La Ría de Vigo,que la Comisión Europea tiene desde hace años en su punto de mira por la contaminación a la cría de moluscos, recibe un nuevo suspenso por el estado de sus aguas,y la deficiente depuración vuelve a ser la causa de la mala nota. La organización Ecologistas en Acción la ha situado entre las 40 zonas más degradadas de toda la costa española y la considera acreedora de una "bandera negra", distintivo que propone en contraposición a las azules con las que la Unión Europea premia las mejores playas y puertos deportivos. Junto al litoral vigués figuran en el informe que acaba de hacer pública la entidad -que sanciona tanto las actuaciones que dañan la franja terrestre como el medio marino- áreas como Marina D'or o la costa marbellí.

"Las depuradoras de la Ría, más que mejorar, degradan la calidad de las aguas con niveles muy superiores a los permitidos por ley",señala el estudio"Banderas negras 2010: Caos en la costa", que califica de "desastroso" el estado de la red de saneamiento en los municipios del entorno.La instalación que más contamina, como ya constataron todos los estudios realizados por la Xunta, es la planta del Lagares, que arroja al mar, según los datos de Ecologistas en Acción, 2.000 millones de litros sin procesar cada mes.La organización sostiene que la macrogares "intensificará los problemas y destruirá un humedal con 5 hábitats de interés comunitario".

También es deficiente, según el informe, la depuradora de Teis, "que hace vertidos por sus aliviaderos"; y la de Redondela, donde se vuelca el agua"en una zona de red natura sobre bancos de almeja, berberecho y navaja, muy cerca de la playa de Cesantes". Otras instalaciones que contribuyen a la contaminación marina, según el examen,son las de Nigrán,Gondomar,Baiona y Cangas.

Pero no sólo el saneamiento motivaría la degradación.El informe apunta también a las obras de la Autoridad Portuaria, y señala las afecciones de los rellenos construidos, además de los 270.000 m de ampliaciones proyectadas entre Bouzas y Rande.

El informe dedica,por otra parte, un capítulo entero al Plan de Ordenación del Litoral que promueve la Xunta,que,a juicio de la organización,"desprotegerá" la costa de la comunidad. La macrodepuradora diseñada paraVigo se colocará entre las de mayores dimensiones,capacidad de tratamiento de agua e inversión de Europa.Y las que están por delante, según una comparativa que han elaborado los técnicos de la Xunta, dan servicio a tres de las grandes ciudades del continente: Barcelona (junto a ocho poblaciones del bajo Llobregat): París y Bruselas.Estas dos últimas utilizan además la misma tecnología que la que se aplicará en la instalación del Lagares, mediante biofiltración para eliminar la materia orgánica.

La planta viguesa tiene un presupuesto de 230 millones de euros y está diseñada para tratar el agua residual que generen 850.000 habitantes, casi el triple de la población de la ciudad.

La del Baix Llobregat,construida para sanear el delta del río catalán y el litoral de Barcelona, puede atender a dos millones,da también cobertura a las localidades de su entorno,e incluye instalaciones de desalinización.Costó 260 millones y está gestionada por la Entidad Metropolitana de Barcelona de Servicios Hidráulicos, pero su construcción se promovió a través de una fórmula similar a la que se plantea en Vigo, a través de la creación de una sociedad pública, denominada Depurbaix. El Ministerio de Medio Ambiente poseía el 85% de participación, y la Generalitat, a través de la Agencia Catalana del Agua, el 15% restante. La entidad fue absorbida por Acuanorte, dependiente del Estado.En la urbe olívica la sociedad constituida sería municipal,ya que la planta pertenecerá al Concello.

La depuradora de Colombe (París) es la más cara en proporción a la población.Costó 450 millones y presta servicio a un millón de habitantes.En la construcción de la planta de Bruselas-Norte se invirtieron 290 millones para tratar el agua de 1.100.000. La estación de saneamiento de Vigo se colocará además por delante de la de otra capital europea, Ginebra: 140 millones de presupuesto para 600.000 ciudadanos.

El PP acusó ayer al alcalde, Abel Caballero, de "paralizar por cabezonería durante un año" el proyecto de la depuradora, desbloqueado el miércoles tras 14 meses de conflictos. "Su incompetencia le lleva a buscar la confrontación continua con la Xunta.No es de fiar, y engaña permanentemente", criticó el portavoz popular,José Manuel Figueroa, quien afirmó que Caballero de "ha hecho el ridículo más espantoso". Para argumentarlo empleó varias grabaciones de declaraciones públicas del alcalde con su postura sobre la acometida eléctrica, el IVA y la expropiación de terrenos,conflictos que impedían el acuerdo."Sólo puso obstáculos a una obra que supondrá la mayor inversión de la Xunta en una obra en Vigo en toda la historia, con 127 millones de euros". Figueroa elogió la actuación del conselleiro Agustín Hernández.