Cinco depuradoras de agua funcionarán con energía solar y permitirán sanear las cuencas de los ríos Ulla, Umia, Lérez y Verdugo, anunció ayer el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán. El proyecto, cofinanciado por el programa de cooperación transfronteriza España-Portugal 2007-2013, tiene como objetivo mejorar los sistemas de saneamiento y depuración de esta zona limítrofe entre ambos países limitando el consumo energético. Con un presupuesto de 3,7 millones de euros, el proyecto prevé la construcción de las depuradoras en puntos estratégicos de las cuencas fluviales de los cuatro ríos, con el objetivo de desarrollar un plan de valorización y recuperación ambiental de la zona, aseguran desde la Diputación. Las depuradoras solares contarán con una infraestructura de captación de energía solar a través de paneles fotovoltáicos. Según detalló Rafael Louzán «unha depuradora de aireación biolóxica en planta compacta consume unha media de 12 kilovatios», mientras que «a instalación fotovoltáica produce aproximadamente 3,2 kilovatios», que, además, están primados por tratarse de una producción de energía renovable, por lo que el ahorro económico «será superior», sentenció. Las instalaciones dispondrán de una tanque de recogida de agua depurada para camiones cisterna en caso de una emergencia para extinguir incendios forestales. La iniciativa se inscribe en el proyecto Ecoredesaneasol, financiado por el programa de cooperación transfronteriza España-Portugal 2007-2013, orientado a mejorar los sistemas de saneamiento y depuración del norte de Portugal y la provincia de Pontevedra. La iniciativa tendrá un coste total de 3.750.000 euros, y deberá estar ejecutado antes del mes de diciembre de 2010.