Existen territorios que por sus condiciones geográficas concretas corren un mayor riesgo de sufrir importantes episodios de lluvias y, por lo tanto, inundaciones. Uno de los más claros ejemplos es La Marina Alta, que desde la riada de hace dos años, en la que en apenas unas horas se contabilizaron 200 litros, es objeto de constante estudio por parte de los científicos, quienes aseguran que las especiales condiciones orográficas de este litoral enmarcado entre sistemas montañosos lo hace más propenso a las fuertes precipitaciones.
El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) ha recomendado la creación de un sistema meteorológico específico para la zona basado en las últimas tecnologías que determine el riesgo de gota fría.
La petición del CEAM es urgente. Otros expertos como el profesor de la Universidad de Alicante Jorge Olcina, ya han advertido que periodos de fuertes lluvias como el que tuvo lugar en 2007 en la cuenca del río Girona pueden repetirse cada ocho o diez años. Hay otras comarcas en situaciones semejantes. De ahí que la directora del Programa de Meteorología y Climatología del CEAM, María José Estrela, abogara porque ese nuevo sistema de predicción meteorológica pudiera activar planes de emergencias globales para territorios como el del Girona que permitiría a disminuir los daños materiales.
Otras peticiones del CEAM son la sustitución de las cañas actuales existen en los lechos de los cauces por plantas autóctonas de los ríos del Mediterráneo, que son más finas y flexibles y evitarían que los caudales quedaran obstaculizados.