Los embalses del Turia se llenan y obligan a llevar agua a la Albufera
Mié, 10/02/2010
Los embalses de Benagéber y Loriguilla han agotado su capacidad para retener los generosos caudales que siguen llegando a la provincia de Valencia procedentes de Teruel y han obligado a la Confederación Hidrográfica del Júcar a poner en marcha una campaña que pretende aprovechar al máximo estos excedentes. La solución adoptada por la CHJ ha sido desviar 2 metros cúbicos/segundo por el Canal Principal del Camp de Turia y descargar un metro cúbico en la Rambla de Pilatos y otro metro cúbico en la Rambla de Aceña sobre terrenos muy permeables en los que el agua se infiltra y refuerza el acuífero, muy explotado en los meses de verano. Desde el embalse de Loriguilla, que crece muy ligeramente, se está dejando salir 4,5 metros cúbicos por segundo que son enviados a la Albufera a través de las acequias del Oro y Favara. A día de ayer, el Turia seguía aportando en Zagra, a cola del embalse de Benagéber, casi 13 metros cúbicos por segundo, lo que representa más de un hectómetro cúbico diario. Sin embargo, Benagéber dispone ya de 216,4 hectómetros cúbicos y se encuentra al 97,7% de su capacidad, con un mínimo resguardo de seguridad que impide almacenar más agua en esta época del año según las normas de explotación. Aguas abajo, Loriguilla se encuentra al 40,06% con 29,3 hm3. Este embalse, el último antes de la plana de inundación de Valencia, tiene unas restricciones de llenado superiores a Benagéber también por razones de seguridad, aunque podría recibir más agua. Sin embargo, actualmente se encuentra en obras , con buzos trabajando en la adecuación de los equipos electromagnéticos e hidromecánicos del desagüe de fondo de la presa. Se trata de una obra presupuestada en 783.000 euros que no estará finalizada hasta finales de este año.
Tuberías del canal del Camp de Túria empleadas para distribuir las aguas sobrantes. Los embalses de las cuencas del Segura y del Júcar son los únicos de España que siguen por debajo del 50 por ciento de su capacidad, ya que están al 41,2 y al 41,3 por ciento, respectivamente, aunque esos niveles casi duplican la cantidad de agua embalsada que tenían hace dos años. En la actualidad, en la cuenca del Júcar, se disponen de reservas que ascienden a 1.379 hectómetros cúbicos, cifra equivalente a un 41,3 % total de la reserva (uso consuntivo más hidroeléctrico), con un incremento de 289 hectómetros cúbicos respecto al año anterior. En términos porcentuales, en 2009 los embalses estaban en esta misma época del año al 32,6% mientras que en 2008 apenas llegaban al 21,5%. Más aún, la media de los últimos 10 años es el 25,6%, muy inferior a las reservas actuales.
Tuberías del canal del Camp de Túria empleadas para distribuir las aguas sobrantes. Los embalses de las cuencas del Segura y del Júcar son los únicos de España que siguen por debajo del 50 por ciento de su capacidad, ya que están al 41,2 y al 41,3 por ciento, respectivamente, aunque esos niveles casi duplican la cantidad de agua embalsada que tenían hace dos años. En la actualidad, en la cuenca del Júcar, se disponen de reservas que ascienden a 1.379 hectómetros cúbicos, cifra equivalente a un 41,3 % total de la reserva (uso consuntivo más hidroeléctrico), con un incremento de 289 hectómetros cúbicos respecto al año anterior. En términos porcentuales, en 2009 los embalses estaban en esta misma época del año al 32,6% mientras que en 2008 apenas llegaban al 21,5%. Más aún, la media de los últimos 10 años es el 25,6%, muy inferior a las reservas actuales.