La gota fría permite al campo ahorrar un riego y ayuda a la recarga de acuíferos
Jue, 01/10/2009
La gota fría que ha azotado a la provincia no ha sido tan perjudicial. Y es que las lluvias caídas durante las últimas semanas en la Vega Baja, Vinalopó y la Marina Alta han sido muy acogidas por los agricultores de Alicante por ahorrar un riego, ayudar a la recarga de acuíferos y «lavar» la tierra de las sales de los pozos.
El presidente provincial de Asaja, Eladio Aniorte, señaló ayer que, salvo algunos perjudicados, las precipitaciones han sido «muy positivas» sobre todo en comarcas como la Vega Baja, con mayoría de cítricos y hortalizas.
«Estas lluvias hacían mucha falta para recargar los acuíferos y para que se lavaran los árboles y el suelo de las sales tan malas para los cultivos, que provienen de las aguas de pozos. Se puede decir que es un dinero que ha caído del cielo», apuntó.
Aniorte también recordó que ha habido algunos perjuicios, sobre todo en la uva de mesa del Vinalopó, en algunas de cuyas explotaciones sufren el «mal de uña», una pequeña incisión que podría pudrir la uva si no cesan las lluvias a partir de ahora.
De las hortalizas, apuntó que son casi todo «beneficios» aunque las lluvias retrasarán unos días las plantaciones de brócoli y la lechuga de invierno.
Por su parte, el responsable de La Unió Llauradors en Alicante, Juan Pastor, coincidió en que la uva de mesa del Vinalopó y la Marina Alta es la que más se ha visto perjudicada. Del Vinalopó añadió que ahora se necesita tiempo seco y temperaturas no muy altas para evitar que se pudra parte de la producción de esta uva.
En cuanto a los cítricos y hortalizas, coincidió en que las aguas han supuesto «mucho más que un riego» ya que han favorecido a recargar los acuíferos y a limpiar la tierra, tras casi medio año (desde el pasado abril) sin llover de forma generalizada.
Incidencias
El Centro de Coordinación de Emergencias ha gestionado durante las lluvias de los últimos días 4.025 incidentes de las 50.830 llamadas que ha recibido al teléfono 112 desde el pasado día 26, según informé el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, quien señaló que en estos momentos se están evaluando los daños para tramitar las ayudas oportunas a los afectados lo más pronto posible. La mayoría de los casos gestionados ha sido achiques, filtraciones, bloqueo de vehículos, rescates y accidentes de tráfico.
Sólo en Torrevieja -la comarca de la Vega Baja ha sido una de las más afectadas por la gota fría- los bomberos atendieron la pasada madrugada un centenar de llamadas y también hubo que ayudar a inquilinos a salir de sus casas, la mayoría en la zona de chalets cercana a las salinas, aunque sin mayor incidencia.
La provincia empezó ayer a recuperar la tranquilidad y a primeras horas de la mañana salió tímidamente el sol. Aun así, la lluvia volvió a ser protagonista y pasadas las seis de la tarde todavía seguía cortada la carretera de la Ronda Norte de Elche y 4.000 alumnos de la Comunitat Valenciana tampoco pudieron asistir a clase.
El conseller Serafín Castellano, señaló que a pesar de que la previsión meteorológica retrocede a nivel amarillo, la Generalitat mantiene la preemergencia en toda la autonomía por la posibilidad de que se produzcan tormentas.
El presidente provincial de Asaja, Eladio Aniorte, señaló ayer que, salvo algunos perjudicados, las precipitaciones han sido «muy positivas» sobre todo en comarcas como la Vega Baja, con mayoría de cítricos y hortalizas.
«Estas lluvias hacían mucha falta para recargar los acuíferos y para que se lavaran los árboles y el suelo de las sales tan malas para los cultivos, que provienen de las aguas de pozos. Se puede decir que es un dinero que ha caído del cielo», apuntó.
Aniorte también recordó que ha habido algunos perjuicios, sobre todo en la uva de mesa del Vinalopó, en algunas de cuyas explotaciones sufren el «mal de uña», una pequeña incisión que podría pudrir la uva si no cesan las lluvias a partir de ahora.
De las hortalizas, apuntó que son casi todo «beneficios» aunque las lluvias retrasarán unos días las plantaciones de brócoli y la lechuga de invierno.
Por su parte, el responsable de La Unió Llauradors en Alicante, Juan Pastor, coincidió en que la uva de mesa del Vinalopó y la Marina Alta es la que más se ha visto perjudicada. Del Vinalopó añadió que ahora se necesita tiempo seco y temperaturas no muy altas para evitar que se pudra parte de la producción de esta uva.
En cuanto a los cítricos y hortalizas, coincidió en que las aguas han supuesto «mucho más que un riego» ya que han favorecido a recargar los acuíferos y a limpiar la tierra, tras casi medio año (desde el pasado abril) sin llover de forma generalizada.
Incidencias
El Centro de Coordinación de Emergencias ha gestionado durante las lluvias de los últimos días 4.025 incidentes de las 50.830 llamadas que ha recibido al teléfono 112 desde el pasado día 26, según informé el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, quien señaló que en estos momentos se están evaluando los daños para tramitar las ayudas oportunas a los afectados lo más pronto posible. La mayoría de los casos gestionados ha sido achiques, filtraciones, bloqueo de vehículos, rescates y accidentes de tráfico.
Sólo en Torrevieja -la comarca de la Vega Baja ha sido una de las más afectadas por la gota fría- los bomberos atendieron la pasada madrugada un centenar de llamadas y también hubo que ayudar a inquilinos a salir de sus casas, la mayoría en la zona de chalets cercana a las salinas, aunque sin mayor incidencia.
La provincia empezó ayer a recuperar la tranquilidad y a primeras horas de la mañana salió tímidamente el sol. Aun así, la lluvia volvió a ser protagonista y pasadas las seis de la tarde todavía seguía cortada la carretera de la Ronda Norte de Elche y 4.000 alumnos de la Comunitat Valenciana tampoco pudieron asistir a clase.
El conseller Serafín Castellano, señaló que a pesar de que la previsión meteorológica retrocede a nivel amarillo, la Generalitat mantiene la preemergencia en toda la autonomía por la posibilidad de que se produzcan tormentas.