El agua del Júcar recorre ya el primer tramo del trasvase
Sáb, 16/01/2010
Comienza a llenarse con recursos superficiales del río Júcar la Balsa de Panser, ubicada en el municipio valenciano de Llaurí, junto a la AP-7.
Coincidiendo con la llegada del nuevo año, las aguas del curso bajo del río Júcar comienzan a llenar ya la primera balsa de regulación de la Conducción Júcar-Vinalopó: la Balsa de Panser. Esta balsa, que puede almacenar hasta 200.000 m3 de agua del Júcar, está ubicada en el término municipal de Llaurí, junto a la Autopista del Mediterráneo (AP-7), y forma parte del primer tramo del trasvase, el Tramo A, que transcurre a lo largo de 8.776 mts., entre el punto de toma en el Azud de la Marquesa (Cullera) y la Sierra de Corbera (Llaurí).
Una vez realizadas las correspondientes pruebas de captación e impulsión en las instalaciones construidas junto al Azud de la Marquesa, a tan sólo 3 kilómetros de la desembocadura del río Júcar, la UTE adjudicataria del Tramo A, compuesta por las empresas Dragados y Cleop, ha comenzado los trabajos de llenado de la Balsa de Panser. Esta balsa, al igual que la de Llanera de Ranes y la de Moixent, permitirá regular los caudales que serán enviados al Vinalopó. Precisamente, en agosto del pasado año la sociedad estatal Aguas del Júcar, S.A. (acuaJúcar) procedía a realizar también las primeras pruebas de llenado de la Balsa de Llanera de Ranes. Gracias a una captación provisional en el río Albaida, se están llevando a cabo todas las pruebas técnicas necesarias a lo largo de otros 70 kilómetros de trasvase, entre Barxeta y Villena, antes de la puesta en marcha definitiva de la Conducción prevista para mediados de este año.
La Conducción Júcar-Vinalopó es una infraestructura que ejecuta el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, a través de la sociedad estatal acuaJúcar, y cuyo principal objetivo es recuperar los acuíferos sobre-explotados del Vinalopó, respetando los derechos de los usuarios del Júcar y las condiciones ambientales del río y la Albufera, tal y como exige la UE. Se trata de una infraestructura estratégica para la Comunitat Valenciana, y muy especialmente para la provincia de Alicante, que permitirá trasvasar al Vinalopó hasta 80 hm3 de agua al año procedente de sobrantes del curso bajo del río Júcar. La inversión prevista supera los 320 millones de euros, y cuenta con el respaldo de la Comisión Europea que financia el proyecto con 120 millones de euros. El grado de ejecución de las obras ronda ya el 92% del total.
Coincidiendo con la llegada del nuevo año, las aguas del curso bajo del río Júcar comienzan a llenar ya la primera balsa de regulación de la Conducción Júcar-Vinalopó: la Balsa de Panser. Esta balsa, que puede almacenar hasta 200.000 m3 de agua del Júcar, está ubicada en el término municipal de Llaurí, junto a la Autopista del Mediterráneo (AP-7), y forma parte del primer tramo del trasvase, el Tramo A, que transcurre a lo largo de 8.776 mts., entre el punto de toma en el Azud de la Marquesa (Cullera) y la Sierra de Corbera (Llaurí).
Una vez realizadas las correspondientes pruebas de captación e impulsión en las instalaciones construidas junto al Azud de la Marquesa, a tan sólo 3 kilómetros de la desembocadura del río Júcar, la UTE adjudicataria del Tramo A, compuesta por las empresas Dragados y Cleop, ha comenzado los trabajos de llenado de la Balsa de Panser. Esta balsa, al igual que la de Llanera de Ranes y la de Moixent, permitirá regular los caudales que serán enviados al Vinalopó. Precisamente, en agosto del pasado año la sociedad estatal Aguas del Júcar, S.A. (acuaJúcar) procedía a realizar también las primeras pruebas de llenado de la Balsa de Llanera de Ranes. Gracias a una captación provisional en el río Albaida, se están llevando a cabo todas las pruebas técnicas necesarias a lo largo de otros 70 kilómetros de trasvase, entre Barxeta y Villena, antes de la puesta en marcha definitiva de la Conducción prevista para mediados de este año.
La Conducción Júcar-Vinalopó es una infraestructura que ejecuta el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, a través de la sociedad estatal acuaJúcar, y cuyo principal objetivo es recuperar los acuíferos sobre-explotados del Vinalopó, respetando los derechos de los usuarios del Júcar y las condiciones ambientales del río y la Albufera, tal y como exige la UE. Se trata de una infraestructura estratégica para la Comunitat Valenciana, y muy especialmente para la provincia de Alicante, que permitirá trasvasar al Vinalopó hasta 80 hm3 de agua al año procedente de sobrantes del curso bajo del río Júcar. La inversión prevista supera los 320 millones de euros, y cuenta con el respaldo de la Comisión Europea que financia el proyecto con 120 millones de euros. El grado de ejecución de las obras ronda ya el 92% del total.