Investigadores aragoneses realizan el primer estudio hidrogeológico de las Lagunas de Estaña, en Estopiñán (Huesca)
Sáb, 03/07/2010
Investigadores aragoneses del Instituto Geológico y Minero de España están realizado el primer estudio hidrogeológico sobre las Lagunas de Estaña y su posible relación con el acuífero de Estopiñán, ubicadas en el término municipal de Estopiñán (Huesca), en las Sierras Marginales Pirenaicas.
El investigador titular del Instituto Geológico y Minero de España y actual vicepresidente del Grupo Español de la Asociación Internacional de Hidrogeólogos (AIH-GE), Luis Javier Lambán Jiménez, ha explicado en declaraciones a Europa Press que en estas lagunas se habían realizado estudios sedimentológicos y de reconstrucciones paleoclimáticas, principalmente por parte del Instituto Pirenaico de Ecología, pero ninguno sobre el papel que juegan las aguas subterráneas en el funcionamiento de las lagunas.
Las lagunas de Estaña, declaradas como Lugar de Interés Comunitario (LIC), son dolinas generadas por la disolución y posterior colapso de materiales existentes en esta zona, que, una vez formadas, se llenaron de agua.
La denominada Laguna Grande o Estanque Grande de Estaña consta, a su vez, de dos cubetas claramente diferenciadas y correspondientes a dos de estas dolinas, con profundidades de unos diez y 17 metros, respectivamente, existiendo entre ambas una barrera natural de separación.
Los estudios realizados en este proyecto "parecen poner de manifiesto la no existencia de conexión hidráulica entre el acuífero de Estopiñán y las lagunas de Estaña". El origen de las lagunas "estaría en los acuíferos existentes en las inmediaciones de las lagunas", ha precisado Lambán.
Esos acuíferos se encuentran en materiales del triásico --uno de los tres períodos geológicos de la Era Mesozoica, que comenzó hace 251 millones de años--. El estudio parece revelar que hay un único acuífero en contacto directo con las lagunas, ha agregado Lambán.
En un principio, ha indicado el investigador, no se descartaba que hubiera conexión hidráulica entre el acuífero de Estopiñán y las lagunas de Estaña, entre los que hay una distancia de unos mil metros. Precisamente, comprobar esa posible conexión era uno de los objetivos del proyecto.
El investigador ha apuntado que el acuífero de Estopiñán es el más importante a nivel regional por la cantidad y calidad de los recursos hídricos disponibles, siendo la principal fuente de abastecimiento a la mayor parte de los pueblos de la zona.
Está constituido por materiales más recientes que los que alimentan a las lagunas de Estaña, del Cretácico y Eoceno --es decir, materiales que se depositaron hace aproximadamente entre unos 145 y 56 millones de años--, correspondientes al tercer y último período de la era Mesozoica y a la segunda época del período Paleógeno en la Era Cenozoica.
MATERIALES MUY DEFORMADOS
Luis Javier Lambán ha señalado que el estudio que están realizando permite profundizar en el conocimiento geológico e hidrogeológico de unas lagunas que se encuentran asociadas a unos materiales "muy deformados y fracturados", con una distribución superficial y subsuperficial "muy heterogénea y compleja", dado el contexto geológico en el que se encuentran.
Una aportación "muy importante" del proyecto, ha subrayado, ha sido la monitorización y control de estas lagunas desde un punto de vista hidrogeológico, así como el conocimiento de la geología de detalle --a escala 1:5.000-- tanto de la superficie como del subsuelo, "mediante la aplicación de diversas técnicas geofísicas en los alrededores de estas lagunas".
Lambán ha comentado que el estudio también refleja una constante renovación del agua en estas lagunas "estrechamente relacionadas" con los acuíferos locales ya mencionados, acuíferos cuya geometría y características --extensión, profundidad, litología y sentido de flujo-- "se están empezando a conocer con mucho detalle".
El investigador titular del Instituto Geológico y Minero de España ha indicado que en este trabajo se han utilizado y aplicado conjuntamente diversos tipos de técnicas, geofísicas, hidrogeológicas, hidrogeoquímicas e isotópicas, algunas de ellas novedosas en cuanto a su aplicación en este tipo de estudios y medios, como la realización de Sondeos de Resonancia Magnética.
