El presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, destacó hoy el "esfuerzo" que realiza la Comunitat Valenciana en materia de reutilización de agua, con un total de 128 litros por habitante al día, frente a los entre 4 y 14 litros que reutilizan las comunidades autónomas limítrofes.

En su visita hoy a Alicante para presidir el acto de colocación de la primera piedra del sistema integral de saneamiento, depuración y reutilización de la comarca de l'Alacantí Sur, Camps resaltó "la diferencia que hay entre el esfuerzo" que hace la Comunitat Valenciana, "en eficacia y en eficiencia en el uso del agua en relación con el resto de los territorios autonómicos que circundan nuestra comunidad".

"Ya sólo con este dato, es una clara demostración de que nuestra exigencia y nuestra petición tiene toda la justicia y toda la fuerza", subrayó en su intervención ante las autoridades que le acompañaron en el acto, entre ellas el conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, José Ramón García Antón, así como el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, y las alcaldesas de Alicante y de Sant Vicente del Raspeig, Sonia Castedo y Luisa Pastor, respectivamente.

Camps recordó que en los últimos 15 años, el número de depuradoras ha pasado de 200 a 460 plantas en toda la Comunitat Valenciana. "Hemos aumentado de forma evidente unas instalaciones fundamentales para entender qué esfuerzo ponemos y para seguir consolidando nuestro discurso en torno al agua", señaló.

Toda esta labor en materia de depuración y reutilización "no suple" las necesidades que la Generalitat valenciana, sino que "falta otro sistema de obtención de agua para nuestra tierra", según recordó.

En este sentido, afirmó que el "no" al trasvase del agua del Ebro y al trasvase del Tajo al Segura "ni se justifica ni significa que el esfuerzo que pueda hacer cualquier administración, incluida la nuestra, pueda dejar en suspenso cualquier otro tipo de obra que estamos pidiendo".

Por ello, reivindicó el trasvase del Ebro, el del Júcar al Vinalopó y el mantenimiento del Tajo-Segura como "peticiones justas y necesarias para los valencianos", y consideró que "nunca un pueblo exigió con más garantía un elemento tan necesario como el agua, trabajando para justificar esa exigencia y esa petición".

Camps además lamentó que mientras la Administración Autonómica, las Diputaciones Provinciales, los Ayuntamientos, los regantes y agricultores "están haciendo todo lo previsto, otras administraciones decidieron mirar hacia otra parte, apoyando otros sistemas que dijimos que no eran alternativa y así se ha demostrado".

NUEVA DEPURADORA

La nueva depuradora, cuyas obras tienen un coste de 39,6 millones de euros, forma parte del Plan de Infraestructuras Hidráulicas de la Comunitat Valenciana, y una vez finalizada tendrá una capacidad de tratamiento de 30.000 metros cúbicos al día --cuatro hectómetros cúbicos de agua al año--, y generará un total de 1.000 empleos.

Con ella, se tratarán las aguas residuales procedentes de San Vicente del Raspeig, del polígono industrial del Pla de la Vallonga y de la futura expansión urbanística de Alicante.

Además, esta planta tendrá un carácter sostenible e integrado en el entorno, y para ello contará con unas instalaciones de eficiencia energética que evitarán la emisión a la atmósfera de más de 1.140 toneladas al año de CO2.