Denuncian en la UE el deterioro del sistema fluvial del río Avia

Mar, 23/02/2010

El Correo Gallego

La Asociación Ecoloxista Coto do Frade, del municipio ourensano de Ribadavia, ha presentado una denuncia ante la Comisión de Peticiones de la Unión Europea (UE) para que tome las medidas que correspondan por infracción reiterada al medio ambiente en el ecosistema fluvial del río Avia.

Vicente Fernández, portavoz de la agrupación, señaló en un comunicado que la denuncia de los verdes se fundamenta en la ausencia de caudales entre los meses de mayo a octubre de 2009, «llegando a secar espacios de interés ambiental y afectando a la propagación e incidencia de un proceso degenerativo que está dañando el área del río Avia, con carencia de escala de peces en el pantano de Albarellos».

También aluden a la dejación en sus funciones de las administraciones competentes denunciadas y a actuaciones realizadas nocivas para la conservación y protección del ecosistema fluvial.

Los ecologistas de Coto do Frade responsabilizan de esa situación, que ha provocada la degradación ambiental del curso fluvial, a la empresa Gas Natural-Unión Fenosa, como gestor del pantano de Albarellos en el río Avia; a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y a las consellerías de Medio Rural y Medio Ambiente de la Xunta de Galicia.

En la denuncia indican que se han conculcado normas de lo «específicamente dispuesto en la Directiva 92/43/CEE, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres, Directiva hábitats, y la Directiva 2000/60/CEE, marco de actuación en política de aguas».

Para esta agrupación verde el estado de estrés ecológico y la vulnerabilidad de la vegetación de las riberas del curso fluvial «obedece, como factor definitivo, a la incidencia del embalse de Albarellos, carente de un sistema efectivo para el mantenimiento del caudal ecológico». Añaden que el tramo de río que debería discurrir entre la citada presa y la salida de la turbina, unos 5 kilómetros, «desaparece como por arte de magia llegado el verano».