Los pescadores denuncian los vertidos de lodos al cauce del Nora
Vie, 18/12/2009
Cuatro pescadores de Siero y representantes de las asociaciones Amigos del Nalón, Mestas del Narcea, El Esmerillón y La Asturiana denunciaron ayer en La Pola la gran contaminación que presenta el agua del río Nora, desde Lieres hacia abajo, y pidieron a la Consejería de Infraestructuras que ataje la situación.
Estos pescadores -Fernando Norniella, José Antonio Alonso, José Amalio Artos y Antonio Roces- aseguraron ayer que, desde el pasado mes de octubre, venían observando que el río se teñía de un color blanco, lo que les llevó a recorrer toda la orilla hasta localizar el origen. Y la conclusión fue que la causante de la contaminación fluvial es la obra del túnel de Curuxera, dentro del proyecto autonómico de la 'Y' de Bimenes.
Según explicaron los pescadores, el proceso de perforación de la roca se está realizando con grandes barrenas, para después colocar los explosivos. Esas barrenas llevan agua incorporada para extraer los restos de la perforación, compuestos por lodos muy finos. «Esos lodos deberían ir a una balsa de decantación, pero en este caso se vierten directamente a la Riega del Pielgón, que desemboca en el río Nora a la altura de Lieres», aseguraron.
Los pescadores advirtieron de que la presencia de estos vertidos en el cauce fluvial supone «la muerte por asfixia de todo su ecosistema acuático, pues estos lodos depositados sobre el lecho matan toda la fauna invertebrada de la que se alimentan los peces, en este caso las truchas».
Recordaron también que esta época del año es, precisamente, la más delicada, puesto que se está produciendo el desove de los peces. «Mucho nos tememos que no sirvan para nada, pues con toda certeza morirán las huevas por asfixia».
Las cuatro asociaciones a la que pertenecen estos pescadores de Siero son colaboradoras habituales de la Viceconsejería de Medio Ambiente y los asociados de Siero llevan muchos años repoblando el río Nora, en el tramo comprendido entre Sariego y Colloto.
400.000 euros
En los últimos cinco años, calculan haber arrojado al cauce del Nora unos 400.000 alevines de trucha común, procedente de sus centros ictológicos. Incluso la Dirección General de Pesca llegó a crear un vedado entre Pola de Siero y Lieres «en el que los paseantes podían observar miles de truchas a simple vista», comentaron.
Estos pescadores lamentan que se impulsen planes técnicos y restricciones para proteger al salmón, «pero de la trucha nadie se acuerda, sobre todo en ríos pequeños como el Nora». La queja de los pescadores se suma a las denuncias recientes del Club Kayak Siero y de Izquierda Unida sobre la situación del río.
Estos pescadores -Fernando Norniella, José Antonio Alonso, José Amalio Artos y Antonio Roces- aseguraron ayer que, desde el pasado mes de octubre, venían observando que el río se teñía de un color blanco, lo que les llevó a recorrer toda la orilla hasta localizar el origen. Y la conclusión fue que la causante de la contaminación fluvial es la obra del túnel de Curuxera, dentro del proyecto autonómico de la 'Y' de Bimenes.
Según explicaron los pescadores, el proceso de perforación de la roca se está realizando con grandes barrenas, para después colocar los explosivos. Esas barrenas llevan agua incorporada para extraer los restos de la perforación, compuestos por lodos muy finos. «Esos lodos deberían ir a una balsa de decantación, pero en este caso se vierten directamente a la Riega del Pielgón, que desemboca en el río Nora a la altura de Lieres», aseguraron.
Los pescadores advirtieron de que la presencia de estos vertidos en el cauce fluvial supone «la muerte por asfixia de todo su ecosistema acuático, pues estos lodos depositados sobre el lecho matan toda la fauna invertebrada de la que se alimentan los peces, en este caso las truchas».
Recordaron también que esta época del año es, precisamente, la más delicada, puesto que se está produciendo el desove de los peces. «Mucho nos tememos que no sirvan para nada, pues con toda certeza morirán las huevas por asfixia».
Las cuatro asociaciones a la que pertenecen estos pescadores de Siero son colaboradoras habituales de la Viceconsejería de Medio Ambiente y los asociados de Siero llevan muchos años repoblando el río Nora, en el tramo comprendido entre Sariego y Colloto.
400.000 euros
En los últimos cinco años, calculan haber arrojado al cauce del Nora unos 400.000 alevines de trucha común, procedente de sus centros ictológicos. Incluso la Dirección General de Pesca llegó a crear un vedado entre Pola de Siero y Lieres «en el que los paseantes podían observar miles de truchas a simple vista», comentaron.
Estos pescadores lamentan que se impulsen planes técnicos y restricciones para proteger al salmón, «pero de la trucha nadie se acuerda, sobre todo en ríos pequeños como el Nora». La queja de los pescadores se suma a las denuncias recientes del Club Kayak Siero y de Izquierda Unida sobre la situación del río.