Expertos proponen construir embalses en la costa para captar el agua de las riadas
Vie, 16/10/2009
El último episodio de gota fría en el litoral de Castelló ha puesto de manifiesto un cambio del régimen de lluvias en la cuenca del mediterráneo. Año tras año crecer el número de precipitaciones extremas en la costa mientras se reducen las tormentas en el interior. Es una primera señal del cambio climático y explica la profusión de los fenómenos torrenciales en la costa castellonense, según señalaron ayer diversos expertos en meteorología en unas jornadas celebradas en la UJi.
Especialistas en la materia como el director ejecutivo de la fundación Ceam, Millán Millan-Muñoz; el director del Laboratorio del Clima en la Jaume I, José Quereda, y el jefe de Meteorología de Telecinco, Mario Picazo, culparon al boom de la construcción de esta modificación de las lluvias y propusieron la construcción de embalses en la franja litoral con el fin de aprovechar esa agua de las riadas que habitualmente acaba en el mar.
Ésta fue una de las propuestas que trasladaron los tres investigadores, quienes junto a la responsable de Energía y Cambio Climático de Greenpeace, Raquel Montón, protagonizaron un entusiasta debate sobre el cambio climático. Los cuatro coincidieron a la hora de responsabilizar al urbanismo descontrolado de los cambios meteorológicos en el litoral mediterráneo.
Millán Millán indicó que las modificaciones del uso del suelo han trastocado el proceso de evaporización y explican la pérdida de tormentas en el interior, las lluvias torrenciales en la costa e incluso las inundaciones registradas en el centro y este de Europa, y lamentó que estas primeras evidencias del "cambio climático" ya se vaticinaron hace 30 años. "Ahora se genera al año entre 90 y 120 litros por metro cuadrado en la costa, una cantidad que ya no descarga en el interior", apuntó.
Quereda añadió que la superficie urbana ha crecido en las últimas décadas un 1% al año, lo que ha incidido en la pauta de las lluvias. Por ello, tanto Millán Millán, como Quereda y Picazo recomendaron el desarrollo de pantanos en la costa. Con todo, el director del Laboratorio del Clima de la UJI agregó que de momento la provincia cuenta con suficientes reservas hídricas.
Quereda, en cambio, mostro alguna discrepancia con sus compañeros respecto a la existencia del cambio climático. Afirmó que todavía hay muchas incertidumbres a nivel científico sobre ello, aunque reconoció que hay que actuar para preservar el medio ambiente. La responsable de Greenpeace le contestó de esta manera: "No hay que esperar el deshielo del ártico para constatar que se ha derretido".
Especialistas en la materia como el director ejecutivo de la fundación Ceam, Millán Millan-Muñoz; el director del Laboratorio del Clima en la Jaume I, José Quereda, y el jefe de Meteorología de Telecinco, Mario Picazo, culparon al boom de la construcción de esta modificación de las lluvias y propusieron la construcción de embalses en la franja litoral con el fin de aprovechar esa agua de las riadas que habitualmente acaba en el mar.
Ésta fue una de las propuestas que trasladaron los tres investigadores, quienes junto a la responsable de Energía y Cambio Climático de Greenpeace, Raquel Montón, protagonizaron un entusiasta debate sobre el cambio climático. Los cuatro coincidieron a la hora de responsabilizar al urbanismo descontrolado de los cambios meteorológicos en el litoral mediterráneo.
Millán Millán indicó que las modificaciones del uso del suelo han trastocado el proceso de evaporización y explican la pérdida de tormentas en el interior, las lluvias torrenciales en la costa e incluso las inundaciones registradas en el centro y este de Europa, y lamentó que estas primeras evidencias del "cambio climático" ya se vaticinaron hace 30 años. "Ahora se genera al año entre 90 y 120 litros por metro cuadrado en la costa, una cantidad que ya no descarga en el interior", apuntó.
Quereda añadió que la superficie urbana ha crecido en las últimas décadas un 1% al año, lo que ha incidido en la pauta de las lluvias. Por ello, tanto Millán Millán, como Quereda y Picazo recomendaron el desarrollo de pantanos en la costa. Con todo, el director del Laboratorio del Clima de la UJI agregó que de momento la provincia cuenta con suficientes reservas hídricas.
Quereda, en cambio, mostro alguna discrepancia con sus compañeros respecto a la existencia del cambio climático. Afirmó que todavía hay muchas incertidumbres a nivel científico sobre ello, aunque reconoció que hay que actuar para preservar el medio ambiente. La responsable de Greenpeace le contestó de esta manera: "No hay que esperar el deshielo del ártico para constatar que se ha derretido".