El Ejecutivo reduce a la mitad el trasvase al Segura para cultivos
Mié, 04/11/2009
Ni el informe presentado por la Generalitat ni la petición de los regantes ha servido para modificar el posicionamiento de la Comisión de Explotación del Tajo-Segura. El organismo que regula las transferencias aprobó ayer proponer al Consejo de Ministros que autorice un trasvase de 46,9 hectómetros.
Además, autorizó un envío de agua de emergencia de 20 hectómetros cúbicos para salvar las Tablas de Daimiel. El Gobierno tendrá ahora aprobar la propuesta, posiblemente en su reunión del viernes.
La decisión no ha dejado contentos ni a regantes, ni al Consell ni a los ecologistas. La cantidad es menor que los 49,4 hectómetros cúbicos que la comisión aprobó provisionalmente en octubre. El envío de agua a Daimiel ha supuesto al final un recorte de los recursos que llegarán a la Comunitat.
Los más afectados de la decisión han sido los regantes. Tan sólo recibirán 25 hectómetros (el resto se destina a consumo humano). Una cantidad que es insuficiente.
El presidente de los regantes del Tajo-Segura, José Manuel Claver, denunció una doble vara de medir por parte del Ministerio. Daimiel recibirá agua, pero no los cultivos.
Claver expresó su indignación porque en el Ministerio se han aducido razones ecológicas para no incrementar la cantidad destinada a riego. En cambio, estas razones no se han tenido en cuenta para el trasvase a Daimiel.
El presidente de los regantes, en declaraciones a la Agencia Efe, calificó de inaudito el posicionamiento del Ministerio. Apuntó que no están en contra del trasvase a Daimiel, sino que rechazan la doblez del Ministerio que llegó a calificar de «colmo de la incoherencia».
Los regantes consideran que para poder atender a sus necesidades tendrían que recibir 45 hectómetros cúbicos. Una propuesta que no fue atendida.
Como tampoco lo fue la presentada por el Consell de 69 hectómetros cúbicos, avalada por un informe de la Fundación Agua y Progreso y la Universidad de Alicante.
Agricultores y Consell estimaron que la petición se acoge a lo que señala el reglamento del trasvase, que permite transferir, con el nivel actual de los embalses, una cantidad de 23 hectómetros cúbicos cada uno de los tres meses.
Además, autorizó un envío de agua de emergencia de 20 hectómetros cúbicos para salvar las Tablas de Daimiel. El Gobierno tendrá ahora aprobar la propuesta, posiblemente en su reunión del viernes.
La decisión no ha dejado contentos ni a regantes, ni al Consell ni a los ecologistas. La cantidad es menor que los 49,4 hectómetros cúbicos que la comisión aprobó provisionalmente en octubre. El envío de agua a Daimiel ha supuesto al final un recorte de los recursos que llegarán a la Comunitat.
Los más afectados de la decisión han sido los regantes. Tan sólo recibirán 25 hectómetros (el resto se destina a consumo humano). Una cantidad que es insuficiente.
El presidente de los regantes del Tajo-Segura, José Manuel Claver, denunció una doble vara de medir por parte del Ministerio. Daimiel recibirá agua, pero no los cultivos.
Claver expresó su indignación porque en el Ministerio se han aducido razones ecológicas para no incrementar la cantidad destinada a riego. En cambio, estas razones no se han tenido en cuenta para el trasvase a Daimiel.
El presidente de los regantes, en declaraciones a la Agencia Efe, calificó de inaudito el posicionamiento del Ministerio. Apuntó que no están en contra del trasvase a Daimiel, sino que rechazan la doblez del Ministerio que llegó a calificar de «colmo de la incoherencia».
Los regantes consideran que para poder atender a sus necesidades tendrían que recibir 45 hectómetros cúbicos. Una propuesta que no fue atendida.
Como tampoco lo fue la presentada por el Consell de 69 hectómetros cúbicos, avalada por un informe de la Fundación Agua y Progreso y la Universidad de Alicante.
Agricultores y Consell estimaron que la petición se acoge a lo que señala el reglamento del trasvase, que permite transferir, con el nivel actual de los embalses, una cantidad de 23 hectómetros cúbicos cada uno de los tres meses.