Los estudios comenzaron en 2007 y actualmente se encuentra en fase de finalización una tesis doctoral realizada por Cristina Pérez Bielsa en el Instituto Geológico y Minero de España en la que se expondrán y presentarán los principales resultados obtenidos hasta el momento.
El investigador titular del Instituto Geológico y Minero de España y actual vicepresidente del Grupo Español de la Asociación Internacional de Hidrogeólogos (AIH-GE), Luis Javier Lambán Jiménez, ha explicado en declaraciones a Europa Press que en estas lagunas se habían realizado estudios sedimentológicos y de reconstrucciones paleoclimáticas, principalmente por parte del Instituto Pirenaico de Ecología, pero ninguno sobre el papel que juegan las aguas subterráneas en el funcionamiento de las lagunas.
Las lagunas de Estaña, declaradas como Lugar de Interés Comunitario (LIC), son dolinas generadas por la disolución y posterior colapso de materiales existentes en esta zona, que, una vez formadas, se llenaron de agua.
La denominada Laguna Grande o Estanque Grande de Estaña consta, a su vez, de dos cubetas claramente diferenciadas y correspondientes a dos de estas dolinas, con profundidades de unos diez y 17 metros, respectivamente, existiendo entre ambas una barrera natural de separación.
Los estudios realizados en este proyecto "parecen poner de manifiesto la no existencia de conexión hidráulica entre el acuífero de Estopiñán y las lagunas de Estaña". El origen de las lagunas "estaría en los acuíferos existentes en las inmediaciones de las lagunas", ha precisado Lambán.
Esos acuíferos se encuentran en materiales del triásico --uno de los tres períodos geológicos de la Era Mesozoica, que comenzó hace 251 millones de años--. El estudio parece revelar que hay un único acuífero en contacto directo con las lagunas, ha agregado Lambán.
En un principio, ha indicado el investigador, no se descartaba que hubiera conexión hidráulica entre el acuífero de Estopiñán y las lagunas de Estaña, entre los que hay una distancia de unos mil metros. Precisamente, comprobar esa posible conexión era uno de los objetivos del proyecto.
El investigador ha apuntado que el acuífero de Estopiñán es el más importante a nivel regional por la cantidad y calidad de los recursos hídricos disponibles, siendo la principal fuente de abastecimiento a la mayor parte de los pueblos de la zona.
Está constituido por materiales más recientes que los que alimentan a las lagunas de Estaña, del Cretácico y Eoceno --es decir, materiales que se depositaron hace aproximadamente entre unos 145 y 56 millones de años--, correspondientes al tercer y último período de la era Mesozoica y a la segunda época del período Paleógeno en la Era Cenozoica.
MATERIALES MUY DEFORMADOS
Luis Javier Lambán ha señalado que el estudio que están realizando permite profundizar en el conocimiento geológico e hidrogeológico de unas lagunas que se encuentran asociadas a unos materiales "muy deformados y fracturados", con una distribución superficial y subsuperficial "muy heterogénea y compleja", dado el contexto geológico en el que se encuentran.
Una aportación "muy importante" del proyecto, ha subrayado, ha sido la monitorización y control de estas lagunas desde un punto de vista hidrogeológico, así como el conocimiento de la geología de detalle --a escala 1:5.000-- tanto de la superficie como del subsuelo, "mediante la aplicación de diversas técnicas geofísicas en los alrededores de estas lagunas".
Lambán ha comentado que el estudio también refleja una constante renovación del agua en estas lagunas "estrechamente relacionadas" con los acuíferos locales ya mencionados, acuíferos cuya geometría y características --extensión, profundidad, litología y sentido de flujo-- "se están empezando a conocer con mucho detalle".
El investigador titular del Instituto Geológico y Minero de España ha indicado que en este trabajo se han utilizado y aplicado conjuntamente diversos tipos de técnicas, geofísicas, hidrogeológicas, hidrogeoquímicas e isotópicas, algunas de ellas novedosas en cuanto a su aplicación en este tipo de estudios y medios, como la realización de Sondeos de Resonancia Magnética.
Los estudios comenzaron en 2007 y actualmente se encuentra en fase de finalización una tesis doctoral realizada por Cristina Pérez Bielsa en el Instituto Geológico y Minero de España en la que se expondrán y presentarán los principales resultados obtenidos hasta el momento.