Gobierno y Comunidades diseñan planes hidrológicos contra el fuego
Jue, 23/07/2009
Cuando a incendios forestales se refiere, el hombre no sólo tropieza tres veces en la misma piedra, sino decenas. Un verano más, las noticias de vecinos desalojados y hectáreas destruidas protagonizan las portadas de los periódicos (esta semana por la pérdida de cuatro vidas humanas). Ayer, el Gobierno y las Comunidades Autónomas se reunieron para evaluar la evolución de los fuegos durante 2009 y anunciaron la puesta en marcha de 15 convenios de hidrología que tendrán una inversión de 54 millones de euros, enfocados sobre todo a tareas de prevención de incendios.
Un remedio necesario, ya que en lo que va de verano, las cifras de incendios ya superan con creces los niveles de 2008 del mismo período. El año pasado se declararon 7.190 fuegos y la superficie forestal arrasada fue de 33.755; mientras que en 2009, y sin contar los incendios del fin de semana, ya han aparecido 9.101 focos y 35.714 hectáreas han sido arrasadas.
En el futuro quizás haya más motivos para el optimismo, ya que expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de la Universidad de Lleida y de la Universidad de Alcalá, han desarrollando un modelo para predecir el riesgo de incendios forestales provocados por el hombre. El grupo de investigadores ha conseguido aunar este modelo, pionero en España, gracias a los datos de 6.006 municipios que han sufrido incendios forestales y que permitirán conocer con antelación el riesgo de que un municipio posea una alta incidencia de incendios causados por la acción humana y, de esta manera, poder evitarlos.
"El índice es una estimación de riesgo a largo plazo, más permanente y estable que la del corto", aclara Jesús Martínez, del Centro de Ciencias Medioambientales del CSIC. Además, afirma que "más del 90% de los incendios forestales en España se deben directa o indirectamente a la acción del hombre; sin embargo, los factores humanos apenas son tenidos en cuenta en los análisis de riesgo". Por ello, en este modelo, entre las 29 variables de riesgo seleccionadas, destacan algunas de carácter socioeconómico, como la tasa de paro.
Listos para la acción
A pesar del incremento en la cantidad de incendios forestales respecto a 2008, los datos de 2009 suponen una mejora respecto al promedio de los últimos cinco años. Las Comunidades Autónomas se encuentran en alerta desde junio hasta septiembre, período que corresponde con la campaña de extinción de fuegos en época de alto riesgo. En este mismo mes, las autoridades tenían ya preparado el Plan de actuaciones de prevención y lucha contra incendios para 2009 en el que consta una ayuda del Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino de 25,1 millones de euros a las comunidades autónomas, y otros 12 millones de euros procedentes del Fondo para el Patrimonio Natural y la Biodiversidad para el aprovechamiento de la biomasa forestal. Este dinero se está utilizando como subvenciones para la prevención de incendios a través del fomento de la vigilancia de los montes y el aumento de las infraestructuras preventivas, las actividades de silvicultura y la limpieza de los montes.
El Plan también prevé tres campañas de sensibilización e información dirigidas a los ciudadanos. Todo parece poco para acabar con el mismo mal de todos los veranos.
Un remedio necesario, ya que en lo que va de verano, las cifras de incendios ya superan con creces los niveles de 2008 del mismo período. El año pasado se declararon 7.190 fuegos y la superficie forestal arrasada fue de 33.755; mientras que en 2009, y sin contar los incendios del fin de semana, ya han aparecido 9.101 focos y 35.714 hectáreas han sido arrasadas.
En el futuro quizás haya más motivos para el optimismo, ya que expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de la Universidad de Lleida y de la Universidad de Alcalá, han desarrollando un modelo para predecir el riesgo de incendios forestales provocados por el hombre. El grupo de investigadores ha conseguido aunar este modelo, pionero en España, gracias a los datos de 6.006 municipios que han sufrido incendios forestales y que permitirán conocer con antelación el riesgo de que un municipio posea una alta incidencia de incendios causados por la acción humana y, de esta manera, poder evitarlos.
"El índice es una estimación de riesgo a largo plazo, más permanente y estable que la del corto", aclara Jesús Martínez, del Centro de Ciencias Medioambientales del CSIC. Además, afirma que "más del 90% de los incendios forestales en España se deben directa o indirectamente a la acción del hombre; sin embargo, los factores humanos apenas son tenidos en cuenta en los análisis de riesgo". Por ello, en este modelo, entre las 29 variables de riesgo seleccionadas, destacan algunas de carácter socioeconómico, como la tasa de paro.
Listos para la acción
A pesar del incremento en la cantidad de incendios forestales respecto a 2008, los datos de 2009 suponen una mejora respecto al promedio de los últimos cinco años. Las Comunidades Autónomas se encuentran en alerta desde junio hasta septiembre, período que corresponde con la campaña de extinción de fuegos en época de alto riesgo. En este mismo mes, las autoridades tenían ya preparado el Plan de actuaciones de prevención y lucha contra incendios para 2009 en el que consta una ayuda del Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino de 25,1 millones de euros a las comunidades autónomas, y otros 12 millones de euros procedentes del Fondo para el Patrimonio Natural y la Biodiversidad para el aprovechamiento de la biomasa forestal. Este dinero se está utilizando como subvenciones para la prevención de incendios a través del fomento de la vigilancia de los montes y el aumento de las infraestructuras preventivas, las actividades de silvicultura y la limpieza de los montes.
El Plan también prevé tres campañas de sensibilización e información dirigidas a los ciudadanos. Todo parece poco para acabar con el mismo mal de todos los veranos.