El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, y el presidente de la Comunidad de Regantes «Arco Sur Mar Menor» Eloy Celdrán, visitaron ayer el conjunto de proyectos de mejora de regadíos que se encuentran ya realizados o en fase de ejecución en esta zona regable, que comprende 1.500 hectáreas de terreno cultivable en los términos municipales de Cartagena y La Unión.

La Comunidad de Regantes «Arco Sur Mar Menor» constituida hace una década y compuesta por 150 comuneros, es según Cerdá, «un ejemplo de eficacia en la gestión del agua». El titular de Agricultura y Agua subrayó que los agricultores «están realizando un importante esfuerzo económico para disponer de agua, mejorar su calidad y aplicarla a sus cultivos», fundamentalmente hortícolas y cítricos. El consejero destacó en su visita el conjunto de alternativas para conseguir agua que pone en marcha una comunidad de regantes «muy avanzada, a la que no llega ni una sola gota del trasvase Tajo-Segura».

Para aumentar la disposición de recursos, los regantes han instalado una red de canalizaciones que permite reutilizar el agua del drenaje de riego de las parcelas y la distribuye entre los regantes para abastecer sus cultivos. También han incorporado una red paralela que recoge el agua procedente de los pozos de los comuneros y la transporta a la desalobradora para su tratamiento y posterior reutilización.

Los comuneros disponen además de una concesión de 4,8 hectómetros cúbicos de agua procedentes de la depuradora Mar Menor. Estos caudales tienen que pasar por un proceso de eliminación de sales mediante una desalobradora para que puedan ser reutilizados en el regadío local, según establece la Confederación Hidrográfica del Segura.

El consejero subrayó que todas estas obras suponen un «ejemplo de coordinación» entre las administraciones central y autonómica para efectuar las inversiones necesarias que favorezcan los objetivos de mejora de regadíos y aprovechamiento de los recursos hídricos. Destacó además la «constante iniciativa» de los regantes en ejecutar las infraestructuras necesarias «y todo aquello que sea técnicamente viable» para disponer de agua, apoyándose en la financiación que le concede el Gobierno regional.

La inversión de estas obras alcanza los 28 millones de euros, de los que cerca de 20 millones han sido financiados por la Consejería de Agricultura y Agua, con 11 millones, y la sociedad estatal SEIASA, que ha aportado nueve millones, aunque esta cantidad deberá ser retornada a los Presupuestos del Estado a partir del año 25 de haber concluido las obras.

La Consejería está ejecutando actualmente una inversión de dos millones de euros para la ampliación de ocho módulos de ósmosis inversa que permita a los regantes obtener una producción de agua de 28.000 metros cúbicos al día, y "salvar la estacionalidad que supone la producción de aguas residuales en los meses estivales", afirmó el consejero.

Los regantes tienen en proyecto asimismo realizar varios embalses para acumular toda el agua reutilizada posible, ya que es necesaria en los meses en los que la producción de la depuradora disminuye.