Una visita a los embalses o humedales de la provincia se convierte en estos días en una experiencia histórica, no solo por la riqueza de fauna y flora que se puede descubrir, sino porque nunca en el inicio del verano se habían encontrado los pantanos o las lagunas a unos niveles como los actuales. Las abundantes lluvias que cayeron en la provincia durante el invierno llevaron los embalses de una situación de alerta en noviembre a que rápidamente se recuperaran y que, en poco más de una semana, pasaran al estado de normalidad que se ha mantenido hasta ahora. El verano se ha iniciado con los pantanos cordobeses al 84,6% de su capacidad, casi el doble de la media histórica del 30 de junio, que se sitúa en el 45%, y superando el nivel que hasta ahora era el máximo en este mes y que se registró en 1997 con el 83%.

Pero no solo en porcentaje, sino también en valores absolutos el volumen de agua almacenado es el más alto de la historia. La entrada en explotación de La Breña II y el Arenoso han incrementado los recursos, aunque a esta circunstancia hay que unir también la regulación efectuada del agua acumulada y que ha permitido que una gran parte de las presas esté por encima del 90% de su capacidad. Salvo Guadalmellato, que se encuentra al 62% al desembalsar por las obras que se están realizando, San Rafael de Navallana (86%), Sierra Boyera (85,1%) y La Breña II (58%), el resto supera el comentado 90%.

La abundancia de las precipitaciones de este año agrícola ha provocado que el embalse con mayor capacidad de Andalucía, Iznájar, se encuentre a estas alturas en el máximo desde que entró en funcionamiento, pues está al 99,1%, un nivel que solo se repitió en 1978.

Con estos datos, tanto la Empresa Municipal de Aguas de Córdoba (Emacsa) como la Empresa Provincial de Aguas de Córdoba (Emproacsa) precisan que el suministro para consumo humano está garantizado para los próximos tres años. Además, al haberse producido un gran desembalse durante las semanas de más lluvias, consideran que el agua que llegará a las plantas de tratamiento será de más calidad este verano.

En lo que va de año agrícola (se inició el 1 de septiembre) han caído en la ciudad de Córdoba 1.047 litros por metro cuadrado, lo que supone un 100% más de lo que es habitual en este periodo. De los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) destacan los 1.269 litros de Santa María de Trassierra o los 1.252 del pantano de Bembézar. Por encima de los mil litros están también Montilla (1.140), Montoro (1.081), Cabra (1.062) y Villanueva de Córdoba (1.056). De las estaciones facilitadas por Aemet, solo Hinojosa del Duque registró menos de mil (630).