Iberdrola no retrasará el vaciado del Sil pese a las protestas de los pescadores
Mar, 13/04/2010
La eléctrica Iberdrola mantiene la fecha de vaciado del embalse de Santo Estevo para el día 19 de abril, a pesar de las reiteradas protestas del colectivo de pescadores, que temen que el desprendimiento de sedimentos afecte negativamente a la fauna piscícola.
La diputada del BNG, Olaia Fernández Davila, fue la encargada de trasladar estas reivindicaciones al ejecutivo central mediante la presentación de una iniciativa en el Congreso de los Diputados. En ella, demanda al Gobierno que retrase la fecha autorizada para el vaciado del embalse de Santo Estevo hasta después del 30 de mayo,"para que no coincida con la temporada de pesca".
Conscientes de los daños que podrán provocar las toneladas de sedimentos que arrastrará el río tras el vaciado del embalse para realizar obras de ampliación en la central hidroeléctrica que tiene en esta presa, la empresa Iberdrola ha colocado diez estaciones de vigilancia para controlar los movimientos de la fauna piscícola.
En la iniciativa del Congreso, Davila argumenta que el vaciado "supondrá la liberación de una gran cantidad de agua y de lodo que afectará negativamente a la fauna piscícola del río Miño y al colectivo de pescadores".
En este sentido, la diputada nacionalista defendió que "sería necesario tener en cuenta la temporada de pesca profesional en el río", por lo que cree que el vaciado se podría acometer en fechas posteriores "con el fin de no afectar tan negativamente a un sector que, en la zona del Miño, es una importante fuente económica, sobre todo en tiempos de crisis como el actual".
La afectación ambiental que soportarán los ríos Sil y Miño debido a este nuevo vaciado del embalse de Santo Estevo, se debe a la gran cantidad de embalses existentes en la Ribeira Sacra, que "periódicamente abren sus puertas elevando el cauce del agua y provocando la muerte de miles de alevines, como consecuencia de los bruscos cambios del nivel del agua", relata Davila.
Ante esta situación, la diputada del BNG instó al Gobierno a que valore los intereses generales del río, tanto desde el punto de vista medioambiental como de la pesca. Asimismo, instó al ejecutivo central a que considere la necesidad de establecer una regulación que permita reducir la afectación medioambiental en los ríos.
Las obras que ejecuta Iberdrola consisten en construir un túnel en la ladera de la zona de Nogueira de Ramuín con la finalidad de hacer un nuevo paso para el agua y colocar una turbina que posibilite generar 176 megavatios más, que se sumarán a los 265 de la central.
La diputada del BNG, Olaia Fernández Davila, fue la encargada de trasladar estas reivindicaciones al ejecutivo central mediante la presentación de una iniciativa en el Congreso de los Diputados. En ella, demanda al Gobierno que retrase la fecha autorizada para el vaciado del embalse de Santo Estevo hasta después del 30 de mayo,"para que no coincida con la temporada de pesca".
Conscientes de los daños que podrán provocar las toneladas de sedimentos que arrastrará el río tras el vaciado del embalse para realizar obras de ampliación en la central hidroeléctrica que tiene en esta presa, la empresa Iberdrola ha colocado diez estaciones de vigilancia para controlar los movimientos de la fauna piscícola.
En la iniciativa del Congreso, Davila argumenta que el vaciado "supondrá la liberación de una gran cantidad de agua y de lodo que afectará negativamente a la fauna piscícola del río Miño y al colectivo de pescadores".
En este sentido, la diputada nacionalista defendió que "sería necesario tener en cuenta la temporada de pesca profesional en el río", por lo que cree que el vaciado se podría acometer en fechas posteriores "con el fin de no afectar tan negativamente a un sector que, en la zona del Miño, es una importante fuente económica, sobre todo en tiempos de crisis como el actual".
La afectación ambiental que soportarán los ríos Sil y Miño debido a este nuevo vaciado del embalse de Santo Estevo, se debe a la gran cantidad de embalses existentes en la Ribeira Sacra, que "periódicamente abren sus puertas elevando el cauce del agua y provocando la muerte de miles de alevines, como consecuencia de los bruscos cambios del nivel del agua", relata Davila.
Ante esta situación, la diputada del BNG instó al Gobierno a que valore los intereses generales del río, tanto desde el punto de vista medioambiental como de la pesca. Asimismo, instó al ejecutivo central a que considere la necesidad de establecer una regulación que permita reducir la afectación medioambiental en los ríos.
Las obras que ejecuta Iberdrola consisten en construir un túnel en la ladera de la zona de Nogueira de Ramuín con la finalidad de hacer un nuevo paso para el agua y colocar una turbina que posibilite generar 176 megavatios más, que se sumarán a los 265 de la central.