El Principado ha concluido la tramitación ambiental del proyecto de saneamiento y depuración de la ría del Eo, cuya ejecución pondrá fin a los vertidos de aguas residuales que generan los núcleos ribereños de Castropol y Vegadeo. La finalización de este proceso -obligatorio, al afectar a la Reserva de la Biosfera Oscos-Eo y Terras de Burón-, acerca el inicio de unos trabajos presupuestados en más de 11 millones de euros cuya contratación está prevista para este año.

La Declaración de Impacto Ambiental publicado ayer en el Boletín Oficial de la región establece que la estación depuradora irá ubicada en la inmediaciones del estuario, con las oportunas medidas para reducir el impacto visual de la estructura, y que verterá de forma directa las aguas tratadas a la ría. Se elimina así la posibilidad de construir un emisario submarino desde Castropol hasta la desembocadura del cauce.

La alternativa elegida, además, prevé la existencia de una red de colectores que transportarán las aguas residuales hasta la depuradora. Esa instalación incluirá la conexión submarina existente entre Figueras y Castropol, lo que reduce de forma notable el impacto que generaría la construcción de nuevas conducciones.

En su última visita a la zona, la viceconsejera de Medio Ambiente, Belén Fernández, destacó que la depuradora de la ría del Eo incorporará un sistema innovador de tratamiento mediante rayos ultravioletas de las aguas residuales, lo que garantizará la compatibilidad del caudal que se verterá al estuario con las actividades de marisqueo y ocio que se desarrollan en la zona.

Por eso, la ejecución de esta obra es muy esperada por vecinos y visitantes, ya que la puesta en marcha del sistema de tratamiento de las aguas residuales permitirá preservar el entorno ambiental de la ría del Eo.