El mal olor y sabor del agua dispara la venta de botellas en Salamanca

Mié, 11/08/2010

El Norte de Castilla

El problema de olor y sabor extraños presentado por el agua corriente de Salamanca desde finales de la pasada semana comenzó ayer a remitir parcialmente en las principales zonas de la ciudad, con excepción de los abastecidos desde el depósito de La Pinilla. A pesar de todo, se han disparado las ventas de agua embotellada, mientras el problema ha dado paso a un conflicto entre el Ayuntamiento de Salamanca y la Confederación Hidrográfica del Duero.

El consistorio, que desde el comienzo de la crisis defendió la salubridad y potabilidad del agua suministrada a los vecinos a pesar del cambio de sabor, ha considerado como principal salida y mejor camino para evitar problemas similares en el futuro retomar la captación desde el azud de Villagonzalo.

El Ayuntamiento recordó que con motivo de las obras de la A-50 la entidad Aguas del Duero suspendió esta captación en abril del 2009 y acusó al organismo de cuenca de falta de «voluntad política» para solucionar el conflicto.

Sin embargo, la CHD se mostró ayer su «sorpresa» por la actitud del Ayuntamiento, al que acusó de «desviar la atención en lugar de ejercer sus competencias sobre un problema de potabilización del agua, de su exclusiva responsabilidad».

El comisario de Aguas, Ignacio Rodríguez, consideró además que el problema con el azud de Villagonzalo deviene de la «dejadez» del Ayuntamiento, al que la Confederación requirió desde el año 2002 hasta el momento del corte, en el 2009, la «regularización» de la captación desde el azud. Rodríguez explicó que «el Ayuntamiento conoce» que para obtener la concesión administrativa para esa conexión entre Villagonzalo y su estación central «tiene que constituir una comunidad de usuarios en la que estén representadas las localidades del alfoz a las que abastece el Ayuntamiento de Salamanca».

Por eso, según la CHD, el consistorio prefirió tras abril de 2009 recurrir a su antigua toma, situada a la altura de La Aldehuela, para la que sí cuenta con licencia y en la que ahora se han presentado los problemas motivados por el descenso del cauce del Tormes y la proliferación de microorganismos .

En cualquier caso, la Confederación insistió ayer a través de un comunicado que «los parámetros de prepotabilidad, son normales para esta época del año», según los resultados de los análisis realizados en la estación medidora situada en el Tormes, muy cerca de la toma de agua de la capital.

Mientras, el PSOE de Salamanca criticó igualmente el «intento del Ayuntamiento de desviar la atención», ocultado que el problema con la captación de Villagonzalo surgió «al negarse el PP del Ayuntamiento de Salamanca a que el municipio de Cabrerizos pudiese utilizar la misma captación», ya que según los socialistas «el PP pretendía vender agua potabilizada a este municipio, para que ganase más dinero la empresa concesionaria del servicio». Potabilizadora de La Aldehuela.