Feragua cree que el Acuerdo Andaluz por el Agua, en su redacción actual, no garantiza el principio de unidad de cuenca

Jue, 13/11/2008

Europa Press

El representante de Feragua y presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore), Andrés del Campo, afirmó hoy que el Acuerdo Andaluz por el Agua, en su redacción actual, no garantiza el principio de unidad de cuenta.

Así lo puso de manifiesto Del Campo, según informó Feragua en un comunicado, durante la participación de dicha organización en la jornada organizada hoy en Córdoba por la Consejería de Medio Ambiente para debatir, precisamente, sobre el Acuerdo Andaluz por el Agua, actualmente en fase de elaboración y negociación con los diferentes agentes económicos y sociales.

En este contexto, Feragua expuso las dudas que mantiene ahora mismo en relación con la posibilidad de adherirse a este acuerdo, dudas provocadas por "la distancia que existe entre el borrador que está barajando en este momento la Agencia Andaluza del Agua y los planteamientos del regadío".

Estas distancias son particularmente importantes en lo que se refiere al modelo de administración hidráulica, pues Feragua cree que "el principio de unidad de cuenca no quedará preservado si se mantienen las direcciones provinciales que ahora mismo ya funcionan en las cuencas litorales, bajo la responsabilidad de los delegados provinciales de Medio Ambiente de la Junta".

En palabras de Andrés del Campo, "conservar ese esquema y reproducirlo en el Guadalquivir significaría tanto como abrir la caja de los truenos de las tensiones políticas y territoriales, convirtiendo las cuencas en auténticos reinos de taifas".

En consecuencia, ha demandado a la Agencia Andaluza del Agua mayor determinación y coraje político para acabar con un modelo que no funciona en el litoral andaluz y empezar a construir una verdadera administración hidráulica moderna, eficiente y transparente.

Feragua ha solicitado asimismo en la jornada de debate de hoy en Córdoba una adecuada representación del colectivo de usuarios de regadío en los órganos de gobierno y planificación de la nueva administración hidráulica andaluza, "representación que ahora mismo en las cuencas litorales está reducida a la mitad de lo que marca la Ley de Aguas y de la que tenía el regadío en la Cuenca del Guadalquivir".

Asimismo, ha demandado el mantenimiento del actual régimen económico-financiero del agua de regadío, y ha exigido el respeto a los derechos y concesiones, a las aguas subterráneas de carácter privado y a los sistemas de explotación existentes. Por último, ha mostrado su oposición al nuevo "canon de utilización de infraestructuras superficiales", que sustituiría al actual canon de regulación.

El representante de Feragua ha señalado igualmente que la redacción actual del Acuerdo "hace una lectura demasiado literal de la Directiva Marco de Aguas, que contrasta con la transposición flexible que necesita una comunidad como Andalucía, donde los problemas son más de cantidad que de calidad de las aguas, pues, sin avanzar en la garantía de agua, no se puede avanzar en la calidad".

Finalmente, Andrés del Campo ha demandado, siendo Córdoba la provincia andaluza con mayor nivel de modernización de los regadíos, que el Acuerdo Andaluz por el Agua incluya incentivos para facilitar la modernización a nivel de parcelas denominada "equipamiento", al objeto de que las modernizaciones de regadíos en las infraestructuras colectivas de las comunidades de regantes "puedan culminarse con la necesaria instalación de sistemas de riego eficientes, como el riego localizado o las coberturas totales por aspersión".

PREDISPOSICIÓN AL ACUERDO

Feragua ha querido subrayar, no obstante, su "voluntad de diálogo y colaboración" y su "predisposición a llegar a un acuerdo que sea aceptable para todas las partes". Asimismo, ha valorado muy positivamente la idea del actual director de la Agencia de Andaluza del Agua, Jaime Palop, de activar el diálogo con todos los agentes económicos y sociales, a fin de llegar a un acuerdo básico sobre la gestión de agua en Andalucía.

En este sentido, los regantes se han mostrado esperanzados en que al final ese acuerdo sea posible y sirva para garantizar el suministro de agua en una región en la que los regantes llevan tres años sufriendo los efectos de la sequía, sometidos a fuertes restricciones.