La Universidad de Zaragoza descubre en Muel una de las presas romanas más importantes y mejor conservadas de España

Mié, 23/12/2009

Europa Press

El equipo multidisciplinar "Muel" de la Universidad de Zaragoza, coordinado desde el grupo de Investigación de Excelencia URBS, ha finalizado con gran éxito la primera campaña de excavaciones en la presa romana de Muel, ya que después de seis meses de trabajos los resultados demuestran que la presa romana de Muel (de 90 metros de longitud, 12 de altura y siete de anchura) es uno de los monumentos de arqueología hidráulica más importantes por su tamaño y mejor conservados de España.
En declaraciones a Europa Press, una de las directoras científicas de la excavación, María Ángeles Magallón, explicó que el pasado año recibieron el apoyo del Gobierno de Aragón para realizar un proyecto de investigación en esta presa, donde comenzaron a hacer excavaciones y han trabajado desde junio a noviembre.
Así, "nos hemos encontrado con la sorpresa de que la presa está muy bien conservada", aunque en estos momentos "está enmascarada por la vegetación y no se ve bien", apuntó.
El equipo de trabajo, en su labor de excavación, comprobó que el interior de la presa, "aguas arriba, está extraordinariamente bien conservado", afirmó Magallón, al señalar que se debe a que ha estado cubierta durante años, ya que "la presa se debió colmatar bastante pronto", lo que ha posibilitado su mantenimiento interno, mientras que la parte externa "está peor conservada".
Además, este monumento tiene una peculiaridad importante y es que sobre la presa "se hizo una ermita que pintó Francisco de Goya", lo que la convierte en una presa única, indicó María Ángeles Magallón.
Una vez terminada esta primera campaña de trabajos, "ahora estudiaremos lo que hemos sacado este año", los restos obtenidos de la necrópolis encontrada en la presa y los trozos de cerámica, porque "queremos continuar el próximo año con la investigación en la presa y presentaremos proyectos a las administraciones para que nos echen una mano y seguir investigando" en la zona.

CONSTRUIDA EN EL SIGLO I

Las investigaciones en Muel han permitido confirmar que la presa fue construida en el siglo I por los legionarios que fundaron la colonia de Caesaraugusta para su abastecimiento de agua. Los legionarios dejaron constancia de su participación en este tipo de infraestructuras, con el nombre de la Legio IIII, grabado en los sillares de la presa, de la misma manera que hicieron en otras partes del Valle del Ebro como, por ejemplo, en los miliarios de las vías romanas.
El temprano colmado del vaso de la presa ha preservado el monumento, por lo que se encuentra en un estado de conservación óptimo. Sobre los sedimentos que se depositaron en el embalse se desarrollaron diferentes cultivos, viviendas y una gran necrópolis con la osamenta de una treintena de individuos, que vivieron entre los siglos XIV y XVI, descubierta al realizar las excavaciones necesarias para conocer el estado de la presa aguas arriba.
El objetivo del grupo de investigación Muel de la Universidad de Zaragoza es seguir con las excavaciones para profundizar en el conocimiento de la presa y de la necrópolis en su totalidad, y poner en valor los vestigios de uno de los monumentos relacionados con la arqueología hidráulica mejor conservados de España.
Se espera además que esta apuesta pueda repercutir en la calidad de la oferta cultural de la localidad, según señala María Ángeles Magallón, directora científica de la excavación junto a la también profesora de la Universidad de Zaragoza, Paula Uribe.

UBICACIÓN ACCESIBLE

Su accesibilidad es evidente, ya que la presa romana de Muel se encuentra ubicada en la misma localidad zaragozana, en el Parque de Nuestra señora de la Ermita, construida sobre el embalse en el siglo XVIII, y pintada por Goya en 1870. En el yacimiento se puede observar la coronación de la presa, y se espera que en futuras campañas quede al descubierto buena parte del monumento.
El estudio de la presa romana de Muel ha comenzado este año y forma parte un ambicioso estudio de investigación sobre presas en Aragón, en general, y entre las que se pretende estudiar las de Muniesa, Almonacid de la Cuba, Monreal del Campo (Teruel), y la del río Guatizalema, en Huesca.
El grupo de investigación decidió iniciar los trabajos sobre la de Muel, de la que apenas existían estudios salvo los realizados por el catedrático Guillermo Fatás en 1964.
El grupo de investigación 'Muel' de la Universidad de Zaragoza ha comprendido además la importancia del monumento y la necesidad de trabajar de forma multidisciplinar: arqueólogos, edafólogos, palinólogos, sedimentológos, geomorfólogos, ceramólogos participan en el proyecto, al que unen los datos que proporcionan las dataciones por Carbono 14, los análisis de las arcillas.
Precisamente el estudio de las cerámicas encontradas en la necrópolis ha permitido al investigador de Muel, Javier Fanlo, fechar los restos humanos y situarlos entre los siglos XIV y XVI.

ESTUDIOS MULTIDISCIPLINARES

Ésta es la primera vez que se conforma en Aragón, coordinado por el Área de Arqueología del Departamento de Ciencias de la Antigüedad, un gran equipo formado por diferentes investigadores de las ramas humanísticas, técnicas y científicas de la Universidad de Zaragoza.
Los profesores y colaboradores del Área de Arqueología del Departamento de Ciencias de la Antigüedad, Paula Uribe, Ángeles Magallón, Javier Fanlo y Manuel Martinez; los miembros del Instituto Pineraico de Ecología, C. Silva, y los profesores del Departamento de Ciencias de la Tierra, Arsenio Muñoz, y del Departamento de Geografía de la Facultad de Letras, José L. Peña, junto con otros especialistas de las Universidades de Burdeos, País Vasco y Salamanca, han formado un equipo pluridisciplinar que se enriquece mutuamente con las diferentes líneas que ofrecen los datos obtenidos del estudio de la presa.
El monumento contará además con una recreación gracias a la utilización de un escáner en tres dimensiones, que lleva a cabo la empresa spin off, Scanner Patrimonio e Industria, que es pionera en Aragón.