La contaminación y la pesca ponen en riesgo la supervivencia de la anguila
Jue, 17/06/2010
La pesca excesiva y la contaminación ambiental, además de la construcción de presas en los ríos, han llevado a la anguila plateada al borde de la extinción en Europa, que sólo se podrá evitar con una moratoria en la captura y la mejora de las comunicaciones fluviales y las condiciones ambientales.
En Andalucía, un grupo de investigadores de la Universidad de Córdoba (UCO) es el encargados de elaborar el plan de recuperación de esta especie, que se desarrolla en la cuenca del Guadalquivir, a donde llegan tras un viaje de más de 6.000 kilómetros, que comienza en el mar de los Sargazos, en el océano Atlántico.
A pesar de su origen remoto, esta especie tradicionalmente ha llegado de forma abundante a las costas europeas, donde unas 25.000 personas vivían de manera directa o indirecta de su pesca y posterior venta, según los datos aportados a Efe por el director del plan de recuperación elaborado por la UCO, Carlos Fernández.
Sin embargo, desde la década de los 80, la población de anguilas se ha reducido de manera constante y, en concreto, mientras que en la temporada 1982-83 se capturaron 40 toneladas de esta especie en Andalucía, la cifra se redujo hasta los 300 kilos en 2007-08.
Este descenso ha provocado que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza incluya a la anguila como una especie en peligro crítico y, además, también ha pasado a formar parte del convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre, y que prácticamente imposibilita su venta en mercados internacionales.
Entre los principales riesgos que acechan a la anguila y ponen en riesgo su supervivencia, Fernández ha subrayado la "enorme presión de pesca" a la que se ha sometido en los últimos años a esta especie, una práctica "insostenible" que se ha desarrollado "rompiendo con la legalidad de principio a fin".
Tampoco la construcción de presas en los ríos, que impide las migraciones de esta especie, la contaminación de las aguas y la alteración de la corriente del Golfo por el cambio climático han
favorecido su conservación.
Con la intención de neutralizar esta tendencia negativa y favorecer el crecimiento de la anguila en las aguas andaluzas, a petición de la Junta de Andalucía, la UCO ha elaborado un plan de
recuperación.
Una de las medidas más reivindicadas por Fernández ha sido la aprobación de una moratoria por diez años en la pesca de esta especie, destinada a recuperar el volumen de población en Andalucía, una iniciativa que ha asegurado que no prosperará debido a las presiones ejercidas por los pescadores.
Fuentes de la Junta de Andalucía han asegurado que la administración regional trabaja en la redacción de un decreto que regule esta actividad y que estará "en consonancia" con las
exigencias de la UE, que en 2007 aprobó un reglamento para la recuperación de la población de anguila europea.
En Andalucía, un grupo de investigadores de la Universidad de Córdoba (UCO) es el encargados de elaborar el plan de recuperación de esta especie, que se desarrolla en la cuenca del Guadalquivir, a donde llegan tras un viaje de más de 6.000 kilómetros, que comienza en el mar de los Sargazos, en el océano Atlántico.
A pesar de su origen remoto, esta especie tradicionalmente ha llegado de forma abundante a las costas europeas, donde unas 25.000 personas vivían de manera directa o indirecta de su pesca y posterior venta, según los datos aportados a Efe por el director del plan de recuperación elaborado por la UCO, Carlos Fernández.
Sin embargo, desde la década de los 80, la población de anguilas se ha reducido de manera constante y, en concreto, mientras que en la temporada 1982-83 se capturaron 40 toneladas de esta especie en Andalucía, la cifra se redujo hasta los 300 kilos en 2007-08.
Este descenso ha provocado que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza incluya a la anguila como una especie en peligro crítico y, además, también ha pasado a formar parte del convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre, y que prácticamente imposibilita su venta en mercados internacionales.
Entre los principales riesgos que acechan a la anguila y ponen en riesgo su supervivencia, Fernández ha subrayado la "enorme presión de pesca" a la que se ha sometido en los últimos años a esta especie, una práctica "insostenible" que se ha desarrollado "rompiendo con la legalidad de principio a fin".
Tampoco la construcción de presas en los ríos, que impide las migraciones de esta especie, la contaminación de las aguas y la alteración de la corriente del Golfo por el cambio climático han
favorecido su conservación.
Con la intención de neutralizar esta tendencia negativa y favorecer el crecimiento de la anguila en las aguas andaluzas, a petición de la Junta de Andalucía, la UCO ha elaborado un plan de
recuperación.
Una de las medidas más reivindicadas por Fernández ha sido la aprobación de una moratoria por diez años en la pesca de esta especie, destinada a recuperar el volumen de población en Andalucía, una iniciativa que ha asegurado que no prosperará debido a las presiones ejercidas por los pescadores.
Fuentes de la Junta de Andalucía han asegurado que la administración regional trabaja en la redacción de un decreto que regule esta actividad y que estará "en consonancia" con las
exigencias de la UE, que en 2007 aprobó un reglamento para la recuperación de la población de anguila europea.