, con unos 104.000 euros, el cauce del río Trimaz a su paso por las parroquias de Codesdio, Tardad, Distriz, Gondaisque y Mourence.

En Xermade las actuaciones realizadas también afectan al río Trimaz y dan continuidad a las realizadas en Vilalba en este mismo cauce fluvial, en el que se realizaron podas, limpiezas y retiradas de residuos o plantas invasoras, a su paso por Candamil y A Torre, en los conocidos como Pasos da Pontenova. En total, estas dos actuaciones superaron los 60.000 euros de inversión.

En el municipio de A Pastoriza, la Confederación Hidrográfica Miño-Sil invirtió este año 73.148 euros en acondicionar un tramo del río Miñotelo, a su paso por la parroquia de Bretoña, y otro del río Miño Pequeno, en los lugares de Loboso y Regueira. El río Miño es también el protagonista de la actuación prevista por la confederación en el municipio de Meira, donde acondicionará el tramo comprendido entre O Pedregal, As Corbaceiras y Meira, en el que se invierten más de 35.000 euros.

Por último, el municipio de Pol se benefició en este año de una actuación en el Rego da Senra, donde se sustituyó una pequeña obra de paso por no disponer de la capacidad suficiente para desaguar. Se realizaron, además, las operaciones habituales de podas, desbroces y retirada de árboles muertos, así como la estabilización de los márgenes en las zonas de Pacios y Cubeiro. A esta actuación, la confederación destinó más de 36.000 euros. La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, que preside Francisco Fernández Liñares, se constituyó en 2008, tras la división de la CH del Norte (creada en 1961) en dos: la Miño-Sil y la del Cantábrico. Las confederaciones están concebidas por la Ley de Aguas como los organismos responsables de gestionar las cuencas hidráulicas, para lo que la CHMS está elaborando el llamado Plan Hidrológico de Cuenca, un instrumento que permitirá ordenar los usos del auga, fijar líneas de actuación o definir las políticas de protección de los ríos.