Detectan una bacteria en el agua de León que provoca gastroenteritis
Jue, 29/10/2009
Investigadores en Microbiología de los Alimentos de la Universidad de León han detectado, a través de análisis en el abastecimiento del agua potable de la ciudad de León, la presencia de un microorganismo relacionado con enfermedades intestinales como la gastroenteritis. La bacteria, del género Aeromonas, estuvo presente en una cuarta parte de las muestras recogidas por los científicos. Un estudio del genotipo de los microorganismos hallados demostró que no presentaban un carácter virulento, por lo que no son peligrosas para la Salud pública. Los expertos, no obstante, recomiendan monitorizar de forma habitual la presencia de este agente por su incidencia especialmente entre los menores.
En el trabajo, financiado por un proyecto de investigación del antiguo Ministerio de Educación y Ciencia, los científicos, adscritos al Departamento de Higiene y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de León, plantearon un análisis de tres puntos diferentes en el abastecimiento municipal de León: antes de que el agua llegara al depósito, en el agua ya tratada para el consumo y en fuentes artesianas en las vías públicas, que generalmente no están conectadas al servicio general. Los investigadores tomaron un total de 132 muestras y realizaron determinaciones para comprobar la calidad del agua, a través de la detección de presencia de microorganismos regulares y coliformes, y midieron los niveles de cloro y pH del agua. En este análisis incluyeron la detección de aeromonas, y manejaron además los datos de la temperatura ambiente y del agua. El análisis se llevó a cabo entre octubre de 2005 y septiembre de 2006 y los resultados se han publicado recientemente en International Journal of Food Microbiology.
«La calidad microbiológica de León es en líneas generales buena», comenta a Dicyt Jesús Santos, uno de los participantes en el trabajo. No en vano, el 96% de las muestras tomadas cumplía las especificaciones legales. Sin embargo, el 265% de estas tomas contenían aeromonas, especialmente en el periodo comprendido entre octubre y marzo.
En el trabajo, financiado por un proyecto de investigación del antiguo Ministerio de Educación y Ciencia, los científicos, adscritos al Departamento de Higiene y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de León, plantearon un análisis de tres puntos diferentes en el abastecimiento municipal de León: antes de que el agua llegara al depósito, en el agua ya tratada para el consumo y en fuentes artesianas en las vías públicas, que generalmente no están conectadas al servicio general. Los investigadores tomaron un total de 132 muestras y realizaron determinaciones para comprobar la calidad del agua, a través de la detección de presencia de microorganismos regulares y coliformes, y midieron los niveles de cloro y pH del agua. En este análisis incluyeron la detección de aeromonas, y manejaron además los datos de la temperatura ambiente y del agua. El análisis se llevó a cabo entre octubre de 2005 y septiembre de 2006 y los resultados se han publicado recientemente en International Journal of Food Microbiology.
«La calidad microbiológica de León es en líneas generales buena», comenta a Dicyt Jesús Santos, uno de los participantes en el trabajo. No en vano, el 96% de las muestras tomadas cumplía las especificaciones legales. Sin embargo, el 265% de estas tomas contenían aeromonas, especialmente en el periodo comprendido entre octubre y marzo